Quien, en un rincon del alma nunca se ha sentido solo, aún rodeado de tanta gente, perdido y solo......que sensación tan extraña, pero a veces es necesaria para encontrar el punto exacto donde cae el ego, donde se sumerge el existir por el concepto de los demás, o  dejarnos arrastrar por la corriente de la vida. En otras circunstancias hubiese dicho que era triste, pero hoy descubro que sentirse solo te dá la posibilidad de enfrentarte contigo misma  y ver aspectos de tu vida que pasaron muchas veces desapercibidas.Creo que corremos tras muchos sueños, proyectos y perdemos tiempo de vivir el hoy, de saber por qué actuamos como lo hacemos y si en verdad vamos por el camino correcto.
Esperamos demasiado del futuro, y desperdiciamos el amanecer del hoy que sin duda fué hermoso, y si llueve no escuchamos  como habla la lluvia al caer sobre una lata vieja tirada en la calle; queremos vivir atiborrados de pensamientos, de planes , de gente, de cosas y olvidamos el espacio, el aire que respiramos, el ver con los ojos del alma al niño que corre disfrutando la vida como nunca, las flores que emiten sus dulces olores, al viejo sentado que medita pesadamente en sus recuerdos, al viento pasar suavemente por nuestro rostro, a todo lo que dejamos un día de percibir como verdad por que ni siquiera lo observamos y simplemente nos sentamos a lamentar la soledad, la ingratitud y miles de cosas más, cuando el estar por un tiempo solo es una bendición, pus de esta manera al tropezar de nuevo con alguien a nuestro lado, podremos ofrecer más de lo que pedimos, o entendemos y necesitamos para ser felices.