Dime Donde has ido?
Publicado en Jan 13, 2010
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Cada movimiento que realiza, lo hace observarse en el espejo. La cita de hoy, para Apolo es muy importante, ya se cumple un año de su pololeo con Magnolia. Mientras observa cada detalle en el espejo, el timbre lo hace saltar. No sabe que reacción tener, ir a abrir la puerta y que su novia lo vea sin terminar o dejarla esperando, pero una voz a lo lejos lo tranquiliza, su madre lo hará por el. Desde su cuarto solo escucha como su madre y su novia conversan y se ríen.
Al llegar a la sala, lugar en que se encuentra Minerva, su madre y su novia, Apolo con una tierna mirada observa a Magnolia, la que se levanta rápidamente y besa a su novio. Minerva entiende el gesto, se levanta del sillón y le dice a su hijo que se cuide y que le avise cuando llegue, de paso se despide de Magnolia.
Al llegar a los estacionamientos, Magnolia quiere terminar con la incertidumbre, quiere saber a donde irán a celebrar su aniversario.
-Bueno amor – le dice Apolo a su novia mientras se acerca a ella y le toma de las manos – iremos a cenar a un lugar muy romántico, que se que te gustara y luego a bailar a…
-Ya se donde, en el lugar en que nos conocimos hace mas de un año – le dice Magnolia a su novio antes de darle un candente beso.
Como Apolo había prometido, luego de la romántica cena, la pareja se fue a bailar al lugar en que se habían conocido, para finalmente terminar viendo el amanecer desde el mirador de su ciudad. A pesar de lo perfecto que estuvo todo durante la noche, Apolo noto algo raro en Magnolia desde que la vio en su casa, un dejo de melancolía tenía en su cara.
-Amor, ¿Estas bien?, siento que algo te ocurre
-No me ocurre nada, no te preocupes… debe ser tu imaginación – Responde Magnolia mirando a los ojos a su novio –Pase lo pase, nunca olvides que te amo, promete no olvidar que te amo –Le pide a Apolo, sellando la promesa con un beso, pero esta vez, con sabor a despedida.
Al llegar a la puerta de la casa de Magnolia, Apolo se acerca a ella para darle un beso de despedida, pero repentinamente su novia le corre la cara y con esa misma mirada de melancolía que ya a estas alturas era familiar, le repite que nunca olvide que lo ama, que jamás se olvide de ello, sean cual sean las circunstancias, para cerrar la frase con otro de esos tristes besos. Magnolia como avergonzada agacha su cabeza, y de esta forma sale del vehiculo. Apolo le pide que se detenga, Magnolia ya fuera de auto asoma su cabeza por la ventanilla
-No te olvides que saldremos durante la tarde
-Si, verdad… bueno, Adiós
-Amor, no es un Adiós, es un hasta luego –Corrige alegremente Apolo, Magnolia solo asiente con un triste esbozo de sonrisa y se aleja para entrar a su casa.
Ya en la tarde, Apolo alegremente se dirige a la casa de su novia. Como es de costumbre, se estaciona afuera de la casa, se baja y golpea la puerta. Sin embargo, las cosas no ocurren como siempre, nadie le abre la puerta. Apolo insiste una vez mas con fuertes golpes, algo le dice que nada bueno esta ocurriendo. Nadie le abre la puerta, cuando se dispone a insistir por tercera vez, la madre de Magnolia, Flora, acude el llamado y se asoma en la entrada de la casa con un aspecto deprimente, sus ojos están completamente rojos e hinchados.
-Señora Flora ¿Qué le paso?
-Magnolia, es Magnolia
-¿Qué pasa con Magnolia? –Pregunta Apolo desesperado, mientras ingresa a la casa buscando respuestas. Flora lo sigue y con un fuerte tiron lo hace voltearse hacia ella.
-Magnolia desapareció
-¿Qué?, ¿Cómo que Magnolia desapareció?... ¿Cómo?, ¿Cuándo?
-Hoy, todo ocurrió hoy, luego que llego por la mañana, entro a su cuarto y no supe más de ella –Contesta Flora dejando escapar el más desgarrador llanto –Me preocupe cuando la llame a comer y no me contesto, entre a su cuarto y no estaba, ¡no estaba! Solo encontré su ventana abierta y esta nota –Relata Flora entregándole un trozo de papel a Apolo, quien le arrebata de las manos para leerlo.
 
Mama:
            No te preocupes por mí, yo estaré bien. Se preguntaran porque me he ido, bueno lo hice porque ya no puedo mas, debo escapar de aquí, jamás pensé que esto me podría llegar a ocurrir, no te lo puedo decir en una carta, cuando las cosas se calmen hablare, por favor ahora déjenme pensar, no me busquen.
Dile a Apolo que lo amo, que siempre lo amare.
                                                       Los quiere…
                                                                                 Magnolia.
 
 
Un sin fin de razones para escapar se le vinieron a la cabeza a Apolo, pero ninguna era lo suficiente atroz para escapar sin contarle nada a nadie, menos a el, su novio.
-Señora Flora ¿Esta sola?
-Si, Gustavo fue a preguntar a los vecinos y amigos de Magnolia se saben algo
-Bien, cuando llegue su esposo me voy, no la puedo dejar sola.
Cuando el esposo de Flora llego, Apolo decide volver a su casa. Durante el trayecto no deja de pensar que pudo estar pasando frente a sus ojos que el no so haya dado cuenta. Es ahora que le hacen sentido las palabras de su novia, esa insistencia en pedirle que no olvidara que lo amaba, que nunca lo dejaría de amar pase lo que pase.
Al llegar a su casa, su madre al verlo entrar se percata que algo esta ocurriendo, se acerca a su hijo con intenciones de preguntar que esta pasando, pero es interrumpida por un apretado y doloroso abrazo que su hijo le da. Minerva solo atina a sostenerlo y decirle que todo estará bien, sin entender que esta pasando.
-Magnolia mama, Magnolia desapareció –Apolo le cuenta, entre llantos, a su madre
-Tranquilo hijo, tranquilízate. Cuéntame que esta pasando –Pide Minerva, sintiendo que nada bueno esta ocurriendo
Apolo lentamente se siente en un sillón y con sus rojos ojos observa a su madre, tratando de contener su pena y desesperación, le cuenta lo ocurrido a su madre. Minerva al ver la situación tan extraña, le pide a su hijo que no cometa una locura, que se tranquilice y que espere una respuesta de la policía, Apolo observa a su madre y deja escapar su pena.
 
2 semanas después…
 
Desde la desaparición de Magnolia, nada se ha sabido. Los amigos cercanos aseguran no saber nada, los esfuerzos de la policía no conducen a nada, Magnolia no dejo huellas.
Apolo ha tratado de llevar su vida lo mas normal posible, dejando en manos de la policía todo, sin embargo, ya no es capaz de seguir aguantando, necesita saber que esta pasando con su novia, donde esta, que esta ocurriendo. Es por ello que un día por la mañana se levanta mas temprano que de costumbre, decide salir a buscar a Magnolia por su cuenta. Rápidamente pasa por la cocina, saca algunos alimentos e intenta salir de la casa sigilosamente para no desperar a su madre, no la quiere preocupar. Cuando intenta abrir la puerta principal, una mano lo toma de su hombro, Apolo violentamente se gira, su madre con cara de pregunta, lo observa.
-¿Y donde se supone que vas?, es muy temprano para que te vayas al trabajo
-No iré a trabajar
-Si no iras a trabajar, pero aun así te levantas tan temprano ¿Cuál es la razón? ¿Magnolia?
-Si mama, es Magnolia. No puedo dejarla quien sabe donde y quizás en que condiciones
-Lo se, y se que te dije que no te involucraras, pero ya son dos semanas, ve hijo, ve por tu novia –Le dice Minerva a su hijo esperanzada, haciéndole la señal de la cruz en la frente.
Apolo sale del departamento, se sube a su vehiculo y toma rumbo hacia la carretera, lugar en que decidirá por donde comenzar la búsqueda
El calor del verano invade el lugar, si no fuera que están en la playa, seria insoportable incluso respirar. Apolo corre desperado en busca de su novia, si no llega pronto donde ella, las consecuencias serán irreversibles. A lo lejos la divisa apoyada en una baranda de la playa, entre más desea llegar, parece que más se demora. Ya por fin junto a ella, completamente agitado estira su brazo y le entrega su helado –amor cómelo rápido, se están derritiendo –le dice a Magnolia con el habla entre cortada. Magnolia solo lo observa con una dulce mirada y antes de probar su helado, besa a su novio agradeciendo el gesto y lo que siente hacia ella.
Ya cerca de la carretera y estacionado al costado de la misma, Apolo entre tanta divagación, por fin recuerda un acontecimiento que le da un indicio de donde se puede encontrar Magnolia, la playa que visitaron durante las ultimas vacaciones, Magnolia ama el mar.
Luego de un par de horas de viaje, Apolo por fin llega al concurrido balneario, pero que debido a las fechas, esta desierto. Una copiosa lluvia se deja caer, a pesar de eso, Apolo desciende se su automóvil. Su piel se eriza al sentir el frío de la lluvia y al presenciar lo revuelto del mar debido a la tormenta, su corazón de estrecha, no sabe donde comenzar. Se pregunta a su mismo en que lugar podría estar Magnolia, pero todo se le aclara cuando observa en una pared de una antigua casa de adobe un cartel que anuncia arriendo de cabañas. Magnolia no conoce a nadie en ese lugar, piensa Apolo, debe estar en la cabaña que arrendamos hace un año.
Una vez afuera de la veraniega cabaña, Apolo baja se su vehiculo y corre hacia la reja para entrar, pero una fuerte decepción lo embarga al percatarse que todo esta cerrado bajo siete llaves. Apolo agacha su cabeza decepcionado, pero la levanta al escuchar una voz femenina, se gira completamente para ver quien le habla esperando encontrase con Magnolia. Con tristeza se da cuenta que lo que esperaba no es tal, la mujer que le habla, es la persona que le arrendó la cabaña durante las vacaciones, la dueña. La mujer al verlo empapado y con la cara desfigurada por la desesperación, lo invita a pasar a su casa, lo que Apolo acepta inmediatamente.
Al entrar a la casa, Apolo se ubica lo mas cerca de una ventana, no quiere perder de vista ningún detalle. La mujer lo deja solo por unos instantes para luego volver con una taza de café para Apolo, se la entrega y se sienta junto a el. Apolo no despega su mirada de la ventana, la mujer intenta crear un tema de conversación, sin embargo parece mas un monologo, Apolo no realiza ningún gesto. Al percatarse se de esto, la mujer extrañada le pregunta que le ocurre, Apolo con la pregunta parece desdoblarse y entre un mar de lagrimas le relata a la mujer lo que le esta pasando, la razón de su visita.
-Pero si ella estuvo aquí –sentencia la mujer asombrada, a Apolo se le ilumina la cara, quiere saber más.
-¿Cómo que estuvo aquí? ¿Cómo? ¿Cuándo?
-Llego por aquí hace dos semanas, me pareció raro, en estas fechas no viene nadie.
-¿Y donde esta?
-Lo siento, ella se fue hace dos días de acá –Comenta la mujer con tristeza
Apolo se siente terrible al darse cuenta que el no tener valor de actuar antes, dejo que su novia se alejara aun mas, sin embargo, la mujer aun tenía más que decir.
-Si mal no recuerdo, ella me pregunto sobre las playas del sur, si era factible ir en esta fecha, yo le dije que si, pero que…
-¿De verdad? Entonces debe estar allá, para allá fue –Dice Apolo esperanzado, se levanta del lugar en que se encontraba, le toma la cara a la mujer y eufóricamente le besa la mejilla, para correr hacia su auto.
Al llegar el ocaso, Apolo se percata que aun le queda mucho camino por recorrer para llegar a la siguiente ciudad, en la que debía estar magnolia. Por ello, Apolo decide pasar la noche en el primer lugar que encuentre.
Ya en la mañana, cuando el sol recién comienza a alumbrar, Apolo decide continuar con su búsqueda. Luego de horas de viaje, Apolo llega a un extraño pueblo costero. Los caminos de tierra, las antiguas casas y un día perfectamente nublado y gris hacen del lugar un sitio muy tétrico. Ningún alma se vislumbra en el lugar, por lo que Apolo decide quedarse dentro de su auto a esperar que alguien aparezca para hacer preguntas, como ya es costumbre, no sabe por donde empezar.
Al caer la tarde, Apolo algo cansado y somnoliento, esta completamente impaciente con tanta espera, pero algo lo hace recuperar la esperanza, ve a una persona pasar por el lado de su auto, un anciano. Corriendo se baja del auto y alcanza al hombre, le pide que se detenga. El anciano al escucharlo detiene su caminata y sin voltearse se queda estático esperando que Apolo le diga algo.
-Señor ¿sabe donde se encuentra Magnolia?
-No, no se de quien me habla –Responde fríamente el anciano sin voltearse, por lo que Apolo saca de su billetera una fotografía para mostrársela
-Es esta la persona que yo busco, ¿la ha visto?
-¡Le he dicho que no! –Grita el anciano enfadado aun sin voltearse y menos observar la fotografía
-Pero como me dice eso, no ha ni siquiera visto la fotografía
Estas palabras terminan de enfurecer al anciano, por lo que se gira repentinamente. Al verle la cara, Apolo siente terror, jamás había visto algo tan horripilante. El anciano luce demacrado, demasiado blanco, grandes ojeras, pero eso no era todo, su cara tenía grandes cortes, los que estaban completamente infectados y llenos de purulencia, su cara era la de un muerto. Al girarse, el anciano observa la fotografía, mira con sus rojos ojos endemoniados a Apolo y le dice que si la conoce, que esta en la iglesia. Apolo sin poder mover ningún músculo y sin emitir ruido alguno, se encuentra parado dentro de una terrorífica  y oscura iglesia. Hojas secas y gigantescas telarañas adornan el lugar, solo algunas velas esparcidas en el suelo y cerca de un ataúd entregan un poco de iluminación. Apolo no entiende que hace un ataúd en esa iglesia abandonada, se esfuerza por poder moverse hasta el ataúd, cosa que logra con dificultad. Al estar cerca del ataúd, algo le dice que nada bueno vendrá de aquello, sin embargo no puede dejar de abrirlo. Un ensordecedor y desesperado grito da Apolo al ver quien se encuentra en el ataúd, su novia Magnolia yace muerta, no puede dejar de gritar debido al dolor que siente.
Con un gran suspiro y completamente sudado, Apolo despierta. Se pasa las manos por la frente y siente un gran alivio al darse cuenta que todo fue una pesadilla. Observa el reloj y se da cuenta que estuvo dormido un par de horas. Un bulto que pasa por su lado lo hace voltear y se percata que al fin ve a alguien. Baja de su auto y corre tras una mujer vestida con ropa de pesca, con la desesperación termina gritándole para que la mujer deje de caminar, lo que consigue.
-Señora por favor necesito que me ayude, ¿ha visto a la mujer de la foto? –Pregunta Apolo mostrando una foto de Magnolia
-Por su puesto que la he visto, ella es Magnolia
-¿La ha visto? ¿La conoce?
-Pero claro, ella es la única turista que ha andado por aquí en los últimos días, cuando me fue a comprar el otro día al mercado estuvimos conversando un rato, me dijo su nombre ¿Por qué me lo pregunta?
-Ella es mi novia, desapareció hace dos semanas ¿sabe donde se puede estar quedando?
-No me diga… Pero claro que le cuento, ella debe estar quedándose en la única pensión que hay por aquí
Apolo rápidamente saca su celular y anota los datos que la mujer le entrega de la pensión, le agrede con un fuerte abrazo y corre a su auto para continuar con la búsqueda.
Luego de un par de vueltas por el pueblo, Apolo da con la pensión, rápidamente se baja y entra corriendo. Con fotografía en mano, le pregunta a un hombre que esta tras un mesón por su novia, el hombre la reconoce inmediatamente, explicando que era la única pensionista en semanas.
-Lamentablemente ya no se encuentra, se retiro en la mañana
-¿Por qué? –Dice Apolo desesperado -¿Usted sabe donde se puedo haber ido?
-Mmm..., bueno ahora que me lo pregunta, no me dijo con exactitud, pero me hizo un comentario muy extraño ayer por la tarde
-¿A si?, ¿Qué le dijo?
-Me pregunto por la ciudad más próxima, que tan grande era, yo le dije que si, que es una ciudad muy grande y ella pensando en voz alta, no creo que se haya dado cuenta que la escuche, no le mencione nada al respecto
-¡¿Qué dijo?!
-¡Hey! Cálmese. Ella dijo que es un buen lugar para esconderse. ¿No le parece extraño?
Apolo con esta información, sale corriendo de la pensión sin ni siquiera dar las gracias, entre mas cerca se encuentra de Magnolia, más desesperado se siente.
Al llegar a la gran ciudad, se encuentra con una realidad muy distinta a la de los otros pueblos, luces y muchos turistas invaden el lugar. Como la noche ya se ha dejado caer, Apolo decide buscar un hotel lo más rápido posible y pasar la noche. Al entrar a su habitación, Apolo se lanza a la cama, sus ojos lentamente se cierran, pero el sonido de su celular lo hace saltar, rápidamente lo busca entre sus cosas y contesta. Es Flora, la madre de Magnolia, la que le pregunta si ha sabido algo, Apolo esperanzado le dice que ya esta muy cerca, que tenga fe. Como un dato curioso, Flora le cuenta que cuando su esposo, Gustavo, se entero que el, había salido en búsqueda de Magnolia, también había salido a buscarla, Apolo le dice que le parece bien, que entre mas personas se unan, mejor.
El sol que le da en los ojos, no deja que Apolo continúe durmiendo, lentamente se endereza y se percata que se ha quedado dormido con la ropa puesta, por lo que al ver la hora en su reloj, Apolo se lanza al baño para darse una ducha y continuar con la búsqueda.
Al salir del hotel, pasa por el mesón de informaciones, desea saber cual es el lugar en donde se arrienden cabañas mas cercas del mar. Con esa información, toma su auto y continúa con su búsqueda.
El complejo turístico más cercano a la playa, es inmenso, no sabe como encontrar a Magnolia entre tanta cabaña, por lo que toma una decisión que puede ser descabellada, pasar casa por casa preguntado por su novia.
Luego de haber preguntado en la mitad de las cabañas, Apolo ha perdido las esperanzas. Le ha tomado toda la mañana y nadie sabe nada. Cabizbajo decide ir a comer algo, no lo ha hecho en días, para luego continuar con su búsqueda, pero algo lo hace caminar hacia una cabaña, una canción muy familiar que proviene el interior de esta.
-Hola, soy Apolo ¿Cuál es tu nombre?
-Heee, ¿Hola?, soy Magnolia
-Que lindo nombre. Bueno Magnolia me preguntaba si me aceptabas un trago o una invitación a la pista a bailar
Magnolia algo sonrojada se resiste en aceptar la invitación, pero sus amigas la empujan a aceptar lo que Apolo le propone.
Ya en la pista bailando y conversando de lo trivial, la música bruscamente cambia, un lento muy romántico invade el lugar y genera que todas las parejas se abracen. Magnolia intenta resistirse al abrazo de Apolo, pero los gestos de sus amigas a lo lejos la convencen. Al oído, Apolo muy coquetamente le dice a Magnolia que esa será su canción y que cada vez que uno de los dos la escuche, es porque extraña al otro, Magnolia solo atina a reír.
Apolo reconoce la canción, es la que bailaron por primera vez en el lugar que se conocieron. Corre hacia la cabaña y desesperadamente golpea. La puerta de abre de par en par, Apolo no cree lo que sus ojos ven, al fin, al fin ha encontrado a su novia. No puede dejar de observarla, no es capaz de hacer ningún movimiento, sus ojos se llenan de lágrimas. Magnolia sorprendida, no puede creer que la haya encontrado, no lo entiende. Apolo ya no resiste, abraza fuertemente a su novia y la besa, la besa con desesperación. Magnolia no responde el beso, se queda estática, Apolo lo nota, le pregunta que le ocurre, Magnolia le toma una mano y lo hace entrar a la cabaña.
Apolo extrañado y a estas alturas nervioso se sienta, quiere saber que esta pasando, quiere respuestas. Magnolia se sienta enfrente de el, se queda completamente callada, esperando que su novio le pregunte lo que esta pasando.
-¿Y? ¿Se puede saber que esta ocurriendo?
-¿Qué esta ocurriendo? Amor ni yo lo se
-¡¿Cómo que no lo sabes?! –Pregunta enfadado Apolo
-Por esto escape, se como te pondrías, pero ya no puedo continuar ocultando esto, eres parte de mi vida
-¡Si soy parte de tu vida ¿Por qué te fuiste dejándome a la deriva?! Yo te amo, eres la mujer que mas he amado nunca, y creía que tu también sentías eso por mi, pero a la primera dificultad me dejas, ¿Qué mierda esta pasando?
-Se que estas enfadado, es normal… Te amo demasiado, por eso escape, lo que esta pasando es horrible, te juro que no es mi culpa –Cuenta Magnolia entre un mar de lagrimas
-Por favor Magnolia, dime que esta pasando
-Lo que esta pasando es algo que me ha destruido como persona, como mujer, es algo que lamentablemente te dejara por el suelo a ti también
-Magnolia dímelo ya, no aguanto más con esta incertidumbre
-Estoy embarazada
Apolo no tiene ninguna reacción, solo la observa y sus ojos se llenan de lágrimas
-Pero amor, ¿Por eso escapaste? Esa es la mejor noticia del mundo –Grita Apolo, se levanta de su asiento, toma a Magnolia y la abraza.
-Apolo, este bebe no es tuyo –Sentencia Magnolia
Apolo siente que un frío correr por su espalda, se separa de Magnolia y la toma bruscamente de un brazo, la expresión en su rostro a cambiado completamente.
-¡¿Qué? ¿Me engañaste? ¿De quien es ese bastardo?! –Grita Apolo a Magnolia dando fuertes estirones
-Apolo suéltame, no es lo que tu crees –Suplica Magnolia llorando
-¿Qué? ¿Acaso es el espíritu santo?
-¡No Apolo! No es de espíritu santo, estoy embarazada de mi padre –Termina de decir Magnolia
Apolo la suelta y se pasa las manos por la cara, se gira dándole la espalda a su novia, solo observa la pared, no dice y hace nada
-Si amor, estoy embarazada de mi padre. Mi padre me violo, me ha violado desde hace años. Perdóname, por favor perdóname, no era mi intención.
Apolo se vuelve hacia su novia y la abraza, la abraza y lloran.
Un fuerte portazo los hace saltar, se separan y observan hacia el corredor de la cabaña. Magnolia solo emite dos palabra “Es el”. Gustavo aparece en la habitación y se encuentra en la habitación con la pareja.
-Apolo, has llegado, pero yo le encontré primero. Menos mal que mi hijita esta bien
-Si, que bueno que la encontró –Dice Apolo siguiéndole el juego a Gustavo
-¿Y como la has encontrado?
-Pistas, solo busque pistas de pueblo en pueblo. Y usted ¿Cómo la ha encontrado?
-Es mi hija, se que vendría por acá –Contesta Gustavo mientras camina y entra al baño
Magnolia se acerca a Apolo y le apunta la chaqueta que Gustavo acaba de dejar en una silla, Apolo no entiende, aun así se acerca a la chaqueta y la revisa, encontrándose con un revolver. Cuando sale Gustavo del baño, se encuentra con Apolo apuntándole y con Magnolia detrás.
-Vaya, vaya. Parece que esta mocosa te ha contado la verdad ¿Qué vas  ha hacer? ¿Dispárame? No eres lo suficientemente hombre para disparar
-No me provoque, ¡eres un degenerado! –Le grita Apolo y dispara. Es tanto su nerviosismo, que falla en el tiro, Gustavo se aprovecha de esto y corre hacia Apolo para arrebatarle el arma. Comienzan un forcejeo y el arma se dispara, el silencio invade la habitación, Apolo cae ensangrentado al suelo, antes que Magnolia se le pueda acercar, Apolo muere.
Magnolia no puede permitir que algo así ocurra, se adelanta a los hechos y se aprovecha de que su padre esta preocupado forcejeando el arma con Apolo, toma  un grueso florero y se lo revienta en la cabeza a su padre, Apolo sorprendido con la reacción de su novia, la abraza y luego la toma de una mano, salen de la cabaña. Una vez afuera, llaman a la policía.
 
9 meses después…
 
A pesar de todo lo ocurrido, Magnolia decide quedarse con el bebe, considera que no tiene la culpa. Flora no puede creer que cosas como esas hayan estado ocurriendo bajo su propio techo, Magnolia perdona a su madre, ella no tiene la culpa de nada.
Aunque para muchos pareció raro, Apolo se caso con su novia, aceptando criar como suyo, el hijo que su ahora esposa, espera.
Debido a las condiciones en que el bebe fue concebido, al momento de nacer se le practican un sin fin de exámenes, para corroborar la existencia de enfermedades, pidiendo de paso muestras de ADN a Magnolia e incluso a Apolo.
Al cabo de unas horas de nacido el pequeño, el doctor a cargo llega a la sala donde se encuentra el matrimonio y la familia.
-Luego de practicado los exámenes, hemos llegado a una conclusión.
Todos se observan los unos a los otros, esperando la peor de las noticias.
-¿Qué esta pasando doctor? ¿El bebe nació con algún tipo de problema? –Pregunta Apolo
-No, al contrario, el bebe esta muy sano y nació en perfectas condiciones. Lo que les tengo que decir es que el bebe fue concebido ante de la violación que la paciente culpa como la que provoco el embarazo –Relata el doctor
-¿Cómo? ¿Qué quiere decir? –Pregunta extrañada Magnolia
-Lo que quiero decir es que el bebe, no es hijo del presunto padre, por eso le hemos pedido muestras de ADN a Apolo, hemos comprobado que el padre, es el –Termina de decir el doctor, generando el mayor de los asombros en los presentes, que se transforma en gritos de felicidad.
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Foto del autor Joaqun Varela Gutierrez
Textos Publicados: 17
Miembro desde: Nov 22, 2009
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Descripción

A pesar de lo apacible de la relacion entre Magnolia y Apolo, algo esta ocurriendo, algo que puede destruirles la vida para siempre. Debido a ello, Magnolia decide escapara, no quiere que su amado novio sufra. Sin embargo, Apolo no dejara lugar sin recorrer para encontrar a su novia.

Palabras Clave: Escapar desaparicin bsqueda amor

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Ficcin


Creditos: Joaquin Varela

Derechos de Autor: Joaquin Varela


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