Con el paso de los últimos años ha existido un gran controversia sobre qué debemos consumir, en relación a las semillas nativas, híbridas y transgénicas, pues ese es el tema que abordaremos el día de hoy. Antes de comenzar quiero darles a conocer mi posición después de un largo proceso de investigación sobre el tema presente, opino que lo mejor que podemos optar en consumir son las plantas nativas...

Vamos por partes y con calma, como sabemos la producción de las semillas nativas se desarrolló a partir de la selección de semillas de plantas silvestres y la polinización a campo abierto, esto nos indica que son semillas sumamente naturales, que como cualquier cosa tiene sus ventajas y desventajas, aquí te presentamos algunas:
En cuestión a sus ventajas, encontramos: 
Son mucho más fáciles de conseguir y producir en menos tiempo.
Al ser naturales son muy saludables para las personas, estoy seguro que todos hemos consumido productos de este tipo.
En cuestión a sus desventajas, encontramos: 
No todas logran germinar, ya sea por cambios climatológicos o por el factor más común, el cual es que las plagas hacen que se eche a perder.
Al ser las más vulnerables a plagas, los productores se ven obligados a usar pesticidas, lo que genera un daño a la tierra y en un futuro a los que lo consumimos. 
Estas semillas no se adaptan a cualquier ecosistema.
Las semillas nativas son generadas por las propias plantas, estas semillas son usadas para su próximo cultivo, lo que genera que no exista una gran inversión en estas semillas, por ello todos podemos consumir estos productos; no es necesario el uso de fertilizantes químicos para el crecimiento de estas semillas, mayormente se usa el abono natural para que el ambiente no se vea afectado, el uso del abono naturales hace que no exista casi ningún efecto negativo en nuestra salud, a lo contrario, el consumirlo nos ayudan a que se fortalezca nuestro sistema inmunológico frente al SARS-Cov-2 y otras enfermedades.

Continuamos nuestro camino con las famosas semillas híbridas las cuales son especies que se obtienen mediante el proceso de mejoramiento de semillas, es decir, procede de la unión de dos especies diferentes.
En cuestión a sus ventajas, encontramos: 
Su producción puede ser injertada en cualquier otro ecosistema.
Al ser creadas por dos especies de un mismo reino, son más ricas en cuestión a sabor y a su valor nutritivo, ya que se extrae lo mejor de ambas especies para crear un mejor espécimen. 
En cuestión a sus desventajas, encontramos: 
En oportunidades existen contratiempos en su producción, lo que genera una gran pérdida económica para las empresas o laboratorios que lo producen.
Al ser híbridas se necesita usar fertilizantes químicos en la tierra para que se puedan adaptar, lo que genera un daño leve en nuestra salud al consumirlos.
Estas semillas sin duda alguna producen el aumento del rendimiento de las cosechas, eso hace que exista una muy buena ganancia económica, lo de malo de esta demanda es que se tiene que se tiene que agilizar su producción, dejando a la luz el daño que se le hace a la tierra ya que no puede haber una semilla híbrida de segunda generación. Cabe resaltar que al no ser naturales nuestra salud está expuesta.

Hemos llegado a las semillas transgénicas, como ya conocemos son producidas artificialmente mediante ingeniería genética la cual resulta de extraer el ARN de una planta y transferirle un gen de un reino distinto del vegetal. 
En cuestión a sus ventajas, encontramos: 
Son totalmente inmunes hacia cualquier tipo de plaga que exista.
Su crecimiento puede llegar a ser muy rápido con un margen mínimo de que se eche a perder, esto hace que se pueda dar de comer a un mayor porcentaje de personas, podría llegar a ser una forma de erradicar la hambruna mundial, aunque en mi opinión ya es una opción descartada.
En cuestión a sus desventajas, encontramos: 
Al llegar a ser resistentes hacia plagas, y rápidas en cuestión a su crecimiento, pueden llegar a ser muy caras económicamente. 
Los químicos usados pueden traer efectos muy negativos en nuestra salud, al punto de ser prohibidos en algunos países, lo cual ya ha pasado.
La producción de estas semillas se ha vuelto muy costosa, no todas las personas tenemos el alcance para poder producirlas, por otro lado no se puede reutilizar, solo se puede comprar para poder producirlas; lamentablemente su producción ha hecho que se den a conocer la aparición de superplagas y supermalashierbas, esto ha hecho que junto al uso de químicos el suelo quede infértil, afectando principalmente a la biodiversidad; como ya lo he mencionado estas semillas han sido retiradas del mercado ya que sus efectos secundarios son una incertidumbre, hasta el punto de ser considerados cancerígenos.

Para esta argumentación me he apoyado en los documentos informativos:
“Diferenciamos entre especies nativas, híbridas y genéticamente modificadas” (2020). Documento informativo.  Recuperado de: https://resources.aprendoencasa.pe/perueduca/secundaria/5/semana-18/pdf/s18-sec-5-recurso-cyt-recurso-1.pdf
“Descubrimos ventajas y desventajas de semillas nativas, híbridas y genéticamente modificadas” (2020). Documento informativo. Recuperado de: https://resources.aprendoencasa.pe/perueduca/secundaria/5/semana-18/pdf/s18-sec-5-recurso-cyt-recurso-3.pdf


Por tanto, después de que hayas entendido todo esto te hago una pregunta, ¿Cual consumirías?, hemos visto diversas ventajas y desventajas de la producción y consumo de estas semillas, así como sus implicaciones tanto económicas, ambientales y para nuestra salud, yo, su escritor Anghelo Basauri reafirma que el consumo de plantas nativas sería lo mejor en muchos sentidos, sé que no son tan resistentes frente a plagas, también sé que no tienen un valor nutritivo en exceso, pero en realidad no es contaminante para nada, así como no genera ningún problema en nuestra salud en un consumo prolongado.   La decisión está en ti mismo. Un abrazo.