Mientas intento besar  a  la  luna,
me quiere  consumir  el  sol,
sus  celos  ardientes canalizan  mis  sangre
y de pronto  un  tornado  revuelve  mi ser 
y  me  lleva  a la orilla  del  mar ,
allá  en  en la  oscuridad 
donde  no  logro  percibir  ni  mi  propio  cuerpo 
una  serpiente  recorre  mi  columna  vertebral 
y  envenena  mi  cerebro,
esculpiendo  figuras  de horror  y  sufrimiento,
imágenes  que  van matando  mi tejido  muscular 
y  me  dejan  petrificado  los  huesos
que  se  hunden en las  aguas  movedizas
del  pantano  de  tu pecho.  
 
mirada  intransigente 
que  a   la  luz de  luna  apareces
no  remuevas mas mis  sueños.
 
colgada  entre  las  ramas
cuna de  cadáveres falcémicos
reposa  mi  cuerpo
luchando con las  almas  fragiles
que  atiborraran mi ser con  placer 
y escucho  sus gritos desesperados 
que  me  hacen padecer .
 
la polifonía de  sus voces  
me  aterrorizan y  me  atragantan,
no  puedo  gritar  
se  despliega  de  mi  
un  destello  de  luz 
que  con el  veneno  
sale  de  mi  vientre. 
se  estremecen  mis  entrañas
y  emerge  un sonido  sutil  
que  alivia  mis  penas
un llanto de un tierno ser
que sin  mirarlo  me anima  
que me devuelve la vida. 
se trasforma aquel espacio
en una imagen iridiscente 

que en pluma me convierte

y me lleva como quimera.

quiero poseerte y revivirte 

pero nos empuja la oscuridad 

envidiosa de este amor 

y vuelvo a caer en esa anemia drepanocitica

que termina consumiendo mi sangre

en el pantano de tu pecho.

EYLIN DE LA HOZ