Enamorarse es una ley y obligación entregarse a sus brazos que son arte, darle del mundo el amor y compartir su dolor, para que quiera soñarte Lástima de ti no tengas, pues, un hombre que se atreve, a que su amada se lleve lo mejor del corazón, no ha de perder la razón si un cielo oscuro se mueve. En la vida hay elecciones eso yo siempre lo dije, uno vale cuando elije y sus pesares no calla, y debes dejar que vaya: con Dios eso que te aflige.