Era de madrugada, me desperté porque empezé ha escuchar unos extraños ruidos, pero al levantarme despacio de mi cama, y al acercarme a la puerta de.mi cuarto los ruidos se oyeron más fuertes, como que arañaban un papel eran ruidos extraños, me armé de valor corrí por un arma, y agarré la escoba para enfrentarme al enemigo, subí la pequeña escalinata, pero todo estaba oscuro no quise encender el estudio porque me pondría en evidencia, o el enemigo me podría atacar, empecé a caminar, me encomendé a Dios, y continúe caminando hasta llegar a la cocina, prendí la luz, y me ví frente a frente con el enemigo era un ratón que cayó en una trampa que había colocado en la cocina y al tratar de escapar se había topado con un papel tirado en el suelo, respiré hondamente y con una escoba y recogedor lo barri.