• Melissa Guzmán Jaramillo
melissagj98
-
-
  • País: -
 
Desde hace ya algunos años el Estado mexicano se comprometió a garantizar el pleno ejercicio del derecho a una educación de calidad, las políticas educativas mexicanas buscan a través de un flujo de acción garantizar este derecho, desde el nivel preescolar hasta su graduación de la educación media superior, según lo establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la Ley General de Educación. En segundo lugar, aluden también a la capacidad del gobierno para sostener, elaborar estrategias y direccionar la actividad de Estado hacia el logro de los objetivos. Están conformadas por un conjunto articulado de recursos, entre ellos inversiones, bienes, servicios y transferencias movilizados por los actores que gobiernan el sistema para fomentar y mejorar el encuentro entre docentes y estudiantes en el entorno escolar. Además, tienen como objetivo eliminar las barreras al acceso, la permanencia y la graduación en el sistema educativo (INEE-IIPE UNESCO, 2018).En la actualidad el hablar de políticas educativas, nos dirige a analizar el programa del sector de la educación en un país como México, donde en cada sexenio se promueven estrategias y ejes transversales de desarrollo y crecimiento de competencias diferentes, las cuales impactan en el campo laboral del país. La educación no sólo debe promover los conocimientos básicos tradicionales, sino que debe proporcionar los elementos necesarios para ejercer plenamente la ciudadanía y la transformación de la sociedad (Varios autores, 2018, pár. 1).Las políticas educativas en México desde 1970 fueron moldeando lo que ahora se conoce como política educativa mexicana. Las líneas de acción educativas implementadas en cada periodo han dado pie al actual desempeño laboral y esto engloba a las generaciones X,Y, Z. Cada una con sus características y a la vez parte de una sola visión: el impacto de las políticas educativas en México en el campo laboral (Varios autores, 2018, pár. 2)La primera generación a analizar es la X  comprendida entre los años 1962 y 1980. Ésta se encontró inmersa en la política educativa del proceso de desconcentración y descentralización de la SEP y los programas de educación para todos y de primaria para todos los niños. La Generación X tiene como característica que sus miembros se acostumbraron al trabajo de equipo. Les dan menos importancia a las jerarquías y les gusta tratar y ser tratados como iguales con sus superiores (Varios autores, 2018, pár. 3).La generación Y, donde se encuentran los mencionados Millennials, comprende el periodo entre 1982 y 1995. Les tocó vivir el proceso de modernización educativa que prioriza los aspectos relacionados con la eficiencia y calidad de la educación. Son capaces de realizar varias actividades a la vez. Además de poseer pensamiento estratégico y valorar lo que sus decisiones o acciones afectan o influyen en la comunidad, por lo que se encuentran involucrados e interesados en asuntos de ecología, reciclaje, sustentabilidad, etc. (Varios autores, 2018, pár. 4).Aunque resultan excelentes para el trabajo en equipo, no resultan empleados que se queden mucho tiempo en las empresas; dependen de la tecnología para compartir información, siendo los preferidos los métodos que son instantáneos en donde sus mensajes tienen la posibilidad de llegar a un número indefinido de lectores, lo que los empodera y les imprime responsabilidad. Por su parte, la generación Z comprende entre 1995 a 2015 considerados nativos digitales, el Plan Nacional de Desarrollo y el Programa Sectorial de Educación 2013- 2018, el cual proyecta, hacer de México una sociedad de derechos los impacta fuertemente en la ideología impartida. Ellos nacieron en una cultura DIY (Do it yourself) por lo que, están acostumbrados a solucionar problemas y necesidades de manera personal (Varios autores, 2018, pár. 5).Por otro lado, en el ámbito laboral se han roto patrones conforme al género aceleradamente en los últimos 30 años, sin embargo, aún existe una gran desigualdad en este campo para las mujeres. En 1970, la participación femenina en el trabajo remunerado era del 17.6%, para el año 1996 creció a 36.5% y desde entonces no ha dejado de incrementar de manera sostenida. La desigualdad se puede observar de forma más notable en el salario, actualmente, 10.4% de mujeres que trabajan no reciben un salario por ello, a comparación de los varones, en su caso solo el 5% no reciben un sueldo. En el caso femenino, el trabajo no remunerado varía entre las edades de 30-60 años siendo el comercio y restaurantes los principales sectores. En el 2007, se reveló que las mujeres recibían como máximo dos salarios mínimos (Gobierno Federal, 2008).México es parte de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) en cual se encuentra posicionado como uno de los países con mayor índice de desigualdad laboral, ya que el 60% de las mujeres trabajadoras no cuentan con protección social ni derechos. Por otro lado, las mujeres ocupan el 51% de empleos en el sector público ya que hay mayor estabilidad laboral, mejores prestaciones y políticas que combaten al acoso, aunque los salarios sean más bajos que en el sector privado (El Economista, 2018). Como se ha señalado anteriormente, las políticas educativas se han ido modificando con los cambios generacionales, de esta manera, el mercado laboral también se ha modificado. Se puede concluir que cada generación ha sido afectada no solo  por las políticas educativas, sino que estas se adecuaron al contexto nacional y a los cambios ideológicos que se vivían en esa época. Como se mencionó anteriormente, la generación “Y” vivió procesos de modernización educativa que prioriza la eficiencia, este cambio se ve relacionada con la apertura de mercado y las políticas neoliberales que México implementó. Actualmente, está ingresando una nueva generación al mercado laboral, se busca que solucionen problemas sociales, problemas de inseguridad y que ayuden a reducir las brechas salariales de desigualdad. Además, las nuevas generaciones tienen una mayor preparación tecnológica que es necesaria debido a los cambios actuales donde se vive una revolución tecnológica en el mundo. Las políticas educativas deben de preparar a esta generación para que dentro del mercado laboral sean capaces de innovar y de desarrollar nuevas tecnologías. Es notorio como la inmersión de las mujeres en el mercado laboral ha ido en aumento, a pesar de que en el sector público se ha generado una paridad, en el sector privado quedan retos para la inserción de mujeres en el mercado. Es necesario mencionar que la paridad en el sector público puede ayudar a que se generen políticas públicas que beneficien la igualdad de género y que brinde seguridad laboral y salarial a las mujeres que se insertan en el mercado. ReferenciasEl Economista. (2018). México, con un alto índice de desigualdad laboral. Recuperado de https://www.eleconomista.com.mx/politica/Mexico-con-un-alto-indice-de-desigualdad-laboral-20180617-0078.htmlGobierno federal. (2008). Desigualdad de género en el trabajo. Recuperado de http://cedoc.inmujeres.gob.mx/documentos_download/100923.pdfINEE-IIPE UNESCO. (2018). La política educativa de México desde una perspectiva regional. México: autores. Recuperado de https://www.buenosaires.iiep.unesco.org/sites/default/files/archivos/LaPoliticaEducativaRegional.pdfVarios Autores. (2018). El impacto de las políticas educativas en México en el campo laboral. En Milenio. Recuperado de https://www.milenio.com/opinion/varios-autores/comunicar-la-politica-algo-mas/impacto-politicas-educativas-mexico-campo-laboral
Se dice que el poder es la capacidad de influir en el comportamiento de otros para lograr lo deseado. Siendo así, se considera como poder suave la capacidad de influir en las preferencias de otros. Actualmente, este concepto ha hecho volver a crear y entender las políticas exteriores de los Estados. Según Joseph Nye, el poder suave está compuesto por tres ejes; la legitimidad de las acciones de la política exterior de los Estados, los valores que defienden las instituciones y políticas internas de una nación y las manifestaciones propias de sus expresiones culturales (Villanueva, 2017). Como se menciona en la lectura, en los últimos años han habido sucesos como enfermedades, desastres naturales, posturas políticas y atentados terroristas que moldean el poder suave de las naciones. La finalidad del presente ensayo es analizar cómo México hace uso de este recurso tan fundamental para la creación de relaciones internacionales. Se debe de tomar en cuenta que México no tiene una aspiración expansionista, de predominio internacional, como se podrían catalogar Rusia, Estados Unidos o China, de esta forma resultaría en vano querer implementar la estrategia de poder suave que cuentan estos países. Por otra parte, México se ha posicionado como una nación pacífica, respeta el derecho internacional y la soberanía de naciones. También, la visión del país en cuestión de seguridad está relacionada con el Sistema de las Naciones Unidas, sin dejar atrás su activismo hacia temas relacionados con el desarrollo, ayuda a la intervención de conflictos y sobretodo, hace un gran uso de la diplomacia cultural para el entendimiento con otros Estados (Villanueva, 2017). Después de la caída del muro de Berlín, el pensamiento diplomático mexicano se dirigió hacia una visión liberal y dentro de un papel que el país se tendrá que posicionar en un mundo global e interconectado. Esta visión se consolida a través de los siguientes valores; libre comercio con países estratégicos, cooperación internacional y valores democráticos (Villanueva, 2017). La revista británica Monocle, presentó un ranking en el cual posicionó a los 30 países más influyentes en soft power. Este listado se mide a través de seis rubros; negocios e innovación, cultura, diplomacia, educación, gobierno, un factor subjetivo que considera la gastronomía, el liderazgo internacional, el prestigio de las marcas comerciales y deportes. En el año 2012, México logró aparecer en la lista como el país número 27, gracias a grandes exponentes culturales, misiones diplomáticas funcionales, gobierno reformista y una gran inversión extranjera (Chicoma & Dávila, 2013). Se cree que en el 2013, México jugó un gran papel en el poder blando. Fue en este año la gran inversión extranjera en el sector automotriz y se le otorgó el título de “El Tigre Azteca”. A pesar de que fue bueno su desempeño, se consideró que iba a ser aún mejor o más sobresaliente que el resto de los BRICS,  siendo México reconocido internacionalmente por sus playas, gastronomía y tradiciones; además de superar los índices de violencia por unos meses en el sexenio de Enrique Peña Nieto, debido a las propuestas de reforma, la detención de Elba Esther Gordillo y la creación del Pacto por México (Chicoma & Dávila, 2013). Del mismo modo, el país busca cumplir con objetivos que cubren temas como sociedad civil, derechos humanos, movilidad humana global, medio ambiente y crimen organizado. Además es un país comprometido con los Objetivos del Desarrollo Sostenible, que toca algunos de los temas ya mencionados, también esto es clave para la diplomacia multilateral (Villanueva, 2017). Sin duda alguna, el poder suave de los Estados Unidos Mexicanos debe partir de los valores contemporáneos y tradicionales. Siendo así, se podrían construir objetivos que beneficien principalmente a los intereses nacionales. Por ejemplo, establecer una relación estrecha y cordial con Estados Unidos, que juega un papel fundamental en la política y economía del país, pero evitando un intervencionismo unilateral. De esta forma, México contaría con algunas posturas independientes que brinden libertades diplomáticas en diversos temas, abriendo sus puertas a distintas áreas del mundo (Villanueva, 2017). Se debe fortalecer su compromiso con el multilateralismo, favorable a causas y valores universales, como estructura de la política exterior mexicana ya que el clave para el poder suave. En los Foros de las Naciones Unidas, nuestro país ha desempeñado un buen trabajo en temas de descolonización, preservación del medio ambiente, migración internacional, solidaridad con América Latina, entre otros. De la misma manera, las cuatro ocasiones que ha formado parte del Consejo de Seguridad generó resultados favorables. Esto debería tomarse en cuenta para construir un mejor modelo de país mediador, como lo ha hecho en especial con el Caribe y Centroamérica (Villanueva, 2017). La comunicación diplomática estratégica es un factor muy relevante en la actualidad que se podría considerar dentro del rubro del poder suave. Se tiene que considerar como cotidiano el uso de las redes sociales, plataformas de atención a los mexicanos en el exterior, creación de contenido para el resto del mundo como una actividad cotidiana (Villanueva, 2017). Como se mencionó al inicio del ensayo, las noticias como enfermedades, atentados terroristas, entre otros forman parte de las relaciones con el resto del mundo, es por eso que se debe demostrar la postura que tiene el país ante eso para así crear confiabilidad y atraer la atención de la opinión pública. Sin embargo, el punto que se podría considerar de mayor atracción hacia el poder suave mexicano es su cultura. La construcción cultural que llega hasta nuestros días en la forma de una identidad colectiva con un perfil nacional sobresaliente. La cultura tiene efectos simbólicos que atrapan y que además pueden ser aprovechados con contenidos únicos que favorecen el prestigio y la reputación internacional (Villanueva, 2017). La cultura mexicana es tan compleja que contamos con bastantes tradiciones representativas, por ejemplo, el mariachi, las piñatas, las pirámides, el día de los muertos, el tequila, hasta se podría indagar en la poesía, el cine, la literatura. La diplomacia cultural busca este intercambio en los diversos aspectos de la cultura entre naciones para fomentar el entendimiento mutuos. También, de debe entender que se puede considerar como la piedra angular de la diplomacia pública, ya que desempeña un papel muy importante en las relaciones internacionales actuales, caracterizada por los denominados choques culturales, y debería de construir una herramienta decisiva no sólo para transmitir la cultura y los valores nacionales, sino también para escuchar lo que las culturas del resto del mundo le están diciendo al país. En conclusión, es muy relevante que México defina con claridad que papel quiere jugar como nación hacia el resto del mundo siendo este complejo y competitivo. Primero debe atender la misión pacifista de su doctrina, que se basa en el diálogo, en el multilateralismo, la intensificación de cooperación internacional y un compromiso sólido con la Agenda 2030. Por otro lado, debe utilizar fundamentos de su atractivo económico para potencializar áreas de desarrollo comercial, emprendimiento y turismo, que toma en cuenta el desarrollo local. Por último, debe de utilizar estratégicamente su atractivo cultural como algo innovador, interconectando sus industrias culturales, haciendo de este su posicionamiento global (Villanueva, 2017). Referencias Chicoma, J. & Dávila A. (2013). Seduce y vencerás: El poder blando en México y en el mundo. En Medium. Recuperado de https://medium.com/@ethoslabmx/seduce-y-venceras-el-poder-blando-en-mexico-y-en-el-mundo-d4782ec22f37Villanueva Rivas, C. (2017). Construyendo el poder suave de México. Recuperado de https://revistadigital.sre.gob.mx/images/stories/numeros/n111/pres111.pdf

Seguir al autor

Sigue los pasos de este autor siendo notificado de todas sus publicaciones.
Lecturas Totales150
Textos Publicados2
Total de Comentarios recibidos0
Visitas al perfil253
Amigos0

Seguidores

Sin suscriptores

Amigos

Sin actividad
melissagj98

Información de Contacto

-
-
-

Amigos

Este usuario no tiene amigos actualmente.