Un beso por la espalda hizo su presencia
Con la suave y tersa, frescura del cariño
Que se posa en mi mejilla con la delicadeza de ese tierno niño
Haciendo sonrojar hasta el ultimo centímetro de mi piel
Esperando que en mi tez otro beso se vuelva a alojar
Con la alegría que hace brotar cual chiquillo trastornado
Con el beso del amor en mi corazón bien acomodado
Que en mi arduo saltar enajenado
La memoria de el beso extraviado que en mi se vino a posar
Rematando los malos recuerdos que en mí habitan
Haciendo de ese momento único y especial
De mis ojos brotan tímidamente perlas de nácar
No son lágrimas de dolor que son de agradecimiento
Pues en el momento en que ese bello beso en mi se posó
La emoción en mi empezó a emerger
Tierna y dulce emoción que mi corazón adoquina
Dulce beso que a te aproximaste a traición
Dime de donde partiste que a tu dueña
Le entrego no uno, le entrego un millón