MAR - K - 10
Publicado en May 27, 2009
MAR - K - 10
La inmortalidad, si existiera, sería de lo más tedioso. Las diskusiones se harían interminables porke si alguno de los inmortales kisiera negar ke se enkuentra ekivocado, no habría manera de konvencerlo. Kon los mortales la situación es diferente, pues si la parte ke diskute se hace molesta a juicio de su oponente, basta kon matarla y se akaba la diskusión. Si uno mata a otro, uno tiene la razón. Si otro mata a uno, otro tiene la razón. Este método es viejísimo, tan viejo komo la humanidad. Si Galileo viviera eternamente sería muy engorroso diskutir kon él. Pero no es así. La Inkisición aprovechó esa cirkunstancia en su favor, el científiko aceptó ke estaba errado y todo se arregló de la manera más limpia. Mussolini kreyó ke civilizaba a Etiopía porke tenía más tankes y aviones ke Hailé Selassie. Si éste hubiera tenido más tankes y aviones ke Mussolini, entonces Etiopía habría civilizado a los italianos. Lo mismo puede decirse de Alejandro, de Ciro, de Jerjes, de Gengis Kan, de Adolfo Hitler o de Stalin, y -¿por ké no?- de los Estados Unidos. Rekurrimos al habla komo último rekurso, pues lo más expedito es kolgar al kontendor para demostrar ke estamos en lo cierto. Los ke en verdad detentan el poder son de pokas palabras y desprecian las diskusiones porke las konsideran una pérdida de tiempo. Hablamos para influir sobre la gente, pero si podemos dominarla de una vez, ¿para ké enfraskarnos en konversaciones? Las asociaciones internacionales son la mejor eskuela para las lenguas vivas, ya ke la tradukción simultánea, además de dar trabajo a mucha gente, permite praktikar idiomas y expresarse bien en públiko. Tenemos tan desarrollado el instinto del habla komo el instinto de pelea. Por eso la mezkla de golpes y palabrería ha sido tan popular en todas las sociedades, aunke son akéllos los ke al final se imponen. Esto, komo puede verse, le da un toke humorístiko a la vida. Así ke kuando alguien más fuerte ke nosotros y armado hasta los dientes, nos pregunte: ¿Tengo razón o no?, debemos responderle inmediatamente: ¡Klaro ke tiene usted razón! Kosa ke no haríamos si fuéramos inmortales.
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Verano Brisas
LOBOLEJANO
Elvira Domnguez Saavedra