LA ARAÑA

Una araña,
pasa tan ligera
con sus patas
entre tela y tela
salta y salta
cuando yo la miro
y descansa
cuando yo respiro.

Ella espera
con sus patas quietas
a la mosca
de las panderetas
y se asoma
muy ceremoniosa
en la tela
suave y pegajosa.

La guitarra
suelta en estampida  
un enjambre
de notas perdidas
van cantando
a la mosca inquieta
una historia
de profundas grietas.

Ojo atento
el violín entrega
las visiones
de la primavera
los mosquitos
van volando bajo
en la danza
de los pajaritos.

¡Oh, qué sueño
tiembla en el recuerdo
esta araña
con sus ocho patas
salta y salta
anunciando fiesta
por la mosca
triste y prisionera!

Mariposas
reinas de la noche
han llorado
por los tiernos brotes
de raíces
en la tierra muda
que hoy respira
por la muerte oscura.

 
E.D.A