Comencé escribiendo versos,  
versos míos,
de cómo me sentía,
 de cómo me enamoraba,
versos de lo que veía a mi alrededor.
Soy muy compleja en el sentido que
de pronto me gustaba todo lo que veía
hasta el día en que tuve mi primera experiencia:

Dejé mi virginidad sangrante
entre  sábanas blancas,
crezco sin aprender a crecer
siento mi húmedo vientre
sangrando indecoroso.
mi abuela, ¿qué dirá mi abuela ?
Pegada a tí tengo mas furia que afecto
levantaste tu antorcha de fuego 
en el fondo caliente de mis entrañas. 
Mi amor salvaje no tuvo la ternura
solo tu sexo y arrebatos
este amor- jaula,
donde soy una presa mas
de tu cacerías nocturnas.