Cuantas veces se esta cansado de ser fuerte
De ser roca inquebrantable
De resistir el embate del mar
En el silencio mas profundo
Donde no se escucha ya el océano
Solo el retroceder de las olas
Solo la resignación
 
Quiero tener derecho a llorar
Quiero tener derecho a ser débil
Pues cada vez que ahogamos una lagrima en nuestra garganta
Sangra un rio en nuestros corazones
 
En ocasiones miro fijamente a las personas
Algunas piensan que estoy loco
Otras que intento descifrar sus pensamientos
La verdad es que intento que vean mis ojos de cristal
De fino cristal que ya casi no aguanta el liquido que contiene
Demasiada tristeza, demasiado dolor
Como para que lo contengan unos simples ojos
 
Nadie sabe descifrar atraves de mis versos
Que tengo el alma ennegrecida
Nadie desntierra de mi poesía
Esa suplica de comprensión
Nadie escucha en mis palabras bonitas
Esos últimos suspiros de agonía
 
Nadie sabe que mi alma
Esta en esos pedacitos de cristales rotos