"ESCANDINAVIA" VIDEO BAR
Publicado en May 03, 2009
"ESCANDINAVIA" VIDEO BAR
Juan Carlos Rivillas Álvarez, un amigo tan puto como yo pero más joven, decidió con otros dos colegas iniciar un negocio donde la alegría no fuera punto final sino antesala de las dulces promesas del amor y los placeres que todo ser humano busca en horas de soledad y de tristeza. Juan Carlos tiene además un halo de actor por fuera y de nobleza en redondo, amparado por una suerte loca, tan loca como el beso de una cobra y un conejo blanco, o una ardilla jugando en la punta de un cuchillo. Pero no es de Juan Carlos de quien intento hablar, sino de su negocio: un lugar tan cálido que hasta en las noches frías, cuando la calefacción brilla por su ausencia, el parpadear de las penumbras tibias se siente en los rincones más hondos de la casa, con un vaivén pausado en los ojos del mesero y en las manos precisas del barman trasnochado. Desde el último rincón (Rincón de los Secretos), donde se leen las Runas y se presagian cosas, hasta el primer espacio, donde pervive impávido como un dios enjaulado en su grandeza el viejo de amplias barbas que mira como un lince los abismos y cumbres de todo visitante, se desdoblan caricias de sexo y de ternura en la boca del lobo donde las ansias bailan su zarabanda de orgías en plena oscuridad. Así es Escandinavia: Patria de muchos besos, lente de voyeristas, paraíso de los sádicos, ilusión de los pedófilos, sueño de los impotentes, bastión de los escabrosos, frustración de los pacatos, esperanza de los tímidos, refugio de los solitarios, desazón de los traidores, valentía de los cobardes, hogar de los amigos, terror de los enemigos, reposo de los guerreros, apoyo de los vencidos, vergüenza de los cabrones, bazar de las fantasías, cementerio de los hipócritas, abrigo de los poetas, cielo de los mejores, infierno de los castos, renacimiento de todo, y por sobre todo lugar humano y sonriente, donde el placer y la inocencia no han encontrado su límite.
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|