Santos Lugares,   8 de mayo de 1990
 
               Gracias, querido Jorge, por tu generosa carta. Pero no debés juzgar nunca a un escritor por las -precarias- palabras que puede decir en una radio o en un canal de televisión, o un simple reportaje; debes juzgarlo por su obra.
               Nunca le he pedido a nadie que la lea, pero si puedo pedirlo en casos cómo éste.
               El problema de la esperanza lo encontrarás en varias obras que escribí, a veces de modo complejo, como sólo puede serlo cuando no se habla con el puro cerebro -es el caso de los ensayos- sino con eso que Pascal llamaba "les raisons du coeur".
               Las ficciones no se escriben con ideas, sino, y sobre todo con símbolos, pasiones, mitos.
               Allí encontrarás mis verdades mas profundas.
               En Héroes y Tumbas y en Abaddon encontrarás, por ejemplo, la obsesión del suicidio, y entreverás, quizá, porque esos dos adolescentes finalmente se salvan.
               Con mi afecto
                                                            Ernesto Sábato
 
PD:  Tambien te pediría que leyeras Hombres y Engranajes. Pero si no podés o no querés hacerlo no lo hagas. No me enojo por eso...