COSECHA TARDA
Publicado en Oct 15, 2011
Toco tu piel, recorro el borde de tus labios, y bebo de tu aliento el aroma dulce de los frutos que desbordan las vides, mientras mis manos se explayan por tu pecho. y hueles a cosecha tardía. Alcanzo a percibir la aspereza de tu piel, surcando ranuras finas de tantas estaciones entre sarmientos crujientes, madurando al ritmo del clamor del tiempo, sembrando esperanza de vendimias buenas. Y es tu gesto apacible en la espera, en los que la vehemencia y el trabajo curten tu rostro dibujando tu temple, en la serena tibieza de tu mirada, adonde se reflejan mis ansias de abrazarme a tus sueños. Sigo la curvatura de tu cuerpo y comienzo a oler a tí, tu piel se pliega en mi horizonte de ternura con tu virilidad al borde habitando mis días, en este terruño que aumenta el ritmo de nuestros latidos, y ya estoy bañada de tus fragancias, impregnada en los aromas de mi tierra que emanan de tu cuerpo como especias finas, adonde reposan las esencias que desbordan los follajes de esas vides infinitas, en surcos que reflejan las lineas de tu armonía. Y cierro mis ojos y ya estoy impregnada de tu ser, esparciéndose por el horizonte al ras de la montaña, a la vigilia del clima. Y no encuentro otra manera de amarte que no sea en la simpleza de tus días, con tu torso desnudo exudando el elixir que embriague mi vida amparada en tu morada, serena y cautiva de tu abrazo sincero. Acunando mis horas en el vértice sereno de tu placidéz. Al destello apacible del sol! E.B.
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Enrique Dintrans Alarcn
Es un poema precioso, erótico y de honda ternura. A un ritmo suave y profundo, la hablante expresa una vivencia de la entrega en el acto de amar. Me parece muy bien logrado.
Saludos