Williams siempre sabes como deleitarme con tus palabras.

Ya sabes que seria capaz de seguirte hasta el Hades una y mil veces, y si fueras al Paraíso abandonaría mi Ser y llenaría mi alma con tu gloria benevolente hasta quedar sin macha y poder entrar a través de las exaltadas puertas de la bóveda azul y permanecer a tu lado cada día de mi vida extendida.

Siempre siguiendo mis pasos, ¿Serias capaz de seguirme hasta las mismisimas puertas del averno?; No me subestimes sabes de lo que soy capaz.

OH mi querido Williams,

Entonces regocijase una y otra vez, porque volveré cada noche que tenga sed de ti para consumirte y verte desvanecer. Oh mi querida emperatriz, ¿Quien le dice que mi siguiente paso no esta lo suficientemente cerca como para percibir ya tu aroma?... Mi cuerpo frío arde deseándote con cada segundo eterno que trascurre como aquella primera vez, ¿Lo recuerdas?...