• Geovanny Marcelo
Geovanny Marcelo
-
-
  • País: Ecuador
 
  Confluyen hasta tu boca lágrimas de sangre anegando tus poros y opacando la pena de gritar en silencio. Los eslabones que te encadenan no se sueltan, no se rompen, no te retienen ni te asfixian, sólo retardan tu asunción. Dejamos de escupir al cielo cuando dios aprendió a utilizar como escudo a sus ángeles para mantenerse a salvo. Tus rojos cabellos ondulantes se extienden como lenguas de fuego con aliento a crematorio; cenizas del tiempo quemadas. Sangre, cadenas, saliva y cabellos enseñan tu verdad: aprendiste que no se necesita ser madre para amar a tus hijos. Por lo mismo, si ahora detengo tu gloriosa ascensión no es para agradecerte ese estéril amor dignado, es para que me devuelvas el alma.
VEDETTE
Autor: Geovanny Marcelo  604 Lecturas
  Lo más alucinante de todo es que nunca sucedió. Esos sueños anisados de incienso y avidez con los que me dormías para despertar ausente sin dilación regresaron a mi lecho individual. El camino del bosque es muy largo niña vestida de rojo para que te deslices sin el cuidado de un ojo vigilante, o el de una mano desleal sobre tu cintura de serpiente sigilosa con la mirada en llamas por la luz crepuscular, dispuesta a morder a todo caminante desprevenido. Lo digo: tu veneno sabe mejor con polvos de adicción y con la colección de narcóticas agujas que luego usabas para picar los ojos de tus muñecos de voodoo. Ya no importa la veleidad de tus roces disimulados, la frívola plenitud de tus cárdenos labios ni la ligereza de tu indómito vientre de luciérnaga, si lo más vil es conocer la realidad de tu inexistencia. Ahora vuela a tientas lívida desventura y no te enciendas hasta ser invisible.
SUEÑOS EN ROJO
Autor: Geovanny Marcelo  453 Lecturas
Junto a un cedro ingrávidola soledad volatilizada se antoja maliciosa con un par de muertos constipados. Ya no bailamos desenfrenados con el ritmo del aleteo de los grillos que saltan de piedra en piedra huyendo de un instintivo amor; perdimos la gracia del encanto cuando descubrimos la mortalidad. Virgen soledad no me acoses, diáfano cedro no la ensombrezcas, si la fatalidad ya nos turba, ¿quiénes son para inquirirnos?
AMBIENTAL
Autor: Geovanny Marcelo  449 Lecturas
LO QUE EL SILENCIO OCULTA Estuvo horas sentado sobre la perfumada tumba improvisada del joven Martín Calderón; caminaba confundido. Tomó el teléfono y, marcando, recordó aquella celeste noche cuando el relente manchaba con rocío sus labios, frente a la Catedral Nueva, donde, imbuidos por las estrellas que se derramaban, prometieron entrar juntos; de la mano, aún sabiendo que les estaba prohibido. Pero nada resulta como se planea; así como jamás pensó matar a quien hasta hace sólo dos noches fue su único amigo, mejor amante e irremediable infiel. Lo enterró junto a él, en el patio, cerca del rosal, lugar de sus infantiles juegos, tempranas confidencias y primeros besos, para no volver a separarse. “Familia Calderón. Este momento no podemos atenderte, si es algo urgente deja tu mensaje, de lo contrario llama luego.” Y colgó.  

Seguir al autor

Sigue los pasos de este autor siendo notificado de todas sus publicaciones.
Lecturas Totales1950
Textos Publicados4
Total de Comentarios recibidos0
Visitas al perfil2591
Amigos6

Seguidores

1 Seguidores
Oscar Ruano
   

Amigos

6 amigo(s)
Nooemar Hevia
lourdes aquino
Victoria Hermosilla Palma ( Victoria Deelmar )
haydee
María Ester Rinaldi
Cristofer G
  
 
Geovanny Marcelo

Información de Contacto

Ecuador
-
-

Amigos

Las conexiones de Geovanny Marcelo

  Nooemar Hevia
  lou
  victoria deelmar
  lisset
 
  antic