No tengo cuerpo ni nombre: Me trajeron los halcones en visceras aceradas donde el bribón no se come aunque al mentiroso traga. Tengo el frío de la noche irritado por las llagas de pendencieros salobres. Por lo negro serpenteo negando caminos rectos y me serán por amigos los grillos y los insectos : la aurora devorará los ritos y el desconsuelo será miles de muertes en aguas que claraboyas traspasan. Voy debajo de la piedra de aquel que busca querellas: Como sustrato de nada al que pisotean y calla.
En el centro de tus ojos ríos de alegría nacen y se esparcen en los rostros cual el mío: tan redondo y me despeño en mi polvo muy común y nada cósmico ..... En mi barro yo me arrastro a tus talones cercanos antes de volverme ruido disperso en miles de olvidos.... donde bailaré y seré tolvanera y acertijo..... .
La flama cae y devora los enjambres y las rosas y entre incendios no se mancha con fósforos de baratas. Su luz conseme pistilos y hace llama a los nidos y los tordos picotean antes de quemarse en yedra. La flama arrasa a los yuyos y mordisquea capullos. Y es movediza en su centro: ondeando sobre lo yerto.
Decenas de claves llevas como capullo de penas. Sóla te has codificado y tu malograda alma se encriptó entre los retazos de otras ánimas cortadas que nunca fueron de heraldo: Para ti se hizo la noche y sus lágrimas de cobre... y los silencios del noble que por ti ora en los faroles.
Chorro de luz infinita ante mi presencia exigua. Eres tú en cada hoja que no conoció ceniza. se exacerban las catervas de los que nacen de piedra. Por un instante transito por los lomos de tu brillo. Amor de clinejas clara que baña a todas las aguas y te tienen por delicia las fábulas y reliquias: Trae de todo tu aliento en sus madejas de verso.. recostado yo en tu luz, soy tu lucero primero primero aunque no sea rosacruz en cruces de alma te llevo por todo camino azul, y en tus cavernas me encierro, porque toda a contraluz, me darás mieles y luz.
Vivamos para poblar a este mundo agresivo, que pretendió tener paz y seres casi de vidrio: vibrantes y cristalinos que se dieron a las guerras de las que huían los caballos: Jinetes y jineteras fueron, a la par, tormenta, y la sangre del errante llegó a fatigar la tierra. Se fue esa generación que lanceteaba a la estrella: Y sus ojos se vaciaron en los paréntesis albos. Y todo fue reducido a luto entre pocos vivos. Y se erigió altar de piedras para rememoración perpétua. Más una daga en la arena se negó a integrarse en ellas y se repetirá el ciclo del soldado y su gemido.
Para amar y descansar es que yo extiendo el mar que en exhalaciones pasa barriendo estigma y palabra.... Nunca ese mar se amansa ni se le verá fondear al fondo de una galera con su plenitud de sal y dolores de salmuera que aman salpicar rostros en las mil playas desérticas ..... Que hay adentro de tus ojos..... pequeña, luciente y déspota.
Pasa la tarde pesada aplastando a las muchachas: Se vendieron como esclavas porque debían dos cabras.... Su paga es medio denario y en libertad no piensan ni en la tierna enredadera que las sujeta a esta tierra ni en el azul de la bóveda celeste que las rodea.
La boca se vuelve rosa cuando la lascivia asoma: Viene encima de sus tiempos sin saludar a la tarde.... Montescos y capuletos la tildarán de cobarde Pero alumbrará los ojos de todo aquel que la trate como aroma delicado mientras es bruma su talle y sus luces se prolongen en los que se aman de noche como ríos imperiales.
Llano largo, llano largo que por mi sombrero cruzas permíteme ir al rancho que la ranchera me busca: Se ha vestido de azafrán y de un carmín retostado tomó para hacer sus besos más violentos e insensatos.
Entre los rayos estuve revoloteando tus cumbres: Son rosaceos sitios cárdenos que reviven vidas secas y a toda pasión reinventa: Eres de manglares largos y escarchada como perla.... Te cruzaría a caballo si así tú lo dispusieras.
Si en amaneceres muero no me levantes de ese sueño: Permíteme que descienda a donde se origina el agua y el fuego se hace tierra: Tal como dice el Sicómoro muy sabio en cada recodo.
Yo me he perdido en tus manos como gorrión solitario: Con sus alas recortadas por los aires de maltrato. Mi cabeza gacha llevo a tu palma, que es mi lecho... Me curarás de quebrantos pues caí en mi descalabro. Y una vestal necesito para retomar el vuelo, con mi Yo al fin contrito.... Y verás que luego vuelvo pues ya amo tus aposentos y tus deditos mestizos.
Entre el rigor de lo gótico me someterá la Luna a ser consuelo de otro, aunque provenga del lodo: No me cruzan los pantanos ni el Línce decolorado: Me he levantado en pureza en arquitectura férrea. Cruzando por los espejos que acongojan a los vientos. Quizá puedas entenderme cuando gotée de un lucero...
No pidas filosofías a las rosas en su viento ni al nardo en revoloteo.... Déjalas: ellas se suman a un sumiso alfabeto que describe hembras gráciles en los impolutos aires: la mujer vive por dentro sus fascinantes tormentos y su garganta declara murmullos en lengua clara.
En la niña de tus ojos comenzaré la vendimia de mirares nada cortos que a mi íris encandilan.... Beberé de ese lagar donde se dan labios rojos Y dejaré que mi cuerpo se diluya en tus adentros: y seré imperecedero por cada latido nuevo de tu corazón melífluo donde escondo mis sonidos
Pasa rutilante el cuervo, vestido por sus migajas, recolectadas de reinos en que el bardo sus bisagras jamás podrá declamar. En la osadía del cielo fulgura el quebrantahuesos, y los azores, infames, espían desde sus venenos: No todo duerme de noche: lo que poseyera cuerpo ondulan en los rizos diurnos y vejámenes nocturnos. En la negrura se ve al depredador siniestro que va lanzando sus trampas para bisoños y lerdos. El peligro en los plumajes no lo entenderán los necios. Falsa cobija de estratos para seres indagados que sueñan con hexaedros, que no se cuidan del muro, ni del acecho el sauce. La maldad siempre nos busca por los extravíos nuestros: Aunque en las manos llevemos la lis de los adalides y que de los pechos surja pasión de paz y de cuna. La noche se hace peligro para los poetas tuertos echados en los tusílagos y recontando pistilos: Como soy gitano cargo navajas y crucifijos y agua santificadas que diluyen al inicuo y mata al monstruo que venga con su plumaje de sávila entre oscuridad y rezos, relamiendo una mandrágora donde su maldad se canta y es saeta que te caza.
Sueño: de noche no llegas: De mí te has olvidado como de tajamar roto. Aguas arriba, no me vistes abajo: Ni mi rostro maltrecho al que dejó tu luna. Mis parpados rajados en vano han esperado la fuerza de tu peso, tu glorioso volúmen, que a los seres comunes dan descanso de noche y les designas sueños y recreos mentales. Como junco quebrado me llené de cilicio. Nunca me contemplaste desde el fondo de un eco y de tu espejo vano no vislumbre a empatía que viniera a ayudarme con sus pieles descalzas. Te alcanza el arroyuelo y el soldado en la guerra: Y como garra vences a todos los amantes. Te invoqué en las vigilias que sobraban del día y sólo vi dormirse a una planta en mi mano. Nada te hecho nunca para que no me observes y aún te sigo esperando desde mi lecho roto.
Vaga la hora en su viento sin levantar titinéos. Y Vago yo en mí vacío tan antiguo e intranquilo. El sopor en los ladrillos no trae algún regocijo. El pueblo está clausurado por las clausulas del diablo. Y sobre los lechos cesan las damas en sus camelias. Y el hombre muere en su antro tan cirrótico y apatico.... Pueblito: ya me das miedo. Pueblito: ya me das asco pues te cela cancerbero y no dejas de mirarlo
Se pasea por las tardes la muerte: siempre cobarde que me asedia en cada siesta o muelo en buena molienda. La vida es suspiro y pasa como breve madrugada. Y es de ligereza ciega semejante a lo que huye si su reflejo le aterra: No quiere estar en las cruces que los arcanos le hicieran... Vida de hálito cortado: te vas cual aire inmediato ....Y eres reina de tragedias con prisa de rima vieja.
Triste estoy de madrugada, de día abrasivo, de tarde, pues mi gatito ha muerto y pronto se hará lucero o alguna estrella aparte que ronronee en mi tarde. Tranquilo está mi minino sobre los cielos cobardes... Maullará de madrugada cuando me conmuevo y arde verlo por cada deseo comiendo de lo que muelo. Te alcanzaré, mi minino, en nuestro cielo excedido. Y a mi lado tus uñitas serán de rasguño grato para mi mundo tan frívolo....
No soy de aquí ni de allá, caminante trasalpino: El verde camino muestra sus incipientes veredas. Voy en mi color cobrizo y mis guedejas se increpan donde no existen desviós sino rayas yuxtapuestas. Como de toda la paja de la que se burlan yerbas. Y recojo cada trébol que derribó la insolencia. Las hiedras muestran cabezas en sus reforzadas celdas. Entre los rastrojos veo alejarse transpariencias y experiencias tan ajadas que envenenan a culebras. Con listón de oro paso, evitando los agravios. Las mujeres se emocionan y serán novicias ahora. Y los fieles monjes secos no charlan con pandilleros. Sueña que es cosa vana lo que al pelmazo se pega, y a la nodriza que canta ya la han borrado tragedías. Todo tiene su horizonte y algo de luto en sus bordes y mientras la quimera pasa, camino en horas exactas. Pues mi Alter Ego resbala cuando me acerco a las cabras....
Pálida, azorada turbada entre tus prendas insinuantes. Conturbada en tu cuerpo de almácigos. Sosteniendo los muros de tu vida entre tanta melancolía que traspone el aire, dudosa en las entradas de tu pétalo. Como las escaleras desciendes en larga luna. Te veo como vestal cansada o defenestrado oráculo: Sin fuerza pretoriana, como marchando a exilios la tristeza te ata con trenzadas cadenas y fuese tu optimismo como aurora de tarde.... No creas todo lo que recitan los inquietantes gnomos, no trepes a la peña que da sus vientos negros ni vayas por los dédalos de falsos laberintos.... Ven aquí, ser de alientos que de la flora crece, deja nacer ahora tus glorias y castillos. Que tintinéen todas las orlas de tu cuerpo, para crear al oro si no estás menguante. Libera ya tu mente de la angustia del cardo y del dolor histérico del que corta apamates. La tierra ya nos muestra sus caminos de vida y pide, degustemos sus copas con largura.
Entre mi Yo y las lajas quebramos toda mañana y trizamos lo que queda escondido en las arenas: Mi carne es de piel muy pétrea y clava lezna a las piedras.
Entre las sombras del llano la mía y las de mi caballo: y camino en peñas ciegas para así ocultar mis penas.... La noche y la extensa umbra para gemir en penumbras.
Hay lenguas de dos amigos que sólo se entienden en trinos. Todo ser humanizado tiene al prójimo a su lado.... y compartir su pan es lo mejor que puede hacer.
La piedra horada mis manos entre numerosos fárragos.... Y no es sangre lo que espesa en mis dos manos derechas, que en belleza se decantan proclamando tu belleza sobre los lirios y calas que a tu diestra, te recelan.
Si mis manos pudieran a mí, te trerían: A mi elevada cumbre donde ardo de tarde, y, soy río de mañanas que reparte sus bríos entre seres pequeños rescatados del fuego. Verías lo que soy sin mis ojos vidriosos e invento transparencias cuando la noche brama en sus tramos de olvido colmadas de lamento por un alma extravíada que desoyó al precámbrico y desorienta el páramo que tapona las cuevas.
Si ves pasar mi alma tómala y bebe toda sus canciones de rosa y muy breves diamantes. Para que así me sepas en toda tu pureza Y puedas intuír el olor de mi sangre cuando te cercan hombres bastos como molinos. Y en esa alma guardo mis más largas codicias y el calor cenital de mi mundo pequeño.
Para ti las guirnaldas, los soles de las perlas, Jardineras de aroma que plena a las estancias: El licor de la abeja que a las bocas desvive. Una estela sin sombra donde guardar el alma: El Eco de las virgenes para tiempos mejores y manos de eucalipto moldeadoras de muslos. Y la página larga que se te entrega entera para que escribas toda la armonía que cargas. Y también para ti una lengua de menta y aureolas urgidas de ir a coronarte. El paisaje y su edicto de bendiciones puras y el canario girando por la faz de sombra. Ante tantos regalos yo me siento pequeño: Un puntito de carne cerca de una laguna: como tizón ardido al que dejó Poesía
Bajo peñascos tiernos:Un ombligo de agua.y, un poco más abajo,la entrada del deseo:He ahí la saciedadque la mujer entregaal hombre que flameade sémen en su espiga.Y en esa honda grutatan rosada y rugienteel macho y la hembracambian furor en llanto.Es allí donde el hombreencuentra su cabiday quiere golpear cientos, miles de veces.Hasta hacerse uno sólocon la boca de turnoy dejar las semillasque engendran a los hijos.
Descubiertas mis manosen un jardín de torsosfui a buscar una cinturacolor de caracola:Me encontré con el ébanoy sus vellosidades.Me encontré con el blancoy su flanco voluptuso.Me hallé con el amarilloy sus fibras fluctuantesy algo de color rosase topó con mis ojos.Y no pudiendo yodiscernir la bellezame llevé tantos torsoscomo razas existen.
Bajemos al sepulcro con las manos unidasluego que nuestra vida arribe a lo luctuoso.Cuando alguien tome mi cuello y lo rebaneestaré yo esperando tu muerte en el ponientes.Cuando tu cabecita rubia ruede bajo la hozo el pecho se te pare como reloj gastado.Iremos de la mano a nupcias específicasy nos dejaremos ya de las ondulaciones.Y al ver que tu mano se ha aferrado a la míaun ánima dirá: " Hasta que la resurrección los separe"Y seremos lugar donde crezcan las rosasy cavidad no profunda que dé a luz zafiros.
Mi lucha constante contra mi yo y mis celosme hace fundir ríos con elementos:Los celos son como flamas poderosasque muy difícilmente apagarán las aguas.Por eso he rehuído a amores cercanosy, a amores lejanos volví lágrimas.Mis celos y yo son dos titanes fuertesque luchan entre sí pues se saben colosos.Por eso navego ríos de soledadespues estoy al tanto de la mujer coqueta.Como no quiero ser un constante homicidaabrazo el dulzor de las selvas más verdesy, en cabalgadura blanca, voy por la fonéticaadormeciendo palabras que luego iré hilando.
Mi efecto es pasar:No hay cuerpos ni vados que me detenganmucho menos amores engañosos.Conozco los pámpanos dulces que son los cuerposy los trucos de las hembras voluptuosas.Conozco su mente y su aire cambiantey constantemente me alejan y se apartan:Se alejan cuando van a darme el corazóno, al día siguiente, soy sólo capricho.Por eso pongo distancia y ecuadoresmientras sonríen en sus zapatos altosy me marcho a los valles en volutas de fuegopues ese es el impulso de todo peregrino:No las dividiré en buenas o malas:Simplemente la mujer de esa forma procedey salgo yo lejos con mi sombrilla y valijasa saber de las flores que nacen en murmullo.
Desecho las respuestas brevesque salen de las bocas que una vez me besaron.Aborrezco a la que se echa atrásluego que se ha aferrado a mi mano y mis tentáculos.Aquellas que de mezclas salierony me hicieron pensar en salientes prodigiosas.Son las mismas que hoy me desengañan:Pero pasarán en sus cuerpos a quebrarse en peñascos.Casi toda escritura es vanasi no se ha logrado con las tintas del alma.Y no codicio los amores virtualespues son destellos que no pasan de abrebocas .Y para destello estoy yo mismodesechado del mundo y de sus laberintos.
Aquí, frente a un mar de acantiladospienso en las parejas que se amaron y se fueron.Pienso también en mi última rupturaque me trajo todo el sabor del salitre.La tarde era roja aquel entoncesy se vaciaba mi dolor en la arena.Algunos íban y veníanentre besos, susurros y altercados.Pero hay que darle al tiempo lo que es suyo:Es relojero que reconstruye añicos.Ahora mi corazón late alegre junto a mi sombraesperando a una hembra que me tome por suyo.
Allá, donde el sol avanzase atomiza y se hace pureza.Se instala en la risa de los niñosy en el presumir de las vagas gaviotas.Cada uno transita con su luzque no es más que sol pulverizado.Las cofradías se mantienen brillantes.El naipe baila girando en sus moléculas.Las fontanas bombean bondad y algo de sombray cada muchacha se ríe de la que va al lado.Y veo que el sol es dador de alegríay salpica de destellos los estanques.Me contenta ver esta nueva facetade un astro al que culpamos de quemar nuestra piel.
Cuando muerala poesíase irá de míen su esencia:No la he acusadode prístinao impura,pero dejarálos lazos lapidariosy quizá reencarneen un simplemurmullo.Cuando mueramis huesosse envolveránde tierray alma y poesíase iránhacia extremidadesde vacío:¿ Es la poesíaparte del alma ?No lo creo....Los dones purosno se aferran a nada.
Voy por un blanco imperioa la búsqueda de más claveles blancos:Se agotaron los que había en mi mundoy el caballero gentil las necesita.Paso entre cisnes y lagosy cuellos de exclamaciones e interrogaciones.Trepo por los cuellos de las hidrasy me escondo muy por debajo de las yedras.Veo castillos de elementalidadesy nubes claras invocando a princesas.Veo a lebreles decadentesque se despojan del bozo y de la lanza.Y mientras el dragón del foso duermesólo tomo un clavel y le entrego mi solapa.Todo aquí es tan irreal y efímeroque cada uno se arriesgue a herir tanta tersura.
Debo apartarmede las que se disfrazan de cordero.Las que detrás de sus lentesllevan los ojos demoníacos.Las que fuman y piensan en aretesy se las dan de grandes en sus sones vulgares.Las de la risa falsa y acentuado cinismoque acuden al suicidio cuando ven la dureza.Debo mantenerme lejos de la que habla mentirasy exalta su lujuria en mareas de hombres.Y entre cuerpos ardientes sólo dice una verdad:Que alabar a la cópula es hablar con dureza.Cuando se ríen cambian haches por jotasy no saldrán maltrechas si les arrojan piedras.
" Al césar lo que es del césary a Dios lo que es de Dios ":Que yo estoy interesadosolamente en Mégan Fox.¡ Eso si es un mujerón!Lo dicen hombres casadosy es que me caigo de ladosi no me sujeto al ron.En Textale hay grande farsa:Todos: Triple identidad.Todos: CuatriceduladosSin saber si son verdad.Mujeres pasan por hombresy hombres como mujeres.Y es que todo es circocon falsía de interespacio.Pero una cosa sé:Si yo agarro a Mégan FoxNunca más la soltaré!.
Tú eres el alma,quien hace que en la casa nos amemos,quien nos fabrica lágrimaspara los tiempos de duelo, noches,pérdidas, soledades...Tú eres el alma, como madre es el pasillo,lo que engarza cada una de las habitaciones,cada miembro a un único cuerpo familiar,ella es la capitana, tú eres el alma papá... Shona lee. 28 de enero de 2011
En la oscuridad del jardíncuando la noche lo abate,en un rincón donde antaño juguéahora mi voz se rompe ante tipues me cuesta el decir:Huyo de ti...huyo de ti, no puedo ni quieroser alguien enamorado, no quieroque me beses ni me toquespor ningún lado, se acabó un tiempoy comienza un erial.Huyo de mí, de quien fui,ahora cierro todas las ventanasy con el silencio me basta.Por eso huyo de ti.
Generaciones hay apegadas al vicioque suelen tragar vino y frecuentar barracas.Tienen dientes amarillos de frenéticas barracudasy apuestan a sus mujeres por ganarse un anillo.Son largas sombras negras echadas en las sillasque buscan entender entre cartas marcadas.Obesos y críticos de la cintura a los piessólo se les antoja subir la escalera de náipes.Ellos mismos se mienten sus frecuentes leyendasy en la umbra descansan de jamás hacer nada:No viven por la luz que les da de su brillopara que puedan ver donde muere el arenque.A donde van son barro de cortadas raícesy furor sostenido sobre espaldas morosas.
Luz inquietarevoloteando por tu instancia marinaal lado de los arenales en la distancia voy.Perpétuo siglo que se abre, se cierra y se abrecomo la noche cuando devora la lisura de la luz.Las medidas delante de mí cambian a su maneray en el horizonte hay cruces que no logro alcanzar.Cansadísimo, humano, como dolor peremnecruzo los lineamientos que me dispone el día:No hay árces delante de mí, sino despuebloy la distancia como cáscara que no termina de darse.Pero yo voy rodando hacia las uvas viejasmientras el mar se destruye y decae su espíritu.
El lecho marino se mueve como los arrayanesy como por los túneles largos en que transita el viento.El lecho marino da su leche a las rocasy es raíz de los corales que adoran a las algas.Yo lo asemejo al vértice de una suave piedraque hace las veces de madre de los parias.El lo sustenta todo con su ronca estructuramientras los hipocampos van en rondas elípticas.No hay hélices que venzan su armazón poderosay es museo de restos que cegaría al humano.Algunos temblores recorren sus espinashaciendo que levante maremotos y tsunámis.Es la espalda perfecta para olvidar al barcoque hayan hundido las olas poderosas.
Fragor de brisa, paseo triste, tus manospasean con dulzura por mi cuerpo donde la pielenrojece y te ama más que yo, soledad en la calle,los coches aparcados envueltos en luz de luna,caminos vedados, la ciudad cerrada, tus besossellan mi boca y me bañan en silencio, la casa cierra los ojos, las habitacionesse encriptan, nadie nos oye, la madrugada no acecha,sus colores aguardan en la línea del mar,tu saliva se seca, mi sendero a ti parece dudar.Ese amor trenzado de silencios y caricias no tuvo principiomás su fin siempre acecha.Un aullido de lobo, una humedad de mazmorra, galoparde caballos, explosiones de granadas... una habitaciónentre todos, tus ojos claros... si habrá un final.
Entre el eucalipto vesperal y sentadopaso yo llevando mi sombra a las rodillas.Como un arriero cansado de llevar sepulturasbusco mi límite, mi ser, mi canto, mi unidad.Todo lo que yo cargo es una brasa verdeque me sirve de correa y un sombrero de paja.También la ondulación de un paso tenebrosoque permaneció mil meses reo encarcelado.Pero por allá se hacinan horizontes espesosy un beso de esperanza me pica y no me duele.Con brazo partido, de remero o jinetequiero alcanzar y estar en esas flores ténuesy no ver más espadas o amenazas de sórdidos.
Los hombres básicos no mueven las balanzas:Están fundamentados en su olor a terruño.Somnolientos andan en los llanos de sus casasy rellenan la ropa sin sentida molestia.Son como una asociación de arenas cuestionableso como agujas atoradas en uno u otro chalet.Los hombres básicos tienen inversiones polaresy no pueden airarse pues su sangre es de horchata.Siempre respiran de los largos paréntesisque nacen de los días de repitente rutina.Son seres que rayan en caudas elementalesque pueden servir de piso a un paraje nevado.Ellos no le dan arquitectura al orbey el árbol del progreso los arroja de súbito.No responden a las sencillas leyes de la inerciapues se dieron a luz para nunca hacer nada.
Hay una lentitud que promueve las cosasy tiende a llenarlo todo de pausas y cementos.Esa lentitud es como del corazón de las piedrascomo una circulación verdaderamente atascada.Cada hora se parte en pequeños segmentosque entre sí se contraen para no pasar rápido.La lentitud espesa la ya muy densa gotay hace que todo ondee hacia lo inespecífico.Más yo sigo unas pautas de corazón más rápidoy no me detendrán las trampas en las hojasY a veces dilataré semanas, meses, añospues no me atan cláusulas que a otros petrifiquen.
Como lo que lleva un sello:Como un sobre de macilento papelo un diario escrito sin respeto.Como un panfleto de íngrimos ilegalesque reclaman su estadía en la tierra.Así un beso he estampado en tu frente:Para acordarme de tu alto gentilicio.Para reoler tu aroma de azucenay buscarte en las tierras del turbión.Para que, al separarse nuestros caminospueda llegar a ti en una gota de aguao el murmullo que recorre algún río.Y, que en un reencuentro, jamás nos separemos.
Puse en tu cuelloun collar de utilería seca.Te dí los aretes más baratosy una canana de pétalos marchitos.Al mirarte no te di esperanzasy separé nuestros mundos con tres muros.Renegué a que siguieras mis pasosy no bendije tus abrazos de fe.Te vestí con harapos manchadosy prensé tus pies con algún fique.Pero he aquí, me mirabas de prontoy la belleza te había hecho súbitaY por más que te sembré en erroresme infundiste tu cariño aromático.Entonces supe que el amorsurgió de ti sin que yo lo sembrara.
Día muertosin trote, sin galope.Que no recibe la luz que da la miel.Como enterrado en tierra sin matíceshabiendo ya perdido la premura.Lo unge la áspera plenitud de lo laxo.Día detenido como galope defenestrado.Se miraron en ti tus horas más marchitasy cerraron los ojos al paso de la alondra.Hundido entre las cosas discretas y uniformesno te harán funerales pues nadie te recuerda.
La sombra específica, milimétrica, densaha quedado rezagada del cerezo:Se esconde en las espinas de cerros esquinadosdesparramando color y volumen de umbra.Es su masa ligera como aliento de cobrey le gusta mirarse entre patas rojizas.Mas hoy es concéntrica, cerrada, involuntariano quiere seducir a un vasto territorio.Se esconde de los himnos funestos y centrípetosque la arrastraría a un ceño en que se hicieran responsos.Primitiva, hoy escapa de las hebras primerasde la luz que levanta sus terrones al cielo.Y busca una hoja de laurel para miraraseen los espejos negros que forjan a sus ojos.
En el fondo del lecho somos dospoblados por besos y follajes.Nuestra casa la constituye un bosqueque siempre rememora tus latidos.El viento lleva amores y rugidosque vuelven a nosotros tras sus vueltas.Con toda afinidad me afino entre tus pechosy mis manos amansan tus pezones tan dulces.Las víboras se alejan de nuestro lado y muereny sólo nos visitan palomas y luciérnagas.Somos densos en la unidad frenéticay nuestras humedades las saben los jacintos.
Busqué tus ojos en las brumas marinas.Probé algas, probé flora, probé viento.Te busqué en toda afloración de luzy en las incidencias que arrancan los peñascos.Y descubrí que estabas hecha de constelacionesy tamizada a la luz de la luna.De miel era tu aliento marinoy tu brazo me guía como lo hace un faro.Cuando vienes a mí las estrellas se mojany un canto de sirenas hace mecer el agua.Atada a mi cuello, como collar de ostrassé que puedo confiarte los besos y la vida.
Mi pecho es de naciones de raícesy mis brazos de fibra palpitante.Lo que una vez fue el borde de una lágrimalo quité de mis ojos en rebrote.Marcho digno entre todas las ramascon lenguaje cimero y, a veces, ultrajante.Alrededor mío se secan las palomasy premonitorias golondrinas van al peregrinaje.Me he dedicado a medir mi anchura en la tierray a contar los caballos de golpes fulgurantes.He hecho las paces con molidos gusanosy excavaré mi tumba el día que yo quiera.En un ámplio territorio de sonidos me muevoa la espera del zarpazo de algún golpe lunar.Más mi madriguera está donde las zorrasque siempre se me acercan en mis precogniciones.De muy alta estirpe es mi estructuraque ha vencido ya a la carne vacilante.
Como una unidad firme:Decidida, compactada, milimétrica.Como teniendo la fuerza de los metalesy el peso oscuro de una luz que no tiñeasí avanzan mis dedos por tu largo regazocomo queriendo tomar un parque en la rodilla.Hay una masa de carne que te recubre el huesoy es mi mano que llega a conquistar tu sombra.En la estructura de tus piernas tan frágilesmis dedos son torniquetes que aplacan a tus venas.Hay una palpitación que viene de los pechosy se funde entre ambos como dura melaza.Y bajo de tu ombligo al que no toca la histeriamis manos tienen hambre de escarbar en tu musgo.
La orquídea renace de en medio de su tallo.Brotan de ella sus cristales de pétalosy su raíz de vidrio es pura refulgencia.No apareció en las manos de los conquistadorescuando llegaron con sus pestes al mundo.La circundan vértigos primitivosde la que prenden aromas imperdibles.Gira en los ojos de la mujer amadadeslumbrandola con su caliz de reina.La orquidea es constelación que sostiene la manoy muestra de un amor de color admirable.
Soy peligroso, pues uso los caminos y mis letras:Para mí se hicieron los botines y las más ligeras plumas.Cuando ando en las sendas suelo escribir mis notasque aunque no sean notorias, aceleran los pálpitos.Sé le teme a mi zurda como a un fuego dispuestoo como a una catapulta de navajas cortantes.Voy por la selva y mis pies aplastan las sombras.Ando por los infiernos apagando los fuegos.Ante mi presencia se despeñan cristalesy más de una bravata se tiñe de color lívido.Aún las mujeres tiemblan si ondean mis contornospor las circunscripciones de un crepúsculo roto.En mi se ha erigido un titán milenarioy un monstruo de palabras que destruye al que toca.Me río de todo aquel que me haga vilipendiopues no sabe el alcance de mis manos de lava.
Ciudad del trueno, los moradores duermen:Pasan caballos y negros hierofantes.Pasan encíclicas de realeas ya muertaspor las calles comidas por bocas de desiertos.Ciudad polvorienta sobre los cerros rotos.Tapiada de negrura, fosos y cadaveras.Por sus calles se arrastran las naciones del vértigoy no hay ninguna tráquea que pueda responderles.Los moradores todos durmieron en cilicioy esperan, en sus huesos, por las resurecciones.Ciudad de luto que la muerte ha golpeadoel musgo ya ha tomado tus ventanas y puertasY las arañas tejen sus hilos de estupory callan mientras van devorando capullos.
¿ De qué sirve hablar de los copihuesy de los grandes bosques que ya eran milenarios?¿ De qué sirve hablar de Isla Negrasi no te has asentado en los vientos marítimos ?Una unidad compacta, fija, como un farallónse tuerce hacia una noche de brasas clandestinas.¿ De qué sirve la bruma y sus vigas sin pesosi no te has asentado en tus cinco sentidos ?El agua cristalina se divide en raícesque entran en lo más sórdido de lodazales negros.Allá, en la prístina cuevapasa un cóndor buscando dónde posar su sangre.¿ De qué sirve nombrar los elementossi no has sido sujeto de sus viajes marinos ?En las minas, el carbón asfixia y quemapero da el sustento del pan para los hombres.Esos con rostros manchados como líquenesque se entregan en canto por algunas monedas.¿ De qué sirve hablar lo que no puedespalpar de una vez si sólo eres humo ?En la olarasca he ido a lugares remotosdonde sólo pernoctan los hombres y la oruga.Y mis yemas se han manchado de un cobre briosoque me dejó su luz y sus sonoridades.En todas las cosas se arrastra el corazón de fondoy la casa del alma está llena de humores.
Verónica:La que hace virar mis manos sin tener un capote.La que deambula en su casa en camiseta y bragas.La que vive al sur de la intermitente BarcelonaLa que hace nudos en mi alma que en amor desemboca:Blanca corola dulce enfundada en un cuerpo.Camina de aquí a allá en la noche interminable.Yo busco tocar su cintura inasiblemientras ando cimbrando todas las panderetas.Verónica: Hay una luz de playa que te recubre el rostroy le das el sentido a la palabra " Hembra ":Veneraré tu cuerpo de lucero sagradoque se mueve potente en mi preciosa España.
Cuando limpio mi corazón, lo hago para renacer:No me aferro a pasados, a decires ni a nombresni tengo en cuenta a las de delgadas siluetas.Cuando limpio mi corazón me desago de triángulosque sólo han existido en el cielo de mis sienes.Es mi deber desecharlo todo por lo novedosoe ir hacia hembras de fibras inquietantes.Cuando borro a mis amigos en verdad los olvidosy como altavoz se me oye partir de madrugada.Y hoy es un día de rebrotes en sangreen que todo lo dejo para nacer de nuevo:Mi advenimieto es cíclico como son las mareasy deben aceptarse como rayos de luna.
Hola soy nueva me llamo Luminia de cariño soy Lu, y me doy cuenta que esa Cristina es un ser primitivo es muy grosera, apenas me inicie hoy y me estoy decepcionando tu eres un gran escritor te he leìdo y por eso me animè a entrar espero me leas
Bianca: Ni siquiera creo que existas realmente.....¿ Eres hombre o mujer ? ¿ Esa foto es tuya o no ? ¿ Quién eres? en el ciberespacio hay personas con múltiples identidades....¿ Quién me dice que no eres un envidioso de esta página o de otra ?...Creo que eres FRANK LAMEDA que me persigue siempre.....En fin Frank o Bianca, como te quieras llamar. Vete al demonio con tu envidia pues no eres capáz de escribir ni medio verso...Siempre andas falsificando correos electrónicos, fotos y personalidades....Eres una vergúenza en el ciber espacio....Y ya tienes años persiguiéndome....Alguna mano ya te alcanzará, pues la justicia se hace de una manera u otra
Querido Richard, k gusto es tenerte aquí diciéndome cositas tan bonitas!! Que suerte la mía!! La belleza es algo tan fugaz como temprana , no crees? Yo me veré bella el día k tenga mi melena. Larga(siempre larga) toda blanca(ojalá) arrugas por toda cara(ojalá) y tenga mucha serenidad(ojalá). Y todo eso sin pasarme por el quirófano y parecerme una de 60 con 35 años. La belleza y su relatividad. Es k es tan relativa... Jeje.
Es un placer venir aqui visitar tu rinconcito y beber un poco de tus versos. Son las pequenas cositas que dan sentido a la vida. Brindamos por las letras!!
Gracias Richard tú sabes cuanto aprendí de ti, eres de los mejores salud!!! desde el mictlan donde jamás se me ha olvidado que siempre seremos Hermanos de TInta, gracias porque haz estado conmigo desde el principio amigo
Hola Maestro, soy un admirador suyo, lo conocí a través del chango y me solidarizo con usted en lo que respecta cierto payaso, con mucho respeto le dediqué una poesía a ese mediocre, un poco inspirado por la distancia que los separa. Espero su aceptación como amigo, su seguro servidor...Alek El Azrael.
Querido Richard, de más está decirte que me gusta como escribes, se nota a la legua. Es un gran placer leerte y asombrarme de la gama de posibilidades que brindas a los demás.
Mi keridisimo Hermano de Tinta...(oh...espera desde hace algun tiempo keria komentarte algo..no te molesta ke te diga asi verdad...digo...sabes...kasi siempre adjudiko un seudonimo a la gnte interesante ke m e deslumbra o cautiva por algun akto...y kreo ke la primera vez ke te lei se asemejo algo ke yo antes hacia...y kreia ke nadie notaria o ke no era algo genial...y kundo lei algo ke tu pluma gozaba y relucia a kada momento...pareciese ke nuestro entorno...la tinta...dos gotas...fina comparsa...por eso se me vino a la mente akello...Hermano de Tinta...y pues me da gusto ke ahora lo digas o tengas esas frases...jajaja...) Bueno a lo ke voy...te invito a ke pase kon todo el cariño del mundo a leer mis dos nuevos textos Escarnio en Fugaz Verso...y Tu No Eres Una Musa...ke pues ahi enkontraras algo ke aprendi de ti...pero yo lo konverti en groseria....te espero mi kerido Hermano de Tinta.... desde aka...saludos....desde el Mictlan
Richard Albacete
Lu
Alexandra_sol
besos de alexandra
Richard Albacete
en el ciberespacio hay personas con múltiples identidades....¿ Quién me dice que no eres un envidioso de esta página o de otra ?...Creo que eres FRANK LAMEDA que me persigue siempre.....En fin Frank o Bianca, como te quieras llamar. Vete al demonio con tu envidia pues no eres capáz de escribir ni medio verso...Siempre andas falsificando correos electrónicos, fotos y personalidades....Eres una vergúenza en el ciber espacio....Y ya tienes años persiguiéndome....Alguna mano ya te alcanzará, pues la justicia se hace de una manera u otra
May Vicky
La belleza es algo tan fugaz como temprana , no crees?
Yo me veré bella el día k tenga mi melena. Larga(siempre larga) toda blanca(ojalá) arrugas por toda cara(ojalá) y tenga mucha serenidad(ojalá). Y todo eso sin pasarme por el quirófano y parecerme una de 60 con 35 años.
La belleza y su relatividad. Es k es tan relativa... Jeje.
Gracias por tus piropos. Tan lindo!!
Feliz semana para ti también.
PD: besitos de Biankita igualmente.
May Vicky
Es un placer venir aqui visitar tu rinconcito y beber un poco de tus versos. Son las pequenas cositas
que dan sentido a la vida. Brindamos por las letras!!
Un abrazo lleno de energia positiva para ti.
Hoz Leudnadez
tú sabes cuanto aprendí de ti, eres de los mejores
salud!!! desde el mictlan donde jamás se me ha olvidado que
siempre seremos Hermanos de TInta, gracias porque haz estado conmigo desde el principio amigo
alek el azrael
María de la Paz Reyes de Langella
leticia salazar alba
Hoz Leudnadez
Bueno a lo ke voy...te invito a ke pase kon todo el cariño del mundo a leer mis dos nuevos textos Escarnio en Fugaz Verso...y Tu No Eres Una Musa...ke pues ahi enkontraras algo ke aprendi de ti...pero yo lo konverti en groseria....te espero mi kerido Hermano de Tinta....
desde aka...saludos....desde el Mictlan