“Que abraces los árboles
y bebas el agua dulce
junto al mar resplandeciente.
Que te inclines una vez más y siempre
sobre su rostro soñado
y que abras tus ojos para verle”.
David Huerta

Una honda poesía delicada de una madre hacia su hija gestante que le habla, la siente y la espera en sueños, atrapada por la música romántica de Nat King Cole (un grande de la época) Madre e hija que se esperan hasta ese momento de iluminación que será cuando la bella criatura asome al mundo y lance su primer llanto de alegría y pueda su madre besar su frente tan soñada sobre ese rostro virgen que durante nueve meses navego en ese recinto maternal que hoy libera y le da luz al futuro ¿Qué se puede decir que no se sepa? ante la creación, vida y naturaleza que se muestra “en el barandal de la ventana, cuyo cristal impoluto y su mágica perspectiva, se tiñen con los colores de un asombroso atardecer” Como correctamente lo muestras en esa pintura de Dali (muchacha en la ventana)
Felicitaciones Marijó

Buen relato María de Jose, del mágico esperar la dulce esperanza.
Saludos, amiga.

Una dulce espera de alguien que lo hace con amor, con ahínco, con dulzura, con convicción, con frenesí y hermosos versos..
Un espera por él:
en los brazos de los sueños.
en la tarde.
en la conformación del entorno donde se amplían los recuerdos.
Lo esperas:
en la memoria
en lo besos
Lo esperas. .¡pero también "ella"..la dueña futura de pequeñas esperas...
Preciosa poesía querida amiga Marijó..
Te quiero. .besos Raquel.
P/D: como dice Lucy , María está con mucho trabajo y ya volverá a sus letras. .Besos Rq

Muy hermoso poema amiga, el amor traducido en retoño que para tres es dulce espera.
Un deleite pasar por tus letras.

Hermosas y cálidas letras, desnudando tu estado actual, expresando con ternura las distintas opciones, matices, que te ha dado la vida. felicitaciones muy bien expresado, letras con mucho sentimiento, que me fueron llevando de la mano. un gusto, grato leerte. te envió abrazos

Reflejas en mi imaginación hermosos paisajes, una futura madre contemplando un asombroso atardecer y entre sueños y respiros aparecen esperanzas, ilusiones y amores de diferentes formas: acurrucada en un sofá escuchando música y degustando un delicioso te, entrelazando la esperanza, entre madre e hija, en horas nocturnas el arribo de su querido ser.
Te felicito, bella poesía.
Un abrazo querida María José
Lucy

¡¡ Que hermoso....madre y futura hija en espero del complemento familiar, ese padre que se afana quizas para llegar a casa despues de un arduo dia de trabajo...mientras ambas esperan...el lucha por dejar esa reunion, lucha para sortear el trafico lucha por el mantenimiento de la familia en una clara muestra de amor.....

Muy bello tu poema....me rindo a tus letras poetisa¡¡¡