Recuerdo esa foto. No sé dónde está. De pronto no encuentro nada. La busque por todos lados. Durante años no la quise ver y ahora que la quise ver no la encuentro. Es el colmo de mi vida.
Quería ver cómo era eso, los brazos, la postura, una cara junto a la otra. Tanto tiempo quise olvidar y no pude, que ahora, aunque haga fuerza con todo el cerebro para recordar, no puedo.
Me exigí olvidarte porque era más fácil. Siempre me quedó el pensamiento perdido de como hubiera sido.  Pasan los años y eso sigue dando vueltas en mi cabeza. Todos los días viene el pensamiento y es inevitable acompañarlo con la ilusión de que a vos te pase lo mismo.
Hace tiempo vengo evitando toda situación que pueda llegar a acercarme a vos y ahora me pregunto si realmente lo que evito es encontrarte o encontrarme con mis sentimientos. Yo no me permito flaquear en los sentimientos, mi corazón odia dudar, odia los grises, aunque sea siempre gris.
Me gustaría recordar una charla de todas las que tuvimos, y no puedo acordarme de nada, ni siquiera de porque me gustabas, de cómo empezó todo esto y en qué momento fue que terminó.
Miro mis fotos y me veo tan feliz, que ni siquiera parecía que estaba sufriendo. En los ojos se me ve la ilusión y tengo la sonrisa tan grande que no me reconozco. Creo que hace años no me miro al espejo con detenimiento, hay algo en mí que no quiero ver, y cuando lo intento no me reconozco. El día en que me diste a entender que en esta realidad lo nuestro era imposible, desde ese día desee otra realidad, y desee tanto ser otra persona que desaparecí, y ese fue el momento en que deje de reconocerme.
Fingir vivir una vida es más difícil de lo que pensé, lamento haberte juzgado en ese tiempo, ahora entiendo tanto de vos. En ese momento te saliste de tu realidad, y decidiste ser otro, no sé si eras el verdadero vos o uno falso, pero eras otro. Vos y yo tenemos más en común de lo que pensaba.
El sexo era increíble, de eso si me acuerdo o creo acordarme. Tal vez no era tan bueno, pero fue real. Yo nunca me animé a contarte la otra parte de la historia, aunque siento que lo sabes. En ese momento yo desee tener un hijo con vos, solo porque era con vos. Ni siquiera era mi deseo ese bebé, mi deseo era hacerte feliz, o tal vez buscar la forma de que te quedes conmigo.  Era capaz hasta de contradecirme por vos. Y pasó, pero estuve tan sola, y fue tanto lo que te extrañé, que la melancolía me invadió y eso no pudo ser. No se puede crear vida con el corazón tan árido.
Hoy cuando miro atrás, te vuelvo a encontrar y vuelvo a sentir el mismo amor, pasan los años y se siente igual. También siento todo lo que me lastimaste y sigue doliendo como si lo hubieras hecho recién. Tu mirada era tan fuerte que si cierro los ojos te siento en frente mirándome, todavía me quedo la sensación. Eso es lo que recuerdo, las sensaciones.
Me pregunto si cuando los años pasen, aún más, y estemos todavía más lejanos y cambiados, me seguirá pasando lo mismo. Eso me preocupa. Nunca te lloré ¿sabías? No me di ni el tiempo. No podía caer en frente tuyo, y cuando tuve el momento, no lo hice porque pensé que ya no lo necesitaba. Ahora no avanzo, busco excusas para estar en la sombra. Me avergüenzo de quien soy.
Ni siquiera te conteo como relación, porque vos tenías tu relación, y yo no tenía nada, y nadie supo que paso, y si nadie sabe, tal vez no pasó. Ahora vos seguís en tu relación y yo sigo en la nada.
Si pudiera volver el tiempo atrás, en vez ser tan clara con mis palabras, sería menos precisa. En vez de darte el cuchillo en la mano para que me apuñales cuando sea necesario, te lo dejaría sobre la mesa. Vos buscabas oscuridad y yo te di sombra. Yo buscaba algo claro y vos me diste algo gris, y yo odio los grises, aunque sea un gris.  
No supe si me querías, y al parecer nunca voy a saberlo, y aunque me lo digas seguramente no te creo. Espero que vos si sepas que te quise, y te quiero, y mucho, como en las películas, aunque espero, algún día, dejar de quererte.