Flor terruño poesía componen ésta alma mía: que se sumerje en barrancos de vocablos enigmáticos para encontrar las raíces delirantes de mis grises. Y sumergido sabré de qué mi hálito tiene sed.
Si mi virtud es callar callaré lo que me cuentes aunque quiera una vocal que no desée acallar. Mi mundo es contemplativo inefable e infinito. Más tienta como satánico mi lengua, de callar vasto.
Vasto vacío de hielo sobre engranajes galácticos que retuercen carne y hueso. Vira en el aire la escarcha que a algunos, satirizara... Y no sabe de bemoles en sus fríos horizontes: A otro cielo marcharé, con mi heráldica en la piel. Y bajo mil prados gratos extrañaré al celacanto y a mandrágoras de barro que siempre sembré en mi barrio, lleno de antiguos oráculos y vástagos desenfrenados
Hoy he escrito dormido sobre heráldicas y epítetos. Mañana, cuando despierte soñaré que ya no existo entre frondas y claveles y en trompetas del Olimpo. El día que yo despierte borraré óvalos de muerte. Y la vida trinará en gigantesca verdad.
Para que no entiendas creo jeroglíficos selectos: Quizá Mambrú entendiera lo que me desgarra adentro. O un tamborilero pueda comprenderme en mi destierro en está ísla con Páladas que siempre clamaba al fuego al que siempre solemnizaba y le entregara sus fueros.
Puritana: De tus cosas no quiero la que sea vana: Ni un gran faldón en esteros ni cofias de esclavos negros. llora silente en mudez y gotea esa hiel que se agolpa en la hielera de tu pecho hecho de niebla destrozado por querellas y de gélidas fronteras.
Con el cristal rompo rosas y cónclaves de mariposas. Es mi espada hecha de arcilla forjada en arena mía. Con el cristal rajaré las alhajas de mi piel y pondré tapiz de sangre con heróico talante. Quien tiemble de cobardía, que se aleje de tu vida.
No es fácil que siendo lego ignorante e imperfecto pueda yo llenar los lagos que los cultos no han logrado: Analfabetas letrados carcomidos en sus ángulos. Si soy desconocedor por qué hago cantos profanos? y levanto a la amapola perseguida por un páramo ? Y por qué para mí la lis teje trajes de luces a diario ?
Humareda polvo hielo.... y en tu corazón desprecio por mí, que fuera mancebo que siempre besó tus lienzos. Hay en ti, mujer macabra una maldad que no pasa y asusta hasta las potrancas que por los potreros, saltan....
Ante el espejo me veo reflejando mis momentos. Y hay un cometa que raya sus imágenes macabras siempre mal pulimentadas en su superficie plana que espejean sus coronas con sus capotes de flamas.
Ciclos que tienen las vidas de cadencias invertidas: En tu cíclico bamboleo y tus vaivénes me pierdo. Lo añejo siempre repite sus mismos sonetos gríses. El Órbe recula y cala sus ascendencias baratas. Día que es repetido y siempre parece el mismo.
Miénteme mentirosa con mentiras que me turban. En esta selva de noches, engáñame como ninguna embustera lo ha logrado. Miénteme en cada cosa con ojos que no relumbran y no sientas escarmiento aunque por dentro ya tenga formalizada mi tumba.
De todo lo que fuí y lo artero que hecho desecho en los leopardos que brotan de la mirra o la caña aromática que, a mí, se me ha vedado. Desecho estoy envuelto en mantos de ceniza. Ya se fueron los tules y las gaviotas pálidas. Despavorido soy en mi dolor apátrida y mi corazón vive en un sótano negro.
El Tabaco o la pipa del aguerrido manco lo humean cual limosna que ninguno prodiga. Por dentro lleva temple y sequía de pájaros y las abreviaturas de su ser agredido.
Sé que sobra dejar aquí mis líneas. Imperturbablemente rendido al café aromático. o Hablar sobre las bardas que me ofrecen las páginas. O susurrar apenas mi dolor diligente. Si describo o dibujo para mí es que realizo la verbalización de todas mis carreras, tan rápidas. Dejo mi cuadernillo en mis sucias repisas: Esas que el tiempo lleva cuando va divagando. Tengo de mí la forma de mi inválida escritura donde en lo hondo dejo mis quejas y calvarios.
Sube aquí sobre las ínsulas a su Océano amarradas. Trepa arriba, hacia mis ecos: Hacia el cielo de mis truénos. Los reflejos van marcando los peldaños: Pon en ellos tus pies bellos de fulgor arracimado. Fluye con toda cadencia, a este lugar sin flamas. Portadora de los fuegos ven y olvida a los tormentos. Ven sin flechas en las manos a éstas témperas azules donde me he liberado. Como tromba de bemoles asciende hacia mis acordes. Ven y rezuma en lo máximo de un Paraíso encantado. Ponte tu capucha roja y, por zapatos, coronas. Aquí andarás descalza, primorosa y alhajada. Asciende sobre los vértigos y mírame como mira la que marea al que sueña en su modo delicado. Fino, tu cútis perfila parsimonia y melodía. Asciende sobre los áticos y, en las alturas trasciende, Hacia donde ulula el rayo y se hace fuerte el relámpago. Mírame en todas las gotas que caen en campanarios. Hasta aquí asciende y trénzate a mí que me hago verano Para derrumbar tu frío y temores adheridos que traemos como dardos. Ven y completa mi copa esculpida color rosa. Más ven a mí sudorosa, y de estirpe caprichosa Y hagámonos en el centro de los vibratos más altos Y entre los dos esculpamos cuerpo de amor derramados sobre deltas y meandros.
Paso ligero en caminos de ebrios muy destruídos. Y el alcohol de mis venas me quema con suficiencia. En alambiques de cobre destilaré mis terrores y mis insuficientes torres de argamasas insalobres. Yo aprenderé a querer a las cinco menos diez.
Hoy el lobo estepario me devora entre mi llanto. Y se horroriza la aurora al ver mis huesos cremados cayendo por los solsticios de un Sol apesadumbrado de ver, existir y ser, bajo galaxias de dardos.
Maravillas de la araña, que en todo lado hace nido y hoy trepa por mis entrañas: Estoy todo percudido y ya me escoltan las gárgolas. Y La araña teje un sigilo que a desamores atrapa.
Para qué sirven los besos si los amantes son lajas frente a frente en el desierto ? Mirada de piedra dura es ese beso secreto. Petrificado del todo y, del todo separados. Los cubren esos tres cielos de calores y desvelos. Una lluvia clara lava sus caritas disecadas.
Lágrimas para Samanta a la que dejó el agorero sin hacerla pitonisa en una tierra de incestos de adivinos derrotistas que pierden los ojos negros para alimentar los cuervos que un vidente lleva adentro de su rostro de usurero.
Sol: Envía tu estro a este campo marchitado por malos poetas ciegos. llenalos de la semilla que brota del alma mía... Y que transmito al escriba falto de sabiduria sin los siseos de mi enigma.
Lentamente voy arreando desde tus veras mis hábitos. Sabes que he vivido loco y soy ser contestatario No busques en mi acomodo con tus gestos funerarios. Mejor, eleva tu vuelo y tus horrendos señuelos. No compartiré mi cama con quien me deshonra y desama. Tampoco tomaré dádivas de la que miente: Canalla mentirosa desde dentro y capsiosa como cerdo que pisoteará mis rosas si ingiero de su veneno que con sus vinagres mezcla, esperando: Ser horrendo descalabrada en tus fábulas y flirteante en las baratas.
Veo mis visos: Mis trazos a los lados del camino en el que andara animado y librado de enemigos. Más ahora se revela mi fláuta color canela y unos sabores a hidalgo urgido y desaforado. Mis tertulias doy al viento que me lacera: Enajenado en palabras diez esclavitas me llaman al Hades y sus moradas.
Camino y caigo me postro en el borde de un terrado. Veo mi sombra en tu sombra y tu largo color apáticó cual lo soñara Hipatía al arrancársele la vida.
La mora mira a la alcuza sin aceite del barato y despide a sus hijitos sin poder alimentarlos... Jamás ella pediría cebada para sus crías. Quizá y venda su cuerpo a los de porte esquelético. Pobrecita de la mora y de su miseria indómita ! Nadie de Cantabria irá para auxiliarla en su mal.
Finalizaré el camino libando los finos vinos que embriagan a los Olivos: Al olivar le diré mis alabanzas de pie. Lejos de los vellocinos que anhelaron los antiguos. Descansará allí mi alma de refriegas y molestias que jamás sirven de nada. no dan parábolas buenas ni paradojas eternas.
Dejé en Segovia un pañuelo y lo llenaron de versos: Y también besos tenía en su textura amarilla. Y brotó sobre dinteles de las puertas diluídas en las paredes mostraba locuras y petulancia.
La poesía se labra amarilla y descarada sobre las rugosas páginas de ésta mi arrugada alma. La poesía liberta con elocuencia perfecta y, sobre mi prosapía es de una casta infinita.
Ríos de amores recorremosen una barca hecha de vocablos:No vamos tras los antojos del tigreque lima su sombra en algún riachuelo:Nos abandonamos a seguir los arrojosde la naturaleza que aún esté arropada.Vemos las montañas de papeleríay la intrínseca periodicidad de lo verde.Las cosas pasan mientras las navegamosy hacen de nuestra juntura un escándalo.Muchos objetos todavía no amaneceny nos ven como envueltos en las llamas de un sueño.
Ya lavadas con sangrese repiten interminables las ciudades.En los charcos se ve osos de felpamanchachados por las riñas y algunas morisquetas.La ciudad se levanta sobre su torso horribleLlámese Caracas o sea Ciudad Juárez.Está llena de cuerpos de exánime tristezay sobre la vida misma extiénde su tenaza.Tiene un olor ácre que al pedestre consumey tiende a dejar huérfanas a las niñitas mansas.Es conjunto enorme de cimas y edificiosque le gusta ceñírse al color escarlata.Aún en el aire fresco de las más tersas nochesarremete contra la carne y la lleva a la nada.Los fines de semana, ya lavadas con sangrese repite interminable la muerte en las ciudades.
Preciso encerrarte entre mis brazospara sentirte como ola subyugante.Que cierres tu cabeza como flor en mi pechoaquí donde el océano va mostrando pañuelos.Mojarme de ti y de tu vientrey subordinarme a tu preñez intacta.Navegar en besos por tu cuellohasta llegar a mil consolaciones.Hacer mis redenciones de aprendízsubiendo a la tibieza de tu nariz suavísimay bajar, entre vueltas, al lóbulo de tu oreja,para que me llenes de ternura y sonrisas.Tus brazos serán en mí flores reptantesy enredadera tierna en que descanse.
En un círculo de paz una estrella blancase tiende femenina a mi mirada.Siento sus lágrimas en un rumor pequeñoy un temor que subyace entre sus parpadeos.La estrella es mujer y es de brumay ante mis virilidades se hace espuma:Yo puedo ofrecerle el final de sus duelosy hacer en ella a mi hijo más pequeño.Ella me mira en su misma galaxiay sabe que la apoyaré más que nada.Se acerca a mí sobre sus percepcionesy me abre sus brazos como una cruz de bronce.
¿ A qué haré igual las palabras ?Brotan como afluentes objetivosy pueden ser manantiales de subjetividad.No se sujetan a una idea fijay suelen engarzarse como gemas preciosas.No tienen pies más trazan su camino.No tienen alas más sí rutas de aire.Las palabras son seres salpicantesque salen de las bocas y las manos.Entran por los oídos en una truhaneríay salen del viejo cargadas de sapiencia.Las palabras vencen las creencias del críticoy enamoran a las doncellas con sus frivolidades.Se alían todas en un versoy crean el mayor de todos los retruénos.
Hablo de las primeras nociones de las cosas, de aquello que acarréa placer y contrariedad.Hablo de las múltiples caídas de las copas y de las serpentinas celebrando lo fiel en los montes de vénus.Hablo de los pequeños grillos, que de mañana en mañana repiten su único rito.Hablo de las cosas profanas y santas y de las mascaradas que cada quien hace para esconderlas.Hablo de los murmullos en la alcoba, del voto marital que se cumple dentro de las sacristías, de los gritos de amores que de mañana inundan a los pueblos.Hablo de las cosas sensoriales, que están allí, echadas, esperando la llamada de un estímulo.Hablo de los más graves desprecios de la mujer al hombre que se encuentra siempre en el sótano de la niñez de su primer amor.Hablo de los murales desnudos que se levantan como pirámides para cerrar el paso a los que van al parvulario:El viento los construye con manos de primate.Hablo del trivial desenlace de hallarse en coma, mientras afuera viven los cabarets y las discotiendas.Hablo de reservorios de dolor que esperan al canijo y al musculoso, y que llegan sin respetar credos o farsas.Las cosas se adelantan o retadan,pero a la maltrechez la trae el tiempo.Hablo del difundo echado dentro de una lápida, que no tiene espacio para abrir una copa de coñac y que preferiría ser una liebre salida de una mágica chistera.Hablo de los amores licenciosos en donde todo es verdad y la hipocresía no tiene los resguardos. De los hoteles baratos llenos de caricias sediciosas y que es albergue seguro para los ensimismados y los abiertos.Del aroma de los orgasmos verdaderos y del lugar donde la monja puede estrenar un amante.Hablo de mis gritos mortales que, con despasión, suelto el día de los difuntos o las mañanas de los días de santos y que van a dar siempre al cabello desaliñado de algunas huérfanas.Hablo de mis vistas hacia el mar desbocado, ceñido en primitivas olas que matan con un puño a las gaviotas y luego las esconden en las entrañas de los pulpos abortados: No hay velas enese pandemónium de exterminio.Hablo de la pubertad que es el pan sagrado que todos comemos y que nos concientiza para llevar la vida de modo sensitivo o inamistoso: El amor a los tragos o a las tanganas comienza ya a demostrase a los 15 capítulos de nuestra acabable novela.Hablo del amor a manos llenas que se daba en las épocas románticas y que encontrar hoy es una misteriosa rareza: Los corazones que se abren tienden a salir rasguñados.Hablo de los grandes textos mexicanos y de las modulaciones severas al lenguaje que me ayudan a hacer una parodia de un escritor infinitamente talentoso: Octavio: Hoy te has vuelto meandro e iluminas desde las claras violetas.Hablo de asteriscos y precipicios, de éxtasis y epifanías, de encontronasos con aquellos que se llaman santos y se alimentan de las primeras gotas que destila el alambique.Finalmente, hablo de todo lo que esté a mi alcance: Desde mi gota aguda hasta mi agujereada calceta, de mis revueltas y mis tres trepanaciones, de las sudoraciones que me producen fiebres imperfectas y de los dolores de costillas de las guerras de inteligencia que disputo por mí y por la sombra de otros: Mi credo en el cristianismo pero estoy bien si en necesario reucirlo a cenizas.Y nombro a las conjunciones astrales, que me hicieron nacer bajo la égida de sagitario, aunque yo desprecie siempre las formas del zodíaco: Cuando muera quiero que mi calavera apunte al sur y que los alucinados paleros no me desentierren para hacer gestas de ocultismo satánico.Y, mientras viva, hablo, hablo y hablo y me ocupo de todos los temas que me conmueven de debajo del sol
Contemplo páramos contaminadospor el bermejo que cae de los satélites.Contemplo el azabache brillantede las muchachas que tiemblan a un primer disparo.Hay regresión de luces y regresión de estrellasy los astros enfrenta su revés.Contemplo el asentamiento del luto en los árbolesy una miga de luz en los canarios.Las cosas andan en jugarreta y son infinitamente torpes.Contemplo cavidades de brumas en mis ojosy un fuego enjuto que toma mis sentidos.Las horas se ahogan una a una y, como siempre, van en ahorcamiento.Contemplo aún más de lo que debo y eso me ciega.
Es la hora en que relego al tactosubir por tu espalda sin usar un cayado.Debajo de tu piel te domesticascomo una fiera entregada a las rimas.Subo hasta los bordes de tu cuelloa través de tus blandos lineamientos.Y todo en ti es amor vibrantecomo sueles volverte cada tarde.Y si bajo a la frontera de tu espaldame besas con tu boca nacarada.Y estamos sedientos sobre sábanas verdessin titubear del fuego que nos mueve.
Las casas se arrastran hacia el bosquetratando de convertirse en fauna.Los puertos buscan amor y cambioy volverse caderas luminosas.El proyectil se piensa suave luminariaque llevará las arras de los pájaros.El estilete desea ser escrituray legible a los ojos de las constelaciones.Todo esto ocurre en un parpadeomientras yo mismo me medito y me invento.Cada cosa va en su pensamientoy es mutable y a la vez determinada.
Los días suelen serme cruentosmientras como de la basura plástica:No puedo distinguir los restos de algún pulposmientras voy disputando unos huesos con el perro.Sorbo a los hongos y desespino al erizoy me porto como bestia en la arena carnal.Estoy espiándo siempre los sucios restaurantespara ver si me robo una sopa caliente.Con gusto cambiaría una mano por pochoclosy un ojo por abrigo cuando el frío flagela.Y cuando voy cargando mi ominosa figuralas mujeres se asustan de mi hedor tan rotundo.Vivo entre unos arbustos que me hacen de rotonday en lechos de cartones van mis corazonadas.
Me siento en el banquillo de mi contentamiento diurno:Para mirar, para oír, para olfatear lo que pasa.Veo a las mulatas enfundadas en sus breves vestidosy mi imaginación se divierte despojándole de sus prendas.Blancas y oscuras las veo orbitando a mi derechay me invade la serenidad que de sus poros sale en cascada.Hago señas para contener el aire y respirarlasy sé que la esencia femenina entra en todas mis raíces.Sus senos se levantan al tacto de pájaros invisiblesy mi mirada les planta una caricia en el ombligo.Todas son majestuosas y a cada una le asigno un tronoy con sus melenas eléctricas haría acordes de güitarra.Todas son para mí como frescas frambuesas que aliviarían mi garganta con sus pezones de dátiles.Cuando me doy cuenta ya la noche ha llegadoy entonces me voy a mi lecho nocturno, del que sólo conocen las palomas
Hoy me he vestido de marrón,hoy mi hermana ha dejado el negro.Hoy me he puesto de pie luego de una cuarentena en cama.Pero para ello me he servido de los favores de tu lenguaque se ha paseado por mi cara como un astro en una laguna.Esta firmeza que me nace se la debo a tus besos continuadosy a que vinieras a mí con tu torrencial figura salvajeencarnizando a la mujer que una vez soñé y dibujé en un vaso.Tú, la de sedosas marañas que dan vida y suspiros.La de crestas frondosas que medita en mis fábulas.La que serpea por los terraplanes de mis sueñosy comparte conmigo su beso impronunciable:Moviéndote como una brasa enhiesta que se ladeavoy tras de ti, a la siga del camino.
El día abre las puertas y trae su merienda:Es un muchacho crecido que asalta el preescolar.Va por las laderas desollando los caminos vetustos.Derrite la nieve que dormita en las entrañas de los cerros.El día viene con sus veinte ojos para mirarlo todo.Se cuela por las trastiendas y fisgonea lo que hay en las marmitas.Sus caras son incontables, sus manos entre todos se cuelan.Tiene una boca ancha y besa a la vez querubines y reliquias.El día bulle bajo las minifaldas y hace que las jóvenes tengan calorones.Lleva colgada de su cuello una cantimplora de destellos.Se alarga sobre los techos para hacer que se achique la sombray hace todas las tremenduras propias de una vacada.Yo amo su paso silente y caudaloso y las espectaciones que me crea.
Es como un despertar vacíoen los lugares más extraños, azul, color azulde hemisferios que se contraen,aguas que se niegan a las playas,es un tiempo en propiedad de un hado...Color del frío que se ha impuestotanto y tanto tiempo, que el lugar más queridoya se halla desértico, es un velámenexpandido hacia la esperanza, sumergido...Es azul, dolorosamente, es una cruzforjada para hacer daño, para clavarsea un paisaje marino, hacerlo esclavo,para aislar las calles del puerto de todo el resto,que sea éste, mi lugar de recreo,amurallado de densa niebla,que esté fuera del calendario,que sume a mi tristezala sabiduría de lo que se pierde,un contar astuto de meridianos solos,la noche que se proyecta tras su sombra etérea,el carisma del tiempo en que nos morimos de frío, en que los halos de la boca vuelan,pues el desamor los arroja de nuestros cuerpos,eres azul...un invierno, una llaga, lo enfermo,un día tan largo como meses, el pasode un hora aún por domesticar,mi refugio y mi celda...a resguardo de ese azul que tanto daña.
Ya lejos de toda parentelay pactado con dioses y demonios.En la enredadera de púas que es mi vidaveo que han desaparecido mis orgullos.Vuelvo a tener aprecio por el panal de miely pongo en su lugar a lo que es quimera.No corro tras lustrados arpegiosy de cada lugar quiero tener su pulpa.Quiero saber de lo que es humildadaunque sigan en desbarajuste los planetas.Quiero que en mis manos nazcan algunas plantaspara poder llevarlas al agua del potaje.No quiero saber de barraganas ni de sonreidorasque van en sus jícamas devorando los mundos.Sólo quiero la paz que no contenga agraviosy trazar la salida a mis sublevaciones.
Héme aquí deletreando tu ausenciaal lado de un lodoso contramuro.El mar ruge contra las mamparasy como esquirlas duras es el agua.Yo me voy perdiendo en mis secuelascomo aquel que a sí mismo se destroza.Estuviste en mi tenso retrato de familiapero te llevaste tu cara de las tablas.Eras otro torso en medio de mi tóraxque hablaba, saltaba y renacíay astilla de espejo en el levanteída en anticipadas migraciones.Hoy te miro en un canario heridoy entonces me doy cuenta que es mi pecho el que sangra.
Si tus besos no vuelven decaerán mis manosy seré como el último moribundo de la tierra.Si tus besos no vuelven me habrás arrinconadoen el lugar más frío donde muere una elipse.No habrá en mí más que respirar de pestesy algunos soliloquios encubiertos por siglos.Si tus besos no vuelven me hallarán soterradoen alguna ladera de sienes sin sosiego.Si tus besos no vuelven renunciaré a hemisfériosy comeré por siempre la cultura del hambre.El tiempo me quitará mis muchas manecillassi tus besos no vuelven a ésta boca mía.
La mañana se levanta y yo con ella:Están fluyendo barriadas y comparsas. Las mujeres caminan sobre lo lúcido ciñéndose al añil del mes. Hay cabelleras híbridas y labiales llenos de sensibilidad.Pintores y poetas hacen una fogata con algunas cabañas que sobraron de sus sueños, la rima está aletargada y prefiere flojear y darle paso al relato que con estos fríos se facilita. Cada quien tiene una fanega de ideales que cargar y algunos llevan atragantados nudos en el alma. Todas las imágenes tienen origen al calor de las flamas y las lavanderas pasan embuídas en un río de quimeras inmediatas.Hay cierta palidez en los mulatos por la incertudumbre de encontrar trabajo en el breñal, pero la mayoría está cari-compuesto y sabe que se avecina la quincena. Hay hombres potables y mujeres digeribles y traslúcidas que todavía no han salido de su cama pero piensan que sí. Las palabras comienzan a deletrearse en las escuelas y a levantarse en su espíritu vivo. Hay colectas para toda clase de calamidades y centros de acopios para los que padecen del mal de amor. Una hora se enlaza con la otra y, entre ellas, se va moviendo el siglo a pestañeos. El color invade las rendijas de los sentidos y hasta los animales dejan de verse como acreencia del hombre: Las cosas se liberan en ríadas de brincos y las sonrisas corren junto a ellas. Yo como algunos maníes mientras dejo írse mis pensamientos a la deriva y ver en qué golfo caerán y sobre qué incertidumbre estaré centrado mañana.
Estoy sentido:Mi habitación gira a contraluz.Un gato salta y desapareceen el tercer cuadrante de la cama.Como una homilía del crepúsculola luna toma por altar mis almohadas.Mi corazón está receloso y heridomientras en la pared aún relumbra tu silueta.Es grande la soledad cósmicade no tenerte conmigo en mi esperanza.Las cosas se secan en mi manoque ya no desean sostener más caricias.Tristeza: Esa es el alma de todo lo que llora.
Diciembre decae: La gente no lee y algunos se alimentan de su melancolía, pero las mujeres andan untadas de claveles y se preparan para los primeros regalos.El viento se recorta en lacitos y es su fragancia un presente. Las arboledas contribuyen al bullicio desvistiéndose de hojas y poblándose de cantos. Se venden manzanas acarameladas y mezclas energéticas a granel y, en aquellas regiones donde nieva la gente se refugia a las sombras del rescoldo. La intensidad y la generosidad tiritan en el aire y no hay nada solemne en la cara de los ciegos.Hay que alcanzar la epifanía que es el día de navidad, para jurar en año nuevo hacer dieta y no volver a maltratar a los limosneros. Yerbateros, jíbaros, paleros y santos están de fiesta y las comisuras del año nuevo ya empieza a escribirlos.Con mucha precisión y cuidado, tú y yo y cada pareja dibujaremos los caminos del mañana prontísimo: Pero indudablemente el sol se repetirá aunque las laderas sean derrumbadas por las lluvias.Pondré un altar para quemar mis inciensos y holocaustos a pesar que los hombres guerreen sus batallas asimétricas.
Marcamos las sendas con tizay luego la lluvia las convirtió en barro,dejamos tristes a los amigosy el paso del tiempo los tornó dibujos.El oro viejo se carcome como la maderadestriada por batallones de gusanos,nuestro pasado cae a trozos impares:La rubia ha muerto, el tipo sigue andando.
Hola soy nueva me llamo Luminia de cariño soy Lu, y me doy cuenta que esa Cristina es un ser primitivo es muy grosera, apenas me inicie hoy y me estoy decepcionando tu eres un gran escritor te he leìdo y por eso me animè a entrar espero me leas
Bianca: Ni siquiera creo que existas realmente.....¿ Eres hombre o mujer ? ¿ Esa foto es tuya o no ? ¿ Quién eres? en el ciberespacio hay personas con múltiples identidades....¿ Quién me dice que no eres un envidioso de esta página o de otra ?...Creo que eres FRANK LAMEDA que me persigue siempre.....En fin Frank o Bianca, como te quieras llamar. Vete al demonio con tu envidia pues no eres capáz de escribir ni medio verso...Siempre andas falsificando correos electrónicos, fotos y personalidades....Eres una vergúenza en el ciber espacio....Y ya tienes años persiguiéndome....Alguna mano ya te alcanzará, pues la justicia se hace de una manera u otra
Querido Richard, k gusto es tenerte aquí diciéndome cositas tan bonitas!! Que suerte la mía!! La belleza es algo tan fugaz como temprana , no crees? Yo me veré bella el día k tenga mi melena. Larga(siempre larga) toda blanca(ojalá) arrugas por toda cara(ojalá) y tenga mucha serenidad(ojalá). Y todo eso sin pasarme por el quirófano y parecerme una de 60 con 35 años. La belleza y su relatividad. Es k es tan relativa... Jeje.
Es un placer venir aqui visitar tu rinconcito y beber un poco de tus versos. Son las pequenas cositas que dan sentido a la vida. Brindamos por las letras!!
Gracias Richard tú sabes cuanto aprendí de ti, eres de los mejores salud!!! desde el mictlan donde jamás se me ha olvidado que siempre seremos Hermanos de TInta, gracias porque haz estado conmigo desde el principio amigo
Hola Maestro, soy un admirador suyo, lo conocí a través del chango y me solidarizo con usted en lo que respecta cierto payaso, con mucho respeto le dediqué una poesía a ese mediocre, un poco inspirado por la distancia que los separa. Espero su aceptación como amigo, su seguro servidor...Alek El Azrael.
Querido Richard, de más está decirte que me gusta como escribes, se nota a la legua. Es un gran placer leerte y asombrarme de la gama de posibilidades que brindas a los demás.
Mi keridisimo Hermano de Tinta...(oh...espera desde hace algun tiempo keria komentarte algo..no te molesta ke te diga asi verdad...digo...sabes...kasi siempre adjudiko un seudonimo a la gnte interesante ke m e deslumbra o cautiva por algun akto...y kreo ke la primera vez ke te lei se asemejo algo ke yo antes hacia...y kreia ke nadie notaria o ke no era algo genial...y kundo lei algo ke tu pluma gozaba y relucia a kada momento...pareciese ke nuestro entorno...la tinta...dos gotas...fina comparsa...por eso se me vino a la mente akello...Hermano de Tinta...y pues me da gusto ke ahora lo digas o tengas esas frases...jajaja...) Bueno a lo ke voy...te invito a ke pase kon todo el cariño del mundo a leer mis dos nuevos textos Escarnio en Fugaz Verso...y Tu No Eres Una Musa...ke pues ahi enkontraras algo ke aprendi de ti...pero yo lo konverti en groseria....te espero mi kerido Hermano de Tinta.... desde aka...saludos....desde el Mictlan
Richard Albacete
Lu
Alexandra_sol
besos de alexandra
Richard Albacete
en el ciberespacio hay personas con múltiples identidades....¿ Quién me dice que no eres un envidioso de esta página o de otra ?...Creo que eres FRANK LAMEDA que me persigue siempre.....En fin Frank o Bianca, como te quieras llamar. Vete al demonio con tu envidia pues no eres capáz de escribir ni medio verso...Siempre andas falsificando correos electrónicos, fotos y personalidades....Eres una vergúenza en el ciber espacio....Y ya tienes años persiguiéndome....Alguna mano ya te alcanzará, pues la justicia se hace de una manera u otra
May Vicky
La belleza es algo tan fugaz como temprana , no crees?
Yo me veré bella el día k tenga mi melena. Larga(siempre larga) toda blanca(ojalá) arrugas por toda cara(ojalá) y tenga mucha serenidad(ojalá). Y todo eso sin pasarme por el quirófano y parecerme una de 60 con 35 años.
La belleza y su relatividad. Es k es tan relativa... Jeje.
Gracias por tus piropos. Tan lindo!!
Feliz semana para ti también.
PD: besitos de Biankita igualmente.
May Vicky
Es un placer venir aqui visitar tu rinconcito y beber un poco de tus versos. Son las pequenas cositas
que dan sentido a la vida. Brindamos por las letras!!
Un abrazo lleno de energia positiva para ti.
Hoz Leudnadez
tú sabes cuanto aprendí de ti, eres de los mejores
salud!!! desde el mictlan donde jamás se me ha olvidado que
siempre seremos Hermanos de TInta, gracias porque haz estado conmigo desde el principio amigo
alek el azrael
María de la Paz Reyes de Langella
leticia salazar alba
Hoz Leudnadez
Bueno a lo ke voy...te invito a ke pase kon todo el cariño del mundo a leer mis dos nuevos textos Escarnio en Fugaz Verso...y Tu No Eres Una Musa...ke pues ahi enkontraras algo ke aprendi de ti...pero yo lo konverti en groseria....te espero mi kerido Hermano de Tinta....
desde aka...saludos....desde el Mictlan