No renuncio a vivirlos dulces días del otoño,ni a las brisas suaves de las olas de nostalgia. Las experiencias, buscadaso venidas por sí solas,han quedado en el fondodel crisol del corazónpurificando sus males. Hubo sueños no cumplidose ilusiones que granaron,amores que se perdieron,cariños que florecieron,ambiciones vaporosas,entregas fieles y noblese ingenuidades hermosas...  Y bien está lo ya pasado,y asumido y recogidoen el fondo destiladode lo gozado y sufrido. Porque el don de lo aprendidoes saber vivirte dentro,con plenitudes sentidas,mientras fluyes con tu almaen el río renovado de la Vida.                                                           (de "La caza del viento")                                                           

No vuelvas a caminarpor la senda en que perdistetus mejores ilusiones.Aquello ya pasó. No vuelvas a la misma puertaque te adentró engañadoen los besos traicioneros.Aquello ya pasó. No vuelvas a creer sofismas huerosde teorías cerradas en el aire.Aquello ya pasó. Los errores del pasadoallá quedaron,no volvamos a pisar el mismo polvode los caminos perdidos.                                                       (de "La caza del viento")                                                        Enrique González Matas  

Hay una foto clásicade un beso en medio de la callede una ciudad.Él, más alto que ella, la tiene sujeta por un hombro,ella alza la cabezadejando caídos los brazos.Sus labios se fundenen un acercamientoque quiere ser total,entrega plena,mutua donación apasionada...Y mientras, en el fondo urbano,la gente va a lo suyo. Es un instante que parece eternofijado en el papel de la fotografía,imagen consagradadel beso enamorado de dos seresque se encuentran o despiden,no lo sé. Pero, seguro que despuéssiguieron otros momentos,otras escenas y gestos,y los enamoradoscontinuaron con su vidasin repetir jamás, jamás,el mismo beso,porque nada es, nunca,siempre igual.                                                                     (Inspirado en "El beso", de Robert Doisneau, 1950)                                                

No conviene ahondar demasiadoen la pregunta laceranteque busca la raíz de la existencia, del adiós definitivo,de la desconocida persistenciade lo que somos... Desde mi ventana abiertaveo volar una paloma blanca.Yo sostengo el pensamientocomo el vuelo de sus alas,y digo en mis adentros:hay que volar y vivir, despreocuparse,no bajar a las honduras del sufrimiento,lo que ha de ser, será,pues el futuro que no conozcono es mi tiempo.                                                             Enrique González Matas                                                            (De "La caza del viento")                                                                    

Me dijeron que la libertadestá en no desear:"El deseo nos trae el dolor,la paz se alcanza cuando nada se desea". He aquí otra vez el dilema:¿Cómo puedo amar si no deseo?¿Cómo puedo crearsi no proyecto una ilusión?¿Cómo puedo hacer algo mejorsi no anhelo su mejora?... Hay un precio que pagar por viviren la estela de los sueños,y es perder la paz de la quietud,porque querer es vivir inquieto. Mas, si he de elegir,elijo vivir con mis deseos,con el riesgo de encontrarventuras o desengaños.                                                          Enrique González Matas                                                         (De "La caza del viento")    

No cabe otra mejor solución que soñar,soñar, aun sabiendo que soñamos,porque la intuición,presentimiento de lo lejano,puede anticiparse a la realidad velada.La razón confirmará despuéssi el sueño fue verdad,pero la visión de la llama lejanaes necesaria ilusiónpara soportar la ignorancia,pues el sueño que presagiaalienta, al menos,un vivir con esperanza.                     E.G.M.  

No me busques, me dijo la belleza,es inútil, no me encontrarás. No me persigas en la imagen, ni en el verso, ni en la música...,es inútil, no me encontrarás. No me esperes ni despierto, ni en vigilia, ni de noche, ni de día...,es inútil, no me encontrarás. Apareceré de improvisoen cualquier momento, en cualquier lugar.Y, después de verme,pensarás que no fue real,que solo fue un sueño,porque cuando creas que me estás gozandoya me habré marchado al reino invisible del lejano ideal.                                                                          Enrique González Matas  

A los que nunca amaron,porque nunca sintieronel fuego en el corazón,les digo:Probar el fruto del amor,aunque dicen que fue prohibidoen el Edén de los sentidos,mas, tened cuidado,porque una vez probadono queremos perder su sabor,y es dificil hallarlo para siempre:algo nos descubre que era falso,o, si fue verdaderoel tiempo inconstante y cruelnos lo arrebatará traicionero.Por eso os digo:Tened cuidadoporque es dulce y es amargo,es placentero y desabrido,y, aveces, tan terrible y engañosoque nos puede matartras haberlo probado.                                                                    Enrique González Matas 

Volví a tu ciudad sin cita previay no estabas tú.Yo sabía,cuando contigo estuvepor sus calles y plazas,que aquellos lugares y paisajes,lejanos para mi,solo eran de transito;pero en ellos dejé mi miradaprendida en los arcos,torres, puentes, ríos...,y mucho más:mis sentimientos de amory enardecidos besos. Volví a tu ciudad sin cita previay había en ella un gran vacío:no estabas tú,y yo era un extrañobuscando lo perdido.                                                             Enrique González Matas  

Me perdí, encontrándome,en sus ojos negros.De ellos y de sus destellosme llegó la luz,y la luna blancareflejada en ellosme llevó a los cielosde sus ojos negros. Hogueras de San Juanencendieron en sus ojosllamas embrujadasque en mi corazón prendieron. La olas que en la playaoigo por San Juanme recuerdan siempre,con su canto y fuego,que habito en la noche, noche de sus ojos negros.                                                          Enrique González Matas   

Sobre el plano horizontalla línea vertical soberbia;sobre el hundido vallealtiva la montaña entre los aires;sobre la tierra pendientelas aguas del río hacia los mares... ¿Hay alguna cosa independiente,alguna realidad que no se apoye,para ser o relucir, en otra?  La Tierra vive por el Sol,el Sol por su galaxia blanca...Yo mantengo mi contentoporque me veo en tu mirada. Todo está enlazado en la trama compleja de la vida;y yo te necesito, amor,como los campos a la lluvia.                                                              Enrique González Matas 

En la luz crepuscularque precede a la salida del solo a su ocaso por la tardehe vivido incertidumbres secretas. No era noche, no era día; la claridad indecisadel inicio o fin de amor mantenía la esperanza  de conseguir a la amaday, después, de no perderla. Luz incierta, indefinida;no era noche, no era día,el corazón mantenía su inquietuden vilo de amor y de espera.                                                         Enrique González Matas 

NACIMIENTO DE LA PALABRAEscrita estaba la palabra en mi almacomo un resplandor; se formó en mi mentecomo una idea; la transcribí al papel como un dibujo de letrasen el idioma que suelo hablar. Ya estaba naciendo la palabra en su propio amanecerrompiendo la noche del silencio,pidiendo su feliz alumbramiento,y fue bautizada al pronunciar su nombre:"AMOR", sí, "AMOR",porque esto que siento,ardiendo y temblandoen el alma y en la carneno puede tener otro nombre.                                                             Enrique González Matas 

TARDE DE JUNIORectas palmeras altas, entre yucas de múltiples brazosy olivos de troncos retorcidos,acogen protectoras sobre el céspeda un grupo de jóvenes alegresque cantan con guitarras y laudes. Es tarde serena de junio.Las chicas ríen hermosasla gracia de su juventud,y ellos responden más serios,con su varonil asedio,en la conquista del juego: juego de cortejo y cerco. Es tarde avanzada de junio.El estío inicia su reinodesplegando su vital ardor:enciende la sangre,alegra las miradas,acerca las manos y la piel y abre los labios a la miel del amory a las flores del alma. ¡Qué milagro de vida en su esplendorde jubiloso junio!                                                            Enrique González Matas  

EL AMOR POR TODOS LOS CAMINOSHe recorrido por mi suertemuchas ciudades, aldeas y lugaresy siempre hallé el amorpor todos los caminos. La luz que los cubría era distinta,distintos sus colores y sus casas,distintos su cantar y sus palabras,mas siempre hallé el amorpor todos los caminos. El amor hecho sonrisa,beso, aliento, lágrima...El amor por todos los caminos. El amor por los paseos arboladosde tanto pueblo que sale en día festivoal encuentro de la vida en la zozobra,la dicha o la pasión.El amor por todos los caminos. Paseos consagrados a la mirada inquieta,al dulce adiós,al evasivo silenciodonde los corazones luchan su porfía,donde se funden balbuceos, temores y suspiros... ¡Oh, sí, yo he visto el amorpor todos los caminos!                                                            Enrique González Matas 

  SER MADRE ES SER ELEGIDA PARA PERPETUAR LA VIDA Y EL AMOR.                               E.G.M.                         ¡¡FELICIDADES A TODAS LAS MADRES!!. 

PRIMER BESOMirando al poniente,tarde incandescente,recibía el calor vehemente de otros labioscon los ojos entornados y el corazón temblando. Mirando al poniente,mar encendido de reflejos,entregaba su candor, turbada adolescencia,en el primer besode su primer amor. Tiempo más tarde,¿qué fue de aquella promesa surgida en aquel instantede fulgor y vida,entrega de ilusión intensaante el rumor de las olasdel mar y de la vida?                                                                 Enrique González Matas 

RITMO HORARIOLa sombra de la agujadel reloj del solseñalaba las siete de la tarde estival. La esfera circularde mi reloj de pulseramarcaba fielmentelas siete de la tarde. Ella llegó puntual, con su fresca sonrisay belleza desplegada,iluminando la plaza del amor. Y en mi corazón sonaronlas siete campanadasdel reloj de la iglesiacomo repique de fiesta. Todos los relojes marcaronen el ritmo horario los fuertes latidos de mi corazóna las siete de la tarde.                                                                Enrique González Matas       

Z A R P AEsto que llevo en mis entrañasclavado siempre como un puñalde torturantes filos... Esto que me atormentay vive agazapado pidiendo su momentosin tregua y sin olvido... Esto que es mi dolor y mi miseria,mi alma y mi razón,mi triste agonizar y mi alegría... Esto que es como zarpa,garra y muerte, lucha y suspiro... Esto que es hambre y es amor,desdicha y guerra, paz y consuelo... ¿Será señal que anunciaque habita en mi lo eterno?                                                       (Final de Alfabeto de inquietudes)                                                               Enrique González Matas   

Y OLlevo dentro de miun yo muy fielque me acompaña siempre:en la mente, en el alma,en el sueño, en el amor...Tan unido está conmigoeste yo, mi personaje,que me recuerda el pasado  de una historia ya vividade desdichas y aventuras,de secretos y de amores. Le pregunto, a veces, extrañado:¿Quién eres tú, alma de mi ser,noche y luz de mi conciencia,corazón de mi dolor,de mis deseos, la fuerza,inquietud de mis temores,eje fijo de existencia,voz en el silencio sacrode mi intimidad más honda? ¿Quién eres tú?¿A dónde va tu aliento de vivir?Si eres solo tiempo, muerte fijada y callada,nada, sombra y extinción,¿por qué me acompañas a mi perdición?;y, si eres eternidad,dime con verdad alegreque hoy soy lo que seré mañana. Yo de mi ser, ¿quién eres?¿Quién te envió a caminarpor la senda de la duda y la esperanzasin saber cuál es tu origenni cuál tu secreto fin?                                                            (de Alfabeto de inquietudes)                                                                  Enrique González Matas      

X E N O F O B I ATan apegados estamosa nuestro grupo, clan, tribu, pueblo...que necesitamos encerrarnosbajo el paisaje colectivode nuestros árboles, montes, tradiciones...;como si ser de "aquí" nos dierala conciencia de ser diferentese, incluso, superiores. Adorar al tótem del clan,cantar a la bandera de la patria,rendir culto a los héroes del terruño...,bien está, si no se convierteen el fiero etnocentrismo de odiar al extranjero,de rechazar sus costumbres,sus creencias, sus símbolos... Pues, al fin, siendo de acáo de allá, de aquel país o del otro,somos habitantes de la Tierra,de la misma y vieja Patria,isla suspendida en el Universo,ciudadanos del mundo marcados por un mismo destino.                                                       (De Alfabeto de inquietudes)                                                             Enrique González Matas 

W A L Q U I R I A SYo quisiera que el paraiso del dios Odín existiera aquí en la Tierra:con sus hermosas walquirias rubias,de ojos azules y largas cabellerasde oro brillante cayendosobre sus espaldas tersas. Y, también, morenasde grandes ojos azabaches,resplandecientes de estrellas;y africanas altas, cimbreantes,de reluciente piel negra;y orientales delicadas y delgadascon su pequeño caminary su mirada tierna y almendrada. Sí, el paraiso sensualde vida festiva, cordial y gozosa,con sabios hombres amantes,adoradores de la bellezaentre bosques, pájaros y flores,ríos fecundos de aguas transparentesy ciudades de cristal: azules,verdes, rojas, negras, naranjas...reflejando con el sol nacientelas maravillas del amanecero el bello crepúsculo de las tardes. Quisiera un paraiso, que es posible,con la sobria embriaguezde la cerveza espumeante,del vino dulce de mi tierray del tinto áspero, rojizo inigualablede las amplias campiñas soleadas. Sí, dios Odín, yo te convoco,junto a los griegos Apolo y Dionisio,para hacer de este mundoun paraiso, no de guerreros,sino de pacificadores,amantes de la concordia y la alegría,del amor, de la belleza y de la vida.                                                           (De Alfabeto de inquietudes)                                                                 Enrique González Matas    

V O L V E R¿Cuándo de verdad se vuelve?Regresamos al lugar que ayerdejó su impronta en la mirada:a los montes lejanos donde vimos nevar,a la extensa orilla del mar en calma donde escribí con devoción su nombre,a la terraza estival mediterráneade aquellos días felices de romance... Pero, ¿cuándo, cuándo se vuelve de verdad?Con el recuerdo caminamos al olvido.La memoria infiel nos deja desoladosante un paisaje de espesas brumas:Oh, Dios mío, ¿Cómo eran sus ojos?,¿cómo el sabor de sus cálidos besos?,¿cómo el sonido melódico de su voz?... No, no es posible volver plenamenteni al lugar aquel que vimoscon hondo sentir emocionado,ni al momento vivido del ayer,porque todo está confuso en el olvido,y solo tengo ahora un recuerdo vagode aquella pasión enfebrecida.                                                             (De Alfabeto de inquietudes)                                                                   Enrique González Matas   

 U N I D A DSabemos,desde remotos tiempos,por los consejos de los sabios,por las advertencias de los profetas,por los guías espirituales santosque lo que nos salvade la discordia fraticida,de la ruína funestay del mal de las lágrimas y de la sangrees la Unidad:el acuerdo, la fraternal ayuda,el amor y los abrazos que encienden en las almasel sol de la paz y la alegría. Pero no aprendemos,levantamos las murallas,los puños y las espadas afiladascontra el hermano;y negamos el aire, el pan y el aguaprivando a nuestros semejantesdel justo alimento que nos da la Tierra. ¿Hasta cuándo la división y el egoismodominarán la vida en este mundo?                                                             (De Alfabeto de inquietudes)                                                                   Enrique González Matas    

T É R M I N OAlegría, si es llegada deseada;desgarro, si es adiós definitivo. Lo que nos obliga es la sendaporque nunca llegaremos en la Tierraal lugar definitivo y deseado. Tras cada etapa se inauguraotra partida con la carga del pasado:el amor clausurado y no olvidado,el proyecto realizado y reemplazado,el abrazo de llegada y despedida... Tras el descanso en la posadade los días más tranquilosseguiremos adelante caminandohacia otros besos, otros sueños,otras heridas y penasen la marcha necesaria de la vida. Descansa hoy la ruedade su continuo girar por los caminos,pero mañana emprenderá de nuevosu rodar hasta el término final:rotos los ejes en el pedregal,ya irrepetible la senda peregrinatras la última jornada inevitablede la última partida.                                                        (De Alfabeto de inquietudes)                                                              Enrique González Matas    

S O L E D A DEvocación del páramo inhóspitoen que queda el sentimientocuando descubres que eres soloel testigo de tu propia intimidad.Cuando descubres que todo cuanto te circunda y acompañano eres tú, porque en tu entrañaexistencial, radical y única,eres un ser arrojado al mundo,al universo espacial, inmenso,que tiene un destino finitode principio de vida y término.Y que ahora, en este instantede aliento y vida, eres todocuanto tienes como propio:un latido que sostiene tu respiroen la esencia radical y palpitanteque se vive, que se siente,que se goza y que se sufremientras huyes del destino irremediable.                                                          (De Alfabeto de inquietudes)                                                                Enrique González Matas   

R E N A C E RNacer fue un momento,solo un momento forzadoen el parto doloroso de la vida.Nacer fue solo el inicio,el abandono del claustro fecundoo lago pequeño donde creció la semilla. Fue el llanto inaugural inconscientede protesta instintivapor el duro destino de vivir. Después, cada aliento, cada instante,cada momento existencial,cada amanecer de un nuevo díaes renacer, volver a la vida en lucha contra el asechode la muerte, siempre escondida. Renacer es saberse redivivo,sobreviviente en el tiempo transitoriode cada nuevo aliento,de cada nuevo sueño,de cada nuevo besoque afirma, renovada, la existencia.                                                         (De Alfabeto de inquietudes)                                                               Enrique González Matas  

Q U E R E RVerbo de amplitudes en el corazónque abre sentimientos de pasiónhacia el amor, la dicha o la tragediacon su fervor de vida y deseos. Palpitación en la cita con la amada,añoranza en la insistencia del recuerdo,plenitud que conmueve las entrañas de quien vive la alegría ya lograda. Expresión de la fuerza del amorque consigue sus propósitoso que llora con lamento amargopor los sueños traicionados. Aliento que alimenta la ilusión,que enardece el latido de la sangre,que invade con un sol abrasadorel alma que suspira y ama. Querer: anhelo intenso de inquietudesque agita y que conmueve con sus aires el mar interno de nuestra existenciacon sus olas tranquilas o en tormentas.         (De Alfabeto de inquietudes)      Enrique González Matas

P E R S O N ASer humano que anduvo perdidopor los siglos remotos entre hordas y clanes,que estuvo esclavizado en los imperios antiguosy apareció como campesinoen los feudos medievales,siervo de los señores de los castillos. Le volvimos a encontrar en las ciudadesy en motines, revueltas y revolucionespidiendo su derecho de ciudadanía,pero estuvo mucho tiempo como miembro del rebañosumergido en la mente colectiva. Cuesta encontrarlo, todavía,como ser individual,dueño de su independencia,libre del secuestro inmemorialde la conciencia grupal y colectiva,de su pueblo, etnía o nación,de las teocracias patriarcales,cavernarias y tribalesque arrebatan su sagrada libertad. Cuesta encontrarlo, todavía,como ser libre y único,responsable de su libertady conciencia no enajenada,como pleno ciudadano del mundo.              (De Alfabeto de inquietudes)                                                                   

O L V I D OSi me quitan el recuerdo¿qué me quedará?Si me arrebatan la memoriade mis sueños juveniles,de mis cálidos amores, de mis paisajes de infancia,de mis viajes de descubrimientos...¿qué me quedará? Seré como la cáscara vacíade una rugosa nuez,como el árbol que fenece,seco, sin hojas ni raíces. Sin conciencia de mi identidad,sin la nostalgia de mi pasado,sin el recuerdo de mis antiguasinquietudes, de mis pasionestriunfantes o derrotadas...¿qué me quedará? Seré como un alma errante,sin pueblo ni patria, extraviadoen una geografía extraña,perdido en las distancias vagasde lo desconocido,sin norte, guía, estrella o faroque me guíe en medio de la confusiónde las dunas de un desiertoinhóspito, desolado y vacío.                                                        (De Alfabeto de inquietudes)                                                            Enrique González Matas            

Ñ U D O    (Esta palabra no aparece en todos los diccionarios)Nudoso es el entramado de existir.Toda nuestra vida se sostienesobre una red de relaciones,red de cuerdas muy diversascon nudos o ñudos que las atan:nudos de amores, de amistades,de ideas, de sueños, de temores... Los nudos o ñudos aprietanlos enlaces, vinculan compromisosy, a veces, se rompen con dolordejando las marcas del adiós. La red de nudos invisible,sumergida en el mar de la existencia,pesca en sus aguas agitadascaracolas de ilusión,monedas antiguas del recuerdo,olas ardientes de besos olvidados,lágrimas pesadas de dolor,espejos de imágenes sepultadasy, sobre todo, secretos:secretos que guardamos en la arena de los fondos de alma, en cofres bien cerrados,protegidos por las algas del pasado,secretos anudados a lo que fuimosy aún persiste en lo que somos.                                                          (De Alfabeto de inquietudes)                                                                Enrique González Matas    

N A D ANegación absoluta,tentación del abismo,plena soledad del almasin sombra ni refugioante el inmenso desiertode una vida sin futuro.Nada,solo queda el instante presentesin mañana ni esperanza,sin proyectos ni sueños. Nada,abandono, entrega fatalal destino ciegode una vida sin sentido.Nada,dejación ante un porvenir vacíoque anticipa la extinción totalbajo el nihilismo extremo.                                                 (De Alfabeto de inquietudes)                                                       Enrique González Matas    

M A LEl mal es la muerte,el dolor de la carne,el sufrimiento del alma,los acontecimientos fatalesque destruyen la esperanza... Pero el mal más despreciablees el que nace de dentro,la perversidad que anidaen el corazón humano,el mal arraigado en nosotroscomo gusano en el fruto. Bien y mal: esa dualidadque expresa un mundo de opuestos,esa realidad que acompañaal día y la noche,la vida y la muerte, el amor y el odio... Tal es la ley naturalque en esa lucha de contrarioslibramos las batallas de nuestra propia existencia.  La libre voluntad, el albedríose expresa en los trancesdonde elegimos el daño ajenoo la bondad sacrificadade nuestros nobles actos. Las víctimas que ayer hicimosserán mañana los jueces de nuestra propia conciencia,si no la hemos asesinado antes.                                                    (De Alfabeto de inquietudes)                                                          Enrique González Matas 

LLAMALengua agitada de fuegoque ilumina y quema.Resplandor ardienteque aviva en el almala pasión de amor,la ilusión del deseo,la esperanza de la idea. Llamarada más intensay repentina con el vientoinesperado que la agitay arrebata de esplendor. ¿Qué sería de su luz sin lo oscuro de la noche;qué sería de su ardor sin el fríodel invierno riguroso?Vale el fuego cuanto más se necesita para calentarlas manos, el alma, la confianza,el amor que ya declinao se apaga en las cenizas,cuando pide la ilusiónel ardor en la aventura. Llama viva del deseo,dame el calor de la vidaque sin tu fuego me muero.                                               ( De Alfabeto de inquietudes )                                                      Enrique González Matas 

LEVEDADUna brizna de hierba en el camino,una hoja ligera al viento,una gota de agua solitaria al sol,una sombra humana transitoria...:eso somos, si, eso somosen nuestra leve existencia pasajera. Tan vulnerables, tan expuestos al azar,al devenir imprevistoque hoy estamos presentes aquí,pletóricos de vida, y mañana, solo polvo,recuerdo para otros;recuerdo que pronto se desvaneceráen la huida inevitable del tiempo. Tiempo de silencio plenoserá nuestro futuro cercano:perdida huella de lo que fuimos,eco de la música lejanaen los espacios del cielo. ¿Alguien querrá recobrarnuestra presencia futurapara recordarnos que nunca,nunca morimos del todo?                                                            (De Alfabeto de inquietudes)                                                                  Enrique González Matas  

KARMANos habla el hinduismo soñadorde una larga cadena de vidaso reencarnaciones del almaen distintos cuerpos sucesivos;de forma que el karmaacumula méritos o deméritosen ese "viaje" para la vida futura.Y yo, ser reflexivo, inevitablementepienso, en mi ignorancia:Si soy consecuencia del ayer,de los actos realizados en mis vidas anterioresdebería tener memoria de quién fui,saber de mis antiguos errores, conocer por qué mi destino presentees la consecuencia de mis vidas pasadas. Esto de que las religionesme lleven por la oscura sendade dogmas ocultos, orígenes secretos(vidas pasadas o paraísos perdidos) que determinan mi ahora,mi vida presente y mi ser,es algo muy fuerte,pues me piden responsabilidadpor la libertad de elegir ahora,cuando ya han cortado mis alaspara poder volarpor los aires abiertos de un ser nuevo;un ser nuevo no manchado,ni culpable, ni castigadopor un pasado remotodel que no tengo recuerdo.                                                    (De Alfabeto de inquietudes)                                                          Enrique González Matas    

JUVENTUDEs la hora del vigor y el entusiasmo,del momento luminoso de la vida.El ancho horizonte de todo lo posiblese abre ante tus ojos,puedes elegir la senda de tus sueños. Es la hora del amor intenso,de la exigencia radicalde la justicia en este mundo,de aquello que es auténticoy no admite componendas,turbias justificaciones zafiasni cobardes huidas al engaño. Es la hora sagrada de emprenderla aventura atrayente y arriesgada, la búsqueda de la ansiada identidad, del gozo apasionado de la entrega,de la dura prueba que exige esfuerzohacia las altas cumbres luminosas. Es la hora sagrada del vivir, la hora más hermosa...;pero, ay, es breve y pasajeracomo lo es la primavera. ¿Qué quedará de ella una vez que decline sus esplendor?:el recuerdo embriagante del amor apasionado,la añoranza de los grandes idealesy el resplandor fascinante de la alegría del almaque seguirá iluminanado la nostalgiade aquellos días de risas y de fuego.                                                         (De Alfabeto de inquietudes)                                                              Enrique González Matas 

IQUIETUDOleaje incesante en el mar del espíritu, calmado o agitado en las horas del vivir.Aguijón del pensamiento erranteque punza y molesta con dolor.Aldaba de la conciencia dormidaque llama a su puerta con golpes severos.Vigilia permanente del futuroque siempre sorprende sin aviso.Temerosa desazón que presienteel desastre y el paso sigiloso de la muerte.Mirada siempre abierta de la curiosidadque investiga a la oculta realidad.Escozor del alma que acompañaal amor y agita la esperanza.Llaga nunca cerrada,abierta a la duda perdurable.Zozobra de existir sin un refugio ciertoque clama por la paz y solo alcanza tregua.                                                               (De Alfabeto de inquietudes)                                                                     Enrique González Matas  

HISTORIALa Historia es lo que se sabey, sobre todo, lo que nunca se sabrá. Relatan los libros hechos colectivosprotagonizados por reyes y caudillos,pero, ¿qué sabemos de la pobre genteque soportó la codicia y la vanagloriade los que escribieron las fechas  de sus guerras, conquistas y victorias? La Historia hunde su verdaden aquellas hordas, clanes y tribusde oscuros milenios que desconocemos,y en los pueblos bárbarosde la antigüedad remotadonde las personas tuvieron sus vidassumergidas en la totalidad;pero, ¿qué sabemos de cuánto soportarony sufrieron en su propia entraña? Naciones y reinos, estados e imperiostienen sus relatos reseñadosen piedras, pergaminos y libros,mas, en ellos no aparece el puebloque fue expoliado y engañado,conducido y manipulado,porque el pueblo no hizojamás su propia historia;el pueblo solo la ha soportado. La Historia es el relato que encubretodo aquello que se ha olvidado.                                                          (De Alfabeto de inquietudes)                                                               Enrique González Matas       

GALAXIA Concentración de estrellasen una plaza del espaciopara alumbrar las nochesdel planeta humano Tierra. Dicen los científicos astrónomosque todo comenzó con la gran explosiónde energía que llenó los cielosde fuegos y luces estelaresel día de la fiesta universaldel génesis magnífico. El Autor anónimo de aquella creaciónpermanece silencioso en los espacios mudos.Yo sé del arquitecto que construyólos muros y la torre colosalde la catedral de mi ciudad,pero no del demiurgoque proyectó constelacionesen los cielos infinitos. ¿Dónde está el taller-laboratorio  que guarda los planos de esa obraincomparable de soles y de mundos?¿Dónde están los cálculosde la geometría precisade las órbitas y desplazamientospor las distancias de los cielos? ¿Dónde están las fórmulas secretasde las matemáticas de la astronomíaque algunos elegidos adivinanparcialmente, en privilegio,con su iluminada mente? Miriada de estrellas de la Vía Lácteaque encienden las noches calladascon humilde asombro del observador:¿qué somos en la encrucijadainmensa de los mil caminosque llevan las dudas hacia el infinito?                                                       (De Alfabeto de inquietudes)                                                             Enrique González Matas