Textale

Año nuevo.

Publicado en Mar 06, 2013

Un día conocí a alguien en un día festivo. Exactamente luego de la hora. Acababa de hacer una llamada y su asaltante presencia me impactó. Nunca imaginé conocer a alguien como tal, ni pasó por mi mente en mis momentos de meditación; no tuve miedo a la espontaneidad ya que nuestra interacción esa vez fue prácticamente nula. No hice expectativas, no dejé a mi imaginación hacer lo que más le gusta, es más, ni si quiera le presté atención. Pero hubo algo, no sé qué; algo que caló en mí y que se quedó hasta hoy. Hace más de un año - para ser exactos, un año y ocho días - que la conozco o creo conocerla. Sé que no conoceré a nadie más como ella, pues la distingue su singular tristeza, su impenetrable corazón coraza, y la manera en como abre su pecho para que uno, al cruzar esa barrera, pueda entrar en en su corazón. Es la única persona con la que he sentido un vínculo tan diferente, tan familiar, tan cercano a pesar de las distancias y diferencias, la única persona que puede hacerme feliz con su silencio y miserable con el mismo en solo unos segundos, la única persona que con solo hablar puede hacer que todo se vea distinto para mí. Es la única persona con la que podré perderme y siempre encontrar el camino a casa, de la que podré alejarme y siempre regresar, la única que hará que la espere con más ansias de las aceptables y recomendables cuando se vaya.

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