Escucho desde mi casa,
 a lo lejos,
un ladrido,
un sonido animal,
que pareciera susurrarme tantas cosas,
cosas que podrian pasar,
cosas que se avecinan.
 
A veces pienso eso,
pero quizas simplemente,
sea un lenguaje que trasciende mi entendimiento,
un lenguaje puro de resonancias animales,
que mi limitado cerebro de animal enfermo no capta.
 
quizas es una tranquila conversación con la luna,
tal vez por eso ladran los perros,
pero creo que la noche esta muy tranquila,
demaciado tranquila para mi,
como esa calma previa a la tormenta.
 
y me paseo por toda mi casa,
corriendo de un lado al otro,
tomando café,
mirando por la ventana,
mirando la luna,
tratando de decifrar el sonido de esos ladridos,
y trato de pensar que no es nada,
y trato de pensar que son angustias pasajeras.
 
Qué aqueja tanto a este animal?- me pregunto
 
Puede que sean solo ideas mias,
y esto no signifique nada,
pero por algunos momentos,
siento que me conecto con los ladridos,
y que la luna me llama,
y siento esas ancias de salir a la calle y correr.
 
Pero es muy tarde,
y hace mucho frio,
la casa esta vacia y yo estoy solo,
solo con los ladridos de afuera,
que noche más eterna !!,
me hace pensar el silencio.
 
y ya no aguanto,
y ya no puedo esperar,
las paredes me apresan,
los ladridos me agotan,
salgo corriendo por el largo pasillo de mi casa,
abro la puerta,
miro la luna,
miro la calle y no hay nada,
solo un par de perros durmiendo en la puerta del vecino,
un gato negro en  el suelo, 
y encima de ellos el inmenso cielo infinito.