Mañana yo estaré como el sol en tus rejas
No podré entrar ni aunque tenga la llave
Ninguna llave podrá abrir tu corazón impuro
No sé decir adiós a ti dulce y bendito amor desquiciado
 
Yo propongo que juntos caminemos por un mar de lágrimas en descontento
No podrá entrar ni aunque tenga la llave
Ninguna llave podrá abrir tu corazón impuro
Solo el celeste e inmenso crepúsculo y oscuro.
 
Mañana saldré a caminar desnuda
pondré un puño en mi corazón
diré cien millón de veces que nunca de ame
tus ojos leerán pronto este poema
pero ninguna llave por más dulce que se  podrá abrir tu corazón impuro