• florencio
florencio florencio
Profesor de Ciencias.
Me gusta el deporte en general,pero especialmente el beisbol.
El genero narrativa es mi elemento literario, la poesia son musas que atrapo en el aire, cuando vienen a mi.
Trato de acercarme a la verdad, un poquitico, en los misterios que encierran el Amor y El Apocalipsis.
  • País: Venezuela
 
Imagen
UN CUENTO DE AMOR
Autor: florencio  2153 Lecturas
+++++
Imagen
NOCHE DE LUNA LLENA
Autor: florencio  1989 Lecturas
+++++
Imagen
EL LABERINTO DEL MAL
Autor: florencio  1399 Lecturas
+++++
Imagen
EL NIÑO Y EL PAPAGAYO
Autor: florencio  1383 Lecturas
Imagen
EL AMOR
Autor: florencio  1271 Lecturas
+++++
Imagen
AQUELLOS VIEJOS TIEMPOS
Autor: florencio  1064 Lecturas
+++++
DE CUANDO MI TATARABUELA PELEO CON EL DIABLO.Zic sentado en la acera jugueteaba incesantemente con el celular,  a sus escasos diez años, muy precoz para sus aventuras y desventuras, ya  pertenecía al mundillo de la calle. El y los nueve párvulos que le seguían se adueñaron de la esquina pretendiendo ser hombres apenas soltando la teta. Estos mocosos, que deberían de estar aprendiendo las operaciones básicas de matemáticas, que deberían de estar conociendo la historia local y la biografía del libertador. Estaban Allí mascando chimo, fumando cigarrillos y hablando de mujeres, mientras veían videos y fotos impúdicas en el celular de ultima generación, mientras sus bocanadas de humo impregnaban el aire de olor a tabaco.-Bueno el condenado, mascullo Zic.Lanzó un escupitajo al suelo, rozando los zapatos de Luis "Palo flaco", quien brinco evadiendo las salpicaduras del líquido, espeso y marrón. Saboreaba un tabaco de los buenos, de veinte Bolívares. A él, como jefe, le correspondía el privilegio de fumar tabaco, el resto fumaba cigarrillos de cualquier marca y preferencia. _ Pá echarle una probadita, le rogo Frank "cabeza é loco".Aquella voz que lo encrispaba y molestaba, lo saco un poco de quicio. Lo miro de reojo, arqueando una ceja. Torció la boca en señal de desagrado. Nunca le había gustado aquel chiquillo de sonrisa esdientada y de ñapa con  caries. Imagino su tabaco enmarcado entre aquellos dientes y el cuerpo se le espeluco, dejándole una sensación  maluca. "humea tus cigarros" le susurró entre dientes, y luego sacudió la cabeza y se concentro en una linda mulata dotada de hermosos atributos.Los chamos pertenecían a la cuarta generación, de aquellos hombres y mujeres que se quedaron en el pueblo, cuando exploto el boom petrolero, sin saberlo sembraron lentamente las semillas, multiplicándose de generación en generación, vivificando al lugar, que ahora le correspondía luchar por otras cosas.Estas inocentes criaturas que no conocieron las calles de tierras, que nunca habían oído hablar de los toros coleados por las calles polvorientas, del cine plaza donde se proyectaban las películas a cielo abierto. De las crecidas de los ríos naranjo y capa, cuando los invierno, eran inviernos, días de truenos y tempestades, llovía a cantaros y las aguas   arrastraban el lodo que bajaban del cerrito y lo depositaban en las calles, formando aquellos barriales donde los carros roncaban, aullaban, tratando de salir de aquel barro espeso que los atrapaba.Durante aquellos aciagos días el terruño no aparecía  ni por error en el mapa político territorial de la Venezuela de entonces.Aquellos días de los bisabuelos de  Zic pasaron, y hoy por hoy, el pueblo brilla con luz propia. Con un crecimiento demográfico abrasador, es una parroquia muy popular, visitada con frecuencia por los citadinos que viene en busca de armonía con la naturaleza. ¿Qué cómo ubicaban el pueblo? Difícil empresa en el pasado, hoy con solo presionar una tecla se puede ubicar en google earht o google maps, amén de aparecer en internet en cientos de páginas web. Sitial turístico por excelencia, muy visitado en semana santa.  Pero el boom de gente y carros ocurre todos los 19 de marzo, fecha especial consagrada por la feligresía desde el año 1711.  Momento consagrado para celebrar el día de San José: patrón celestial. Los tiempos han cambiado demasiado rápido, y el viejo terruño no se escapaba de la expansión arrolladora de las vanidades que aparecían a cada momento. Ahora muchas familias no se enfrentaban a la pobreza, a la desidia y la soledad, ahora se enfrentaban al mal uso de las herramientas tecnologías, a los vicios y al pasado que muchas veces regresaba violentamente a saldar viejas cuentas que no se habían pagado.Los días pasaban y Josefina, su madre, cansada de aplicar todas las estrategias recetadas y no recetadas por los sicólogos, estaba tocando fondo tratando de corregirlo. "la culpa la tienen el condenado internet y las nuevas leyes que los desorientan dándole tantas libertad, a malaya los viejos tiempo" se quejaba mientras terminaba de preparar el almuerzo.En la sala, el gato maulló dando contorciones en el aire, al recibir una descarga eléctrica. Con los pelos de punta salió disparado buscando la puerta de la cocina. Zic riendo a placer de su aventura, recogía el cable y lo desenchufaba. Su madre no lloro esta vez y tampoco lo castigo. Aquel mediodía hecho mano de su ultima carta, herencia de la bisabuela, quien le quitaba mañas y malcriadeces a los muchachos más rebeldes, desde bañándolos con orine, hasta ofreciéndoselo al mismo Belcebú. El reloj de pared marcaba las 11:55 cuando, exasperada, le gritó._ ¡Muchacho del demonio, mira que el diablo esta detrás de la puerta!_quien dijo eso - Le respondió.Un cosquilleo le recorrió las piernas, pero más pudo su voluntad que el miedo. Si algún temor guardaba en su mente, provenían de aquellos cuentos de brujas, sayonas, muertos y aparecidos que su madre le contaba para que no saliera en las noches. Recordó el video juego "agarra por la cola al diablo y se el dueño de las calles. "De ser cierto" pensó, lo atrapare con los trucos del juego. El tono de voz y la expresión en la cara de su madre lo envolvió entre pensamientos enredados._ ¡Si allí esta todos los mediodía! Exclamo,  para llevarse a los muchachos, groseros y malos.Empezaron a sonar las doce campanadas, del reloj de la iglesia del pueblo._Hablando del rey de roma y el que se asoma, dijo la madre al ver descompuesto el rostro de su hijo.Un silencio siniestro los rodeó. El aire limpio y fresco, enrareció de pronto y se convirtió en un vaho hipnótico. Ella se acordó que el diablo tienta, a los mediodías por que según las crónicas  a esa hora Caín mato a su hermano Abel. Se asustó pero ya no había tiempo para arrepentirse. Una imagen se apodero de su mente y en centésimas de segundos se proyecto en la neblina espesa y fría del subconsciente.Allí vio a su abuela invocar al demonio un mediodía, en agria discusión con su hijo Martin, la oveja negra que nunca quiso entrar al redil. ¡Ojala te lleve el diablo! le soltó las palabras heredadas de generación en generación. Rojito se apareció saltando y aplaudiendo en medio de la sala diciendo "es mío, es mío". Josefina nunca supo si fue cierto lo del diablo danzando y saltando. Pero si fue cierto que Tres días después el muchacho moría ahogado en las profundas aguas oscuras del pozo de las titiaras. Las corrientes traicioneras lo atraparon aquel mediodía, el remolino misterioso cobraba una vida más. Cuando el destino llama no hay advertencias, todo pasa inadvertido.En su rabia por jugar con su suerte, la madre enloquecida de dolor arrojo un machete en cruz al pozo conjurando al diablo y retándolo a pelear bajo la sombra de la oscuridad de la media noche del día fatal. No se apareció Belcebú, pero al día siguiente comenzó a mermar la profundidad del pozo, lentamente se fue rellenando y al cabo de siete días solo era una playa de arena.La voz de la anciana le recordó en la lejanía "pase lo que pase cuida que no saquen la cruz de machete del arenal".La puerta rechinó. Cuatro ojos abrieron sus pupilas al máximo. Las palabras de la anciana golpeaban su mente "no saques la cruz del arenal no la saques, no permitas que la saquen". No le dio tiempo de sujetarlo, fue muy tarde cuando dio en cuenta que había caído en tentación al igual que su bisabuela. El muchacho, rebelde al fin. Salió al encuentro del diablo. Y en efecto lo encontró. Lo miro de arriba abajo, no tenía cola ni cuernos, y ventilaba sus orejas puntiagudas.  Sin mostrar temor alguno le dijo:_Usted es mío._ ¿qué, cómo, cuándo, dónde? -Contesto el diablo sorprendido- Caramba como los tiempos pasan. Inmediatamente metió sus manitas en el bolsillo y saco un Dvd con el video juego y se lo mostro, diciéndole._ Aquí te tengo grabado, agarrado por la cola. Por eso es que no la tienes. Rojito  miro el disco y en milésimas de segundos escaneo el video juego y en efecto vio cuando un niño le cortaba el rabo y la mostraba a sus compañeros como trofeo, era el rey de las calles. De súbito arrojó una impresionante carcajada,  dio dos pasos y salió detrás de la puerta, mostrándole su reluciente cola, que desenvainaba instantáneamente._Jajaja jaa ja, es solo un juego mírala donde  esta, mírala  como se mueve.Quiso al fin impresionar al muchacho y que el miedo dominara su voluntad. Pero que va, como un lince salto Zic y Lo agarro por el rabo, el cual apoyo sobre el hombro halándolo hasta donde su madre. Rojito con los ojos desorbitados por la sorpresa, estiraba el cuerpo y los brazos hacia adelante buscando equilibrio. Iba en retroceso apoyado en los talones que humeaban al roce del suelo. _Tenías razón madrecita, encontré a Lucy detrás de la puerta, dijo mostrándoselo. Alucinada por la impresión quedo muda y pelo los ojos casi saliéndosele de las cuencas. Y al siguiente segundo se desmayó, cayendo de palmo a palmo en el suelo. Al rey de las tinieblas le brillaban los ojos, casi se le salían de las cavidades. Brincaba, halaba y se retorcía sin éxito alguno._Es maldad que patalees que estas en los hombros de zic, se mofaba. El maligno recordó aplicar aquello de "más sabe diablo por viejo, que por diablo". Tardo más de dos horas tratando de persuadir al niño, de cambiar su libertad por nintendo, bicicletas juguetes, etc. Pero que va el chico lo quería a su servicio y mostrárselo a sus amigos. El cornudo, aplico el plan B. Comenzó a correr a velocidad vertiginosa por el jardín de la casa, y mientras más duro corría, Zic más se aferraba a la extremidad. Exhausto se detuvo y .sin perder tiempo comenzó a botar llamaradas de candela por la boca, por la nariz y ojos. Ahora era el chicuelo quien reía a carcajadas. Saco un tabaco del bolsillo e irreverentemente le pidió encenderlo._ Me das lumbre Lucy, inventa otra que esta no me asusta- lo retaba.Enseguida el maquiavélico comenzó a crecer y crecer, sus piernas delgadas y flacas  se estiraban como goma de chicles y las rodillas sobrepasan las líneas de cables de la luz de las calles. Ya se estaba soltando, cuando le oyó decir: "agáchate que ahí viene el cura".Ignorando los acontecimientos a varias cuadras de allí el párroco caminaba con su cruz en la mano. El cachuo no quiso que se armara una sampablera, "más sabe diablo por viejo que por diablo" dijo y se agacho y enseguida sintió un bulto  a la espalda. Lucifer corcoveaba como potro salvaje, tratando de quitárselo, él se aferraba su cuello con fuerza. Los Brincos y bufidos se multiplicaban,  soltando además fuego y azufre por las narices. De nada le valió sacar sus relucientes cuernos el símbolo del mal, Zic los agarros y le gritó al oído._ hay que tomar la vida por los cachos. Como la nueva Dodge RAM. Jugueteo sobre sus espaldas."esta vez no triunfaras, le murmuro una voz espectral al diablo, eso de que más sabe diablo por viejo que por diablo es una verdad". Inmediato sintió que se multiplicó el peso y entre espolones, brincos y relinchos, el diablo cayo al suelo de bruces. Zic dio vueltas sobre el suelo gris y quedo acostado inconsciente sobre las matas de margaritas.De nuevo todo quedo en silencio y el aire enrarecido se fue despejando, el vaho hipnótico discurría entre las ventanas llevando consigo el olor de azufre. Lucifer se convirtió en un pájaro de plumaje exótico y multicolor. Abrió el pico y dijo:_ si me ven hermoso me querrán tener, si me ven feo y gris nadie me querrá, estoy en el mundo del deseo y las vanidades.Luego  alzo el vuelo y se posó sobre las ramas de un mango. Allí pensó "caray, como la televisión, el internet y las nuevas tecnologías han degradado mi imagen que ya nadie me tiene miedo, tendré que evolucionar o alguien creara un nuevo demonio para estas nuevas generaciones". Derrotado solo le esperaba la llegada de las tres de la tarde, cuando se reabría nuevamente el portal y así escabullirse por detrás de la puerta, a sus aposentos. Desde allí, regreso el tiempo y pudo observar que el reloj de pared marcaba las 11:55 y el chamaco reía a carcajadas al oír el maullido espeluznante del gato y salir despavorido con la cola en alto cruzando la puerta de la cocina. Vio a la mamá de zic encolerizarse y encomendarlo al demonio. Luego cruzo la vista y allí estaba ella, la bisabuela y con ella estaba Martin.La recordó cuando se decidió a morir por que si, siete días después de enterrar  a su hijo. Su alma no espero ni por el velatorio de su cuerpo. A escasos segundos de morir, ya estaba en las puertas  de las tinieblas gritándole: "yo no me revente las entrañas pariendo a mi muchacho para que se fritara en aceite azufrado por la eternidad. Así que si no quieres enfrentarte al dolor que siente una madre al parir un hijo, es mejor que me entregues su alma. Ya yo estoy pagando por mi error"._ ¿como enfrentar el dolor de una madre arrepentida? ¡Ahí si no me meto yo! Exclamó. Ahora estoy perdiendo esta batalla y viéndola convertirse en el Ángel de la guarda de su familia.A las 11:56 de aquella mañana el cuerpo etéreo de la bisabuela ocupaba el cuerpo de su tataranieto al ver que el demontre acudía al llamado. De la boca del crio se oyó "mas sabe diablo por viejo que por diablo, las experiencias son las que nos acorazan el alma". Y se fue a pelear con el diablo. Encuentro que le negó aquella tarde fatal cuando las aguas tenebrosas del pozo de las titiaras le arranco la vida a su hijo.
El día estaba claro e intenso. El calor fluía como un vaho soporífero de serpiente. La brisa golpeaba ligeramente las ramas del almendro, donde algunos pasajeros se cobijaban del fogoso sol del mediodía. José Matías centrado en la lectura dominical hojeaba el periódico Meridiano deportivo. Sus sentidos estaban perdidamente enfocados  en la última página, donde una hermosa trigueña hacía gala de sus cuantiosos atributos naturales, aguantados por un diminuto traje de baño. _ ¡Hola!Escuchó, y volteo lentamente dejando parcialmente su alma embebida en la imagen de papel, cuya mirada, cautivadora, lo perseguía desde la última página.Lo que vio ahora lo hizo parpadear. "¡Diosito de donde salió este ángel!" susurro. Su perfil lo absorbió totalmente, enfocando ahora, todos sus sentidos en ella. Inmediatamente soltó el periódico, deslizándose el matutino entre los tubos de hierro del banco, cayendo al suelo.La chica tenía una sonrisa especial en sus labios anacarados, color durazno. Sus ojos brillaban y resplandecían, al tanto que sus pestañas largas y negritas, se agitaban varias veces por segundos, como si fuera un colibrí montañero. Sus palabras esparcían la fragancia del brillo labial, con sabor y olor al melocotón maduro, despertando su conciencia enamorada y sensual. Percibió las esencias que manaban de su cuerpo, como una impetuosa fusión de flor de naranjo, gardenias y sándalo, que se vaporizaban con la transpiración de su piel. Una sensación agradable invadió su cuerpo y su alma, cuando sintió el rocé de su mano._ ¡Hola! le respondió turbadamente.En seguida le asaltó una esperanza de querer estar al lado de aquella hermosa mujer. De besarla y embeberse del néctar oloroso de la fruta que cubría aquellos carnosos labios. De acariciar su pelo, tenerla entre sus brazos. ¿Quién era? Se preguntaba. Su cara le era familiar, pero los segundos pasaban y no la podía ubicar en su memoria ¿dónde la he visto?_Josecito ¿ya te graduaste?Ahora era el quien pestañaba. Buscaba nuevamente en su memoria aquella voz, aquella sonrisa que levemente le traía recuerdos ¿Quién es?, se preguntaba una y otra vez sin respuestas. Me conoce ¿de dónde, desde cuándo? "Josecito, que cosas las de esta muchacha" murmuró en silencio. Mientras respondía "¡Sí!". Con voz entrecortada por la emoción y la incertidumbre._ ¡Mi primer amor!Exclamó, susurrándole las  palabras al oído, con una sonrisa picaresca. Su pelo danzaba al ritmo del viento que soplaba en su cara. Sus pupilas ensancharon, como queriendo atrapar los  sentidos de José Matías que se intensificaban, brotando emociones a flor de piel. Ahora su memoria le traía recuerdos que asomaban a sus ojos. Aquella sonrisa, aquella mirada. Solo ella podía tenerlas. _ Na...ta...ly Su boca dijo su nombre, como queriendo no equivocarse. Dejando discurrir las silabas lentamente. Ella abrió sus ojos de par en par y su sonrisa, ahora, era una risa que le contagiaba. Al ver la emoción que la embargaba José Matías se sintió un ruiseñor, con el alma enamorada.Las palabras surgieron atándose al amor que estaba en el aire. Se olvidaron del entorno y entretejieron un puente entre los dos.  A través de el marchó, y encontró un camino con exuberantes flores silvestres en medio de una arboleda, avanzó hasta llegar a una calle que reconoció de inmediato. Allí estaba ella, una chiquilla quizás de once años pegada a la tela metálica que cercaba el frente de su casa. Ahora que lo recordaba,  siempre estaba ahí como esperándolo al mediodía, para correr y agarrase de la tela metálica pronunciando su nombre. El rumbo al liceo, cargado de libros y cuadernos, le regalaba una sonrisa y un "hola mi niña".De pronto las imágenes se disgregaron fugazmente, y escucho una voz, llamándolo por su nombre. _ ¡Josecito! vamos que está saliendo el transporte.Lo tomó  de la mano y lo condujo a la buseta, que iniciaba lentamente la marcha. El transporte se detuvo, mientras él continuaba soñando despierto en un dialogo con su conciencia. "Como pasa el tiempo y como esta mucosita se convirtió en esta hermosa mujer" solo atinó a pensar.Ella que creció solo pensando en él, montó un pie sobre el estribo de la buseta, y luego giro lentamente susurrándole en la cara._ ¿tienes novia?Turbado por la emoción le robó un beso ligero, suave, dócil como el viento que acariciaba su pelo. Su respiración entrecortada, se agitaba ruidosamente por un tropel de caballos que galopaban libremente en su corazón. Las mariposas revoleteaban vigorosamente en su estómago, llevándolo a un éxtasis profundo, donde el olor y sabor a durazno de aquellos carnosos labios se impregnaba en los suyos. Mientras sentía su mano enérgica y tierna, entrelazarse fuertemente a sus dedos._ ¡vamos! le dijo.Algunos pasajeros reían y se contagiaban de la escena amorosa. La buseta emprendió la marcha, dejando una cortina de humo atrás. El colector coloco un CD de música romántica a petición de unas jovencitas universitarias. "Tengo", una canción de Franco de Vita, lleno la estancia de melodía. José Matías, risueño y desorientado, tarareaba la canción al tanto que seguía al amor que lo había estado esperando hacia tantos años.......  
Se me antoja quererte...Se me antoja amarte, entre sábanas  de seda...Se me antoja besarte, escuchando una canción de amorSe me antoja tu vida, al lado de la mía...Se me antoja respirar tu aire, y oler tu cuerpo al amanecer...Se me antoja que seas mía de verdad, verdad...Se me antoja quererte tanto, que ya te quiero a morir...Se me antoja quererte hasta morir, y después de muerto quererte más...Se me antoja un beso tuyo en medio de la oscuridad, de la luz del día...Se me antoja ser niño, para hacer mil travesuras contigo...Se me antoja que caminemos descalzos por las calles de mi  pueblo...Se me antoja ser feliz contigo, aunque no soy lo que quería ser...Se me antoja amarte a ti, y solo a ti...solo porque se me antoja....Se me antoja solo verte caminar, para sentir que solo existe para mi....Se me antoja acariciar tu silueta, que escondes bajo el sutil  Sexy LingerieSe me antoja bailar pegado a ti, escuchando una canción de Sergio Dalma...Se me antoja acariciar tu cuerpo, en una muda oración, para que te sientas mujer...Se me antoja sentir como ama una mujer, cuando se le deja amar...Se me antoja un hijo contigo; con tu sonrisa, con tu mirada....Se me antoja quererte flaca, quererte gorda, y quererte vieja también...Se me antoja recordarte; cuando haya lluvia, cuando haya sol, cuando ya no estés aquí.Se me antoja estar solo, para solo pensar en ti...Se me antoja no adiarte, porque solo se  me antoja amarte...Se me antoja quererte...
SE ME ANTOJA
Autor: florencio  998 Lecturas
+++++
En la última semana, varias veces lo había visto cruzarse en su camino. Algunas, se plantaba frente a él tranquilo y jadeando. Otras veces sentado sobre sus patas traseras, con la mirada fija y el hocico ligeramente levantado. Antonio David, se sintió intrigado y el temor comenzó a crecer enérgicamente, como crecen los ríos y quebradas en medio de un vendaval de gotas de lluvia que golpean la tierra, llevándola consigo en un abrasador y erosivo  movimiento cinético montaña abajo. El animal se convirtió en una visión fugaz, como la sombra del águila que planea en lo alto, siguiendo las corrientes del aire. Aparecía y desaparecía como la luz intermitente de las luciérnagas. Quizás esperando algo. La zozobra lo consumió hasta despertar con horribles pesadillas, provocándole insomnio las dos postreras noches.-Y aquí estoy don Modesto, sin saber qué hacer, como me lo quitó de encima. ¿Esto es real o es mi imaginación que me traiciona?El viejo lo miró. Sonrió, apareciendo decenas de arrugas profundas en su rostro. En cuclillas, arreglaba un tabaco, con las hojas que el mismo había puesto a secar y luego a madurar en el cuartico.  Aquel con una pequeña ventana azul, a medio cerrar, dispuesta así para que ocurriera el intercambio de aire necesario. Allí permanecían las hojas de tabaco el tiempo justo, para que secaran y maduraran, adquiriendo un excelente aroma y sabor._ ¿Ud. lo invoco? le espetó._ ¡Como se le ocurre don Modesto! ¡Yo soy católico! voy a misa los domingos. Creo en dios. Soy temeroso de esas cosas, le respondió._ ¡Uujuu! _ lo desestimó _ yo he visto muertos cargando basura, dijo._ ¿Mando hacer el trabajo con alguien? indagó nuevamente._ ¡Le repito que no estoy dado a esas cosas! se quejó._ ¿me dijo que era negro como esta piedra de azabache? le señaló._ ¡si así es!_ Ese perro es un protector, le reveló con voz calmada._ ¡Cómo!_ Así como escuchó, ese perro es un protector. Son seres que cohabitan con nosotros. Como los animales son de almas simples, los pueden utilizar como medio para comunicarse con las personas. Los hay buenos ¡y también malos! Existen los aliados y los protectores. Este es de buen augurio. Alguien te lo envió, o él te escogió para protegerte dado que encontró en ti mucha fe y nobleza. _ ¿Pero no es brujería o hechicería?_ ¡no no! _ ¿Los animales negros no son símbolos del mal, del diablo? _ ¡no no no! mi amigo. Nada de eso es cierto. En realidad solo existe el bien y el mal; sin distingo de raza, religión, color, sexo y cualquier otra cosa. Mire mijo, yo no he visto al diablo pero le aseguro que puede ser tan catire y ojos azules, como el musiú de la tienda.Antonio David rio a carcajadas, quizás los nervios lo estaban atacando involuntariamente. Se sobresaltó de pronto al ver salir una mujer del cuarto. De  pelo blanco y desgreñado,  y cuerpo encorvado por los años. En silencio se escabulló entre las cortinas de la cocina como si ambos no existieran. El viejo ni se inmuto y continúo la plática. Ella se acercó al fogón y comenzó atizar la leña. Entre soplidos y soplidos reavivaba la llama, haciendo hervir a borbotones un cocimiento de plantas medicinales, que impregnaban el rancho, de olorosas esencias volátiles. Aromas  de flores y plantas del lugar.Hurgando entre los traste, tomó una jarrita de peltre y se sirvió un tarro de café, bebió un sorbo del oloroso líquido negro y luego con el tarro en la mano cruzo nuevamente la sala, a pasos lentos y silenciosos, hasta perderse a través de las cortinas del cuarto. _Veo que tiene una camioneta último modelo_ indagó don modesto_ usted tiene dinero._ No, solo que los negocios me comenzaron a marchar muy bien y me compre una casa nueva y esta camioneta y estamos mucho mejor ahora._ ¡Ahí está el diente que le faltaba a la peineta! si usted no está preparado para el éxito y la fortuna, el rendimiento del negocio y su vida comenzaran a decaer sin encontrar razón alguna. A mucha gente buena le pasan muchas cosas  malas, por no estar preparados. _ ¿Qué hago entonces? le pregunto._ ¿Cuantas veces se le ha aparecido?_ ¿quién?_ ¡El perro, hombre!_ jajaja _ sonrió_   ¡No sé! durante toda esta semana me ha estado persiguiendo._Caray ya lo deben de estar trabajando, por eso el apremio del perro. Él le va aparecer cinco veces nada más para que usted lo acepte. De lo contrario desaparecerá y luego otros caminos debe buscar, que aquí no va encontrar. Es una bendición que él lo haya escogido para protegerlo, ojala no la haya perdido.El viejo tomo los fósforos y encendió el tabaco. Esparció tres bocanadas de humo, creando una espesa neblina entre ambos. La bruma se dispersó con el viento, impregnando el lugar del aroma fuerte. El hombre aspiro el humo, de pronto sintió un ligero mareo, que lo obligó a pararse y a respirar profundamente. El viejo sonrió y levantándose le dijo:_ Ya no tenemos más que hablar amigo, si ocurre el encuentro solo mírelo fijamente, y luego hágale cariño. Si responde es que lo aceptó. Luego trátelo como un amigo. Bueno señor  es todo en cuanto puedo ayudarle, es suya la decisión._ ¿Cuánto le debo Don Modesto?  Inquirió, sacando la cartera._Nada, esto me lo da la divina providencia para que lo reparta. Se despidieron, y Antonio David le dejo un billete sobre la mesa en agradecimiento." Para el café" le indicó._Hasta luego amigo, muchas gracias, le dijo el viejo.Salió al patio sus sentidos estaban agudizados, el aroma de las plantas en cocimiento lo seguían como un manto de energía misteriosa que reavivaba su conciencia, le despertaba la memoria. Su visión amplia y nítida se sumergía en la noche preñada de estrellas. La oscuridad se tragaba el rancho de caña, barro y techo de palma.  Uno que otro cucullo aparecía de pronto con su luz intermitente.  La luna escondida en el horizonte esperaba la madrugada para salir. En la profundidad de la noche un perro aulló, lejos, poniéndolo un poco nervioso. Sacudió la cabeza  disipando los temores y se encamino a su camioneta. Allí lo encontró junto a la puerta. Acuclillado, viéndolo fijamente. Lo visitaba por quinta vez. Quizás el último encuentro.El hombre encendió la camioneta y dio la vuelta para marcharse a su casa. Al otro lado del asiento, un hermoso perro color negro sacaba la cabeza por la ventana. Su mirada era poderosa, y lúcida. El hocico apuntaba ligeramente hacia arriba.
EL PROTECTOR
Autor: florencio  993 Lecturas
+++
Imagen
EL CORDÓN PLATEADO
Autor: florencio  984 Lecturas
++++
Imagen
EL JARDIN DE MAMÁ
Autor: florencio  978 Lecturas
++++
Cae el sol sobre el horizonte,y emerge lentamente la penumbra,invadiendo de sombras y temores,las noches que siempre están conmigo. Una palabra, le dice a la otra:¡Una imagen, es sombra tenebrosa!¿Vienen contigo?.....NocheY si fuese cierto...... ¿quién las envía?¿Acaso no es igual la noche que el día?...... Busco la verdad,y la encuentro escondida,entre tulipanes negros,y claveles de muertos.Entre salmos de alegría,Y canticos de libertad. El Aurora,Brilla en la conciencia,estelas de luz por la eternidad. Una palabra, le dice a la otra:¡Dulces son los sueños,Como miel de panal!¿Vienen contigo?.....NocheY si fuese cierto...... ¿quién los envía?¿Acaso no es igual la noche que el día?......
NOCHES DE SOMBRAS
Autor: florencio  967 Lecturas
Imagen
DON JULIAN
Autor: florencio  962 Lecturas
+++++
Imagen
LOS BESOS DE MARCELA
Autor: florencio  931 Lecturas
++++
I   ¡Ohoo! Noche espesa y profunda Negrura que oculta mi silueta Manto que esconde la mano desnuda Que acaricia tu cintura prieta   Amor sabroso de piel de ébano Labios tintos como el café tostado Discurres tu cuerpo desnudo al sereno Noche sin luna, noche de enamorados   No hay cielo, todo espacio es penumbra Y el blanco de tus dientes de perla, el cocuyo inquieto que esta noche alumbra   Ahora el silencio se traga nuestros besos y sobre el sempiterno horizonte lejano nace un leve destello de luz; luz de luna de queso                   II En lo profundo de tus ojos negros Encontré el amor esquivo que buscaba Y debajo de las flores silvestre de tu falda Un panal,  miel de abejas africanizadas   Orquídea negra que habita en la montaña Carbón trasmutado en rubí y diamante Mujer gozosa que con tus besos me amaña Mi negrita, mi dama, mi compañera y amante   África legendaria, áfrica mía secuestrada Tus tambores son danzas que alegran el alma Tu sangre y la mía caminan entremezcladas   Somos, américa mediterránea emancipada Somos África, nuestra piel morena salpicada Y Por siempre juntos, hasta el fin de la nada
La quiso y ya no quiere quererla,la amo y el amor vibra aun en su corazón.Por que al estar con ella, dio en cuenta,que amar y querer no es lo mismo.Comenzó por quererle y terminó amándole,se olvidó de quererla y la recuerda amándola.La quiso; la amo y se olvido del mundo,del tiempo y de los amigos.El viejo mundo no le impresionaba,si ella. Bailarina de papelbailaba junto a él.Porque no era aquel,era el yo que despertó en su alma,y como un mozo, corría sobre su piel.Entre tempestades y calmasEntre noches y mañanasCual tucusito mañanero,Cual pico plata cambureroSorbiendo el néctar de sus flores,Trinándole un yo te quieroA su musa maravillosaEn el jardín oloroso de su ribera,de orilla color púrpura fiero.Le ceñía, le apretujaba con deseosus palabras tintineaban purasy emergían a borbollones.Voces que se perdieron entre brumasen el océano profundo de sus emociones. 
_Que te pasa viejo, los días pasan,  todos  venden hasta el alma para tener  casa, carros  y tú nada.El solo oía en silencio._Despierta 2010,.... no  es 1995 ¿qué te pasa?....hay que disfrutar de los placeres que nos da el dinero.El solo oía en silencio._Reacciona que te estas quedando solo, oíste, solo como casa vieja y abandonada.El solo oía en silencio._Sabes eres un loco, solo un loco....... Sé que ayer me ayudaste, pero ahora..... eres.....Eso...un...loco...solo... un...loco...........Lo miro con cierta rabia, molesto por que su  ironía no encontró asidero en aquel viejo compañero de estudios.....Dio la vuelta y se marchó siguiendo la corriente  del mundo.  El otro lo vio recorrer varios metros y luego le dijo:_Sabes_  le dijo amistosamente  _ loco le dijeron a Jesucristo, le dijeron a Bolívar, le dijeron a Simón Rodríguez....y  a  cuantos más que solo quieren vivir en Libertad... ¿porque morir tan rápido? deja que viva mi vida y muera......  y solo muera cuando la muerte venga a darme la mano  y gustosamente pasemos el Valle de las Sombras............¡ y tengo un alma que entregarle a dios!..... ¡Y un sacrificio que hacer por mis hijos!........
En la cima del cerro tierra blanca, vivía un niño con su mamá. Ambos se querían mucho, Sebastián que así se llamaba el chiquillo, era de poco comer y esto mortificaba a la pobre mujer que día a día le transcurría el tiempo, tratando de que el muchacho probara aunque sea un bocado de alimento. Nació con aquel problema. Por circunstancias desconocidas el niño se negaba a comer, no pasaba de dos cucharadas de comida al mediodía y dos en la tarde. Cuando sentía hambre llamaba a la mamá  y le pedía dos bocados para luego marcharse a sus juegos.  Eso si, le gustaba salir y  acompañarla en las diligencias y los paseos a casa de la abuela.          Los días  pasaban y el niño cada vez enflaquecía más y más, hasta que llego el día, que no podía salir solo de la casa porque el viento, aunque fuera suave, lo derribaba y lo empujaba fuera del camino. Cualquier tropezón con un pedrusquito lo hacia caer. Ella triste y preocupada le hacia todo tipo de remedios pero el niño seguía igual. Los otros niños ya no se le acercaban, no querían jugar con el, algunos por temor a lastimarlo y otros porque su aspecto les daba mala espina. Esto no le importo mucho a Sebastián, quien encontró en los animales del bosque amistad y compañía. Le gustaba jugar con los animales, los quería mucho, algunas veces se escapaba al patio y llamaba a sus amiguitos del monte y jugaba con ellos hasta tarde. Estos no le tenían miedo, quizás lo veían como uno de ellos; sin malicia.         Dentro de la casa se escuchaba la voz de Isabel, su mama, llamándolo._  ¡Sebastián! ¿Donde estas?_ ¿Sebastián donde te escondes? Es hora de tomarte el juguito, le hablaba sin obtener respuesta.          Sebastián inmerso en sus juegos infantiles, no prestaba atención a las suplicas de su madre. Sus sentidos ataban su cuerpo al lado de los animalitos. Taiguagua, su perro, le ladraba para que le respondiera, cosa que se negaba hacer, diciendo que no tenía hambre. Sus amiguitos del monte reunidos le gruñían y graznaban,  porque eso era malo no contestarle a su mamá. La brisa de la tarde comenzaba a soplar lentamente, los animalitos preocupados por lo que pudiera pasarle, lo obligaban a meterse para la casa. El porfiado como siempre le decía que jugaran un poquito más. Ellos, como podían lo tomaban de la camisa y los pantalones empujándolo hasta la puerta. Taiguagua con su pata delantera, golpeaba la puerta, hasta que salía Isabel. _ ¡Muchacho que haces allí afuera! como te saliste._ ¡Hola mama! le decía,  estaba jugando con mis amiguitos.         La sonrisa de su madre era un bálsamo para él, inmediatamente se olvidaba de los juegos y se abalanzaba a sus brazos, buscando el calor maternal.  Con su manita que ya parecía una ramita seca, se despedía de los animalitos diciéndole adiós.         Entre regaños y manifestaciones de ternura la madre le hablaba, mientras cerraba la puerta._ Por el amor de dios Sebastián ¡come! que ya pareces una escoba.        Los días pasaban y Sebastián continuaba tan flaco que parecía un insecto palito gigante. El tronco del cuerpo parecía un pedazo de leña y las manos y los pies las ramitas. Los médicos que lo trataban no encontraban síntomas para aquella enfermedad, decían que aquel era un mal sin cura. La mamá, entre sollozos, decía que era tan porfiado que había nacido para dejarse morirse de hambre. En sus momentos de angustia, trataba de recordar si alguna vez le negó la comida durante el embarazó. O si lo trato mal en la barriga, algunas madres chifladas les hablaban cosas feas a sus hijos, cuando se movían causándoles punzadas en el bajo vientre. Otras le negaban el alimento cuando se lo solicitaba él bebe,  y cansado de llorar se dormían. Muchos infantes a la deriva,  eran alimentados por el divino creador y los buenos vecinos que siempre estaban pendientes, mientras la madre insensata se divertía con sus amigos en medio de tragos de aguardiente.          Ese no era su caso, desde el primer momento entendió que su hijo nacería sin padre, y se consagró atenderlo, a estar pendiente de él. No tuvo compañero que la apoyara en aquellos momentos. Después que la embarazó, al mes, desapareció dejándola sola en un mar de llanto que le secaba el alma. La tristeza le consumía la vida.  Siempre se echaba la culpa, asumía que su hijo, sufrió aquellos trágicos momentos. Por eso, entre lágrimas, siempre decía que Sebastián había nacido para dejarse morir de hambre.II          A la mañana siguiente, Isabel salió a comprar sal y azúcar al pueblo que estaba como a una hora de camino. Cerró bien las puertas para que el niño no saliera. "Vengo en un momentito" le dijo. Sebastián la vio cruzar el camino, y no quiso desaprovechar aquella oportunidad de salir al patio para jugar con los animalitos. Por la ventana, vio que las hojas de la mata de cayena le indicaban que no saliera, el viento soplaba fuerte moviendo las hojas de los árboles. No hizo caso y salio por un hueco que tenia la pared debajo del fogón, era la salida que había encontrado en sus ratos de ocio y que guardaba en secreto. Salió al patio, vio una carrucha en medio del camino y quiso curiosear. El perro ladró, mas no hizo caso y al carruchón subió. El viento lo sorprendió, pero esta vez empujándolo dentro del cajón, cayendo en una maraña de palos y ramas secas.  Su destino parecía tan gris, que aquel carretón, pertenecía a una  mujer que tenia fama de Hechicera. Escucho pasos y luego sintió que caía sobre su cuerpo una lluvia de plantas, ramas y bejucos. La mujer, con sus manos huesudas arreglo un poco el contenido, y confundió una pierna con un trozo de palo entre las charamizas. Luego cruzo la boca del cajón con un mecate. Su voz debilitada por la poca alimentación, y el miedo, se le trabo enmudeciendo de golpe. Quería llamar a su mamá, quería salir de allí,  pero la fuerza no lo acompañaba. "que desdicha, pensó, morir en el fogón quemándome".         Anocheciendo llegaron a la casa de la hechicera, el carretón estaba repleto. Entró a la casa, y de pronto volteo el contenido sobre un montón de leña, que tenia al lado del fogón. El muchacho rodó en medio de leños, plantas raras y animales extraños, el golpe le produjo rasguños, cortaduras leves y lo más grave un brazo fracturado. La suerte lo acompaño esta vez de no morir. La mujer cerró la puerta y comenzó a agregar unos ingredientes al brebaje que estaba preparando._ Jajá jajá, reía, esta es la ultima poción Juan y por siempre serás un halcón, mi halcón, mi esclavo.         Encerrado en una gigantesca jaula de alambre de cobre se encontraba un hombre en estado deplorable; desnudo y escuálido. Graznaba como un halcón. Sus cabellos yacían en el piso producto del brebaje que le obligaba a tomar. _Esta es la última poción, y por siempre serás mió. Más nunca te acordaras de Isabel.          Cuando escucho el nombre de su madre, Sebastián,  se sobresalto. Trató de zafarse entre la  leña y los bejucos pero, no pudo, no tenia fuerza._ Mañana al amanecer con el haz de leño que he traído especialmente para ti, quemare todas las plumas que has mudado desde que te convertí en halcón, al quemarla no habrá nada en el mundo que pueda romper el hechizo y por siempre estarás a mi lado.          El hombre  que aun conservaba el habla, le dijo:_No son plumas, son cabellos. No soy un halcón soy Juan. No dominaras mi mente._ Ja ja jaja, ya veremos después de la ultima poción._ Mujer malvada, algún día pagaras lo que hiciste, me separaste de Isabel y mi hijo, encerándome en esta jaula de cobre.         El hombre se agarraba la cabeza con ambas manos tratando de dominar aquellas imágenes de ave que se apoderaban de su mente y su cuerpo. Desde el fogón la mujer le gritaba:_ Ahí te quedaras, hasta que se complete el hechizo. Por tonto estas ahí, como pudiste preferir a Isabel antes que a mí. ¿Yo no valía nada para ti? Preferiste el amor de esa pobretona campesina. Tú eres mío por que desde el primer momento que te vi, yo así lo decidí, _Jajá jajá, carcajeó él  burlonamente, me hubiese gustado en aquel momento ser un adivino. Eres una bruja loca prefiero la muerte que estar a tu lado. Me separaste de Isabel pero por siempre la querré, nunca la olvidare hagas lo que hagas.         Aquellas palabras, la cegaban de rabia. Crispaba sus ojos y torcía la boca. Se tornaba furiosa y con un palo golpeaba la jaula descargando su ira._ Mañana veremos que dices cuando veas las plumas arder en llamas, le dijo y se marcho al fogón a terminar el brebaje._ ¡no son plumas son cabellos! Le gritaba con esfuerzo.         Sebastián no podía creer lo que estaba escuchando, Juan el que algunas veces nombraba su madre como el mal hombre que la había abandonado, era su padre y estaba ahí encerrado convirtiéndose en un ave.  "No olvido a mi madre y la sigue amando,  toda la culpa de su infortunio la tiene esta mujer  malvada que lo separó, por envidia, al amor que se tenían" caviló Sebastián desde lo oscuro del fogón.          Enredado en la  leña y sin poder hablar, el destino le deparaba un final triste a su corta vida. Sus amigos los animalitos del monte y su mamá lo estarían buscando afanosamente. De repente detuvo sus pensamientos y enfoco su atención a una vocecita que en su interior le decía "Sebastián, este no es tu destino, tienes que librarte. Estas aquí por alguna razón". Vio a la malvada mujer entrar al cuarto y preparar la cama para acostarse. La oyó decir unas palabras asombrosas para que nada de lo que estuviera adentro pudiera salir sin su asentimiento. Y por ultimo antes de acostarse tomó un brebaje que tenia en una mesita al lado de la cama._ ¡Ahaaa...! El elixir para vida, el que me da fuerza, la escucho decir.III         Media hora después, se escuchaban los ronquidos de la hechicera inmersa en sus sueños diabólicos.         "Este es el momento" pensó, con movimientos lentos pero seguro comenzó a salir poco a poco del montón de leños y plantas, la poca fuerza que le quedaba no le permitía soltarse con la rapidez que quería, con mucho esfuerzo logro soltarse, trastabillo sobre la leña y al suelo fue a caer, el ruido fue opacado por los ronquidos de la hechicera. Tambaleando se acerco poco a poco a la puerta, desde allí podía observar entre la penumbra la mesita donde tenia el elixir. "tengo que tomar de ese liquido para que me de fuerza y vitalidad" se decía a si mismo, mientras avanzaba lentamente, el brazo golpeado mostraba hinchazón y a cualquier roce le producía un intenso dolor, que soportaba, solo, con el fin de lograr su propósito. Cuando estuvo cerca y se proponía agarrar el frasco. La bruja despertó y se  levanto como un resorte. Mientras chasqueaba la boca produciendo un ruido extraño, caminó hasta el fogón, olfateando el aire mientras pronunciaba:_ Huelo intrusos en mi casa.         Pero por mas que buscaba no encontraba nada, Sebastián en silencio acurrucado en lo oscuro del rincón, detrás de la puerta, con los dedos entrecruzados fuertemente, oraba en silencio: "con el paño que en la patena y en cáliz voy cubierto que no vea preso, ni herido ni muerto" con la fe en la oración enseñada por su madre, esperaba la ocasión propicia para actuar: La imagen de una mujer dibujada por las sombras de la noche, en claroscuro, por la luz opaca de la lámpara de kerosén, revisaba el brebaje y al regresar golpeó la jaula con la vara, despertando al hambre-halcón que dormitaba su mala suerte.          Mientras esto sucedía, Sebastián sacando fuerza de donde no tenía, logro agarrar el frasco del elixir, se lo acerco a la boca y se bebió la mitad del contenido. "tucun tucun" sonaba al pasar por su tráquea, arrugo la cara, el líquido era amargo y espeso. Todo esto sucedía mientras Juan intercambiaba maldiciones e insultos con su captora, quien a cada rato volteaba a los lados, la incertidumbre de que ocurría algo que no podía descifrar la tenia incomoda y recelosa. Bajó la olla del fogón, y masculló unas palabras raras. Él muchachito coloco el frasco en su lugar y fue a esconderse debajo de la mesa, con la mala suerte de pisar el rabo al gato que dormía placidamente, este despertó y al verlo se asusto y salio maullando. La bruja desconfiada se acerco a revisar debajo de la mesa. Y solo vio, entre las sombras, un trozo de leño tirado en el piso. "Mañana lo recojo" dijo. El gato cruzo la penumbra, escondiéndose debajo la lacena. A donde fue a parar la chancleta que le lanzo mientras le gritaba "y tu gato loco mañana te encierro".          Nuevamente se dispuso a dormir. El universo conspiraba a favor del padre y su hijo, protegiéndolos con la mano de la invisibilidad. Roncaba placidamente, mientras Sebastián notaba como su cuerpo comenzaba a fortalecerse y sus sentidos agudizarse. Articulo unas palabras y pudo notar que su voz  regresaba. Sigilosamente se levanto  y se acercó a la jaula de cobre, él hombre-halcón; su padre lloraba en silencio su desgracia. El niño se monto sobre un tambor que estaba cerca y susurrándole le dijo:_  Señor, señor, despierte._ ¿Quien me llama? contesto sobresaltado         Al ver que era un niño le dijo: ¡muchacho ¡¿Como entraste aquí?_ No te preocupes después te digo, habla bajito para que la bruja no nos escuche._ Esa desgraciada mujer duerme como una piedra, ella confía en sus hechizos para que nada de lo que este aquí salga._ Voy a buscar la manera de sacarte._ La única forma es con la llave de cobre._ ¿Y donde esta?_Es peligroso e imposible de lograrlo_ No se preocupe yo lo haré, dígame como la encuentro.         Al ver la valentía y la disposición del niño, entrego sus ultimas esperanzas al ser que de la nada llegaba para tratar de rescatarlo "quizás sea el ángel de mi guarda" pensó, al tiempo que le indicaba los pasos a seguir. _ En el copete de la cama guarda la llave, es la que tiene un triangulo en la punta. Antes de agarrarla debes decir la palabra "cuprum, cuprum" de no decirla al tocarlas se despertara el duende que las cuida y será nuestro fin._ Descuide, sabré como hacerlo.I V         Pasaron las horas y llegado el momento, nuevamente entro al cuarto y lentamente se acerco a la cama de la bruja, el  elixir lo fortalecía a cada minuto y tenía habilidad y destreza para desplazarse sin hacer ruido. El subconsciente obraba a su favor recordándole la oración"con el paño que en la patena y.........." La mujer roncaba hurañamente, mientras las paredes se impregnaban de figuras tenebrosas creadas por las sombras  de la noche. Los ratones hacían de lo suyo, durante aquellas horas, pasando del fogón al cuarto, en ausencia del gato que dormía afuera, ajeno a los sucesos.         Como un felino de monte, el muchacho, se acerco con movimientos sincronizados  al copete de La cama, estiro la mano para agarrar las llaves al tiempo que pronunciaba las palabras "cuprum, cuprum". Tomo las llaves y regreso en silencio hasta la jaula de cobre. Coloco la punta triangular en la hendidura giro la llave y la puerta se abrió. El hombre-halcón salió, realizando un gran esfuerzo, estaba entumecido por el tiempo encerrado, se tomaron de las manos y se metieron debajo de la mesa._ Gracias muchacho, le dijo, Quien eres tu._ La verdad que no se como responderle, escuche a la bruja nombrar a Isabel y ese  es el nombre de mi mamá.         Cuando escucho aquello el hombre embrujado, sintió que se le secaba la garganta, blandía los brazos; cual alas sin plumas, como acercando el aire a sus pulmones._ ¿Isabel la de Cerro Blanco?_ Si,  le contesto Sebastián con el corazón palpitándole de emoción._ Entonces tú eres hijo mió, mi sueño.         Ambos lloraron silenciosamente por la emoción que los embargaba, Juan lo tomó entre los brazos, se lo acerco al rostro y le dio un beso, él niño  con sus bracitos le abrazo el cuello en un acto de amor profundo. Pasado los momentos de emoción le contó lo sucedido. "Tu mama y yo éramos muy felices, en la casita que le construí en cerro blanco, lo llamamos así porque esa parte de la montaña es de piedra caliza, que al descomponerse origina una tierra blanca. Allí erigimos nuestro hogar, a los tres meses de estar viviendo juntos, Isabel salio embarazada, aquella noticia colmo de alegría nuestra unión. Esta bruja malvada se llama Raquel, era una mujer que vivía en el pueblo. Ella estaba enamorada de mí y salimos algunas veces como amigos a las fiestas del pueblo. Cuando yo no era novio de tu mama. Cuando se entero de nuestro matrimonio y el hijo que venia en camino. Juro que nunca seriamos felices, que yo le pertenecía por que así ella lo quería. Que haría todo lo posible por separarnos. Yo no le creí porque nadie en el pueblo la conocía realmente y mucho menos  sus intenciones. Nadie sabía que traía una herencia de brujos y hechiceros que destruía aquello donde posaran su rabia y malos sentimientos. Se hizo pasar como amiga y lentamente se me fue acercando hasta que me engaño con sus artimañas y me hizo tomar un brebaje que me enfermo y comencé a sufrir lentamente diversas formas de alucinación mental, yo sentía que mi mente daba vueltas y algo se me acercaba como queriendo poseer mi cuerpo. Al principio me sumí en una melancolía, y luego la mujer comenzó decirme que era un halcón; repitiéndolo a cada momento. Esto me creo una manía, que me hizo creer que me transformaba en halcón. Aquí e pernoctado durante siete años solo con la idea de escapar, pero la condenada bruja desarrollo en el transcurso del tiempo una serie de trampas que no me permitieron en ningún momento huir".          _ ¿Porque halcón? Pegunto el hijo._ Según su tradición ancestral en mi alma reside el alma de un animal, y el brebaje me lleva a un  estado psíquico, donde aflora esta alma, transformándome entonces en hombre-halcón._ ¿Pero no eres un halcón, verdad?_ Hijo, sin el amor a tu madre, quizás no hubiera tenido la fe y la fuerza de voluntad para dominar los espertejos e imágenes que se forman en mi mente diciéndome que soy un halcón. Físicamente no me convierto en el ave, pero mentalmente si. Muchas veces siento, sobre todo en las mañanas, que actuó como un ave, tratando de graznar y aletear.         El niño lo abrazo brotando de él algunas lágrimas. "Además, dijo Juan,  cada año en luna negra me obliga a tomar un brebaje que me tumba todo el pelo y cabello del cuerpo, que luego recoge y guarda en el tambor que esta debajo de la jaula. Las que recogió hoy es la última camada, que ella les dice plumas,  mañana las quemara en medio de la luna negra pronunciando el hechizo ancestral de su estirpe. Me dará el ultimo brebaje que terminara por dominar mi mente y seré un halcón para siempre, los recuerdos que haya tenido como humano se borraran y seré su esclavo por los tiempos que han de venir"._No vamos a permitir que logre su cometido papá, le dijo Sebastián._ Ahora tengo un motivo más para seguir luchando, no se como le vamos hacer, no podemos escapar por los duendes y trampas que tiene, para evitar que cualquier cosa salga de aquí. Y mire que durante siete años he visto las cosas feas que le hace a los que tratan de escapar desde animales hasta personas. No se como no te descubrió._ Estoy tan flaco que parezco un palo de leña, y con mi ropa toda arrugada y sucia, me confundió. Además,  tengo una oración que mi madre me rezaba desde que estaba en su vientre y me sirve de protección divina.         Le explico como había llegado hasta allí, el poco apetito que tenia que lo consumía en vida. No sentía hambre y no había explicaciones para eso. Su mama vivía enferma y preocupada por él. La quería mucho porque ella solo vivía para él y los recuerdos tristes de un hombre que la abandonó, que la  dejó sola.         El papa cuando escuchaba aquellas palabras se le encogía el corazón, su Isabel, su pequeña Isabel todavía pensaba en él. Que grande era el verdadero amor. Nadie lo podía vencer. Se dio cuenta que hicieran lo que hicieran nadie podía destruirlo. Ese era el verdadero amor._ Como te hable hijo yo no la abandone, el destino me tejió una trampa que no pude sortear y me separo de lo que yo mas quería._ Ya lo entendí papa, lo que tenemos que hacer es salir de aquí y romper tu hechizo y regresar con mi mamá._ Esa es la parte difícil hijo, no se por donde empezar ni como empezar._ Podemos empezar por esconder los pelos y cabellos para que no las encuentre. Dijo Sebastián._ Imposible puede encontrar dentro de esta casa cualquier cosa y recuerda que nada puede salir de aquí ni siquiera un pelo.         Sebastián observo el humo que salía por la chimenea, y le pregunto._ Y el humo porque sale, sin despertar alarma._ Es cierto, no me fije en ese detalle. Si los quemamos, sin la presencia de la luna negra y sin pronunciar las palabras,  el hechizo no funcionara y por lo menos tendré la oportunidad,  algún día de sanar mi mente, alejando por siempre estas imágenes que se quieren apoderar de mi conciencia.         Sebastián salió debajo de la mesa y avivo un poco los tizones del fogón que ya estaban languideciendo. Tomo el tambor donde momentos atrás se había parado para sacar a su papa de la jaula de cobre, y puñitos por puñitos fue agregando al fuego que los consumía y producía  virutas de humo que se escapaban por la chimenea sin despertar sospechas, él ultimo pelo fue quemado rozando el canto de los gallos. Coloco el tambor en su lugar y se dispuso a meterse debajo de la mesa. De repente sintió mucha hambre quiso hurgar en las ollas, pero su padre le alerto que tuviera mucho cuidado porque los restos de comida siempre contenían hechizos para los intrusos que hambrientos, al encontrar la casa sola, entraban sin saber la sorpresa que les esperaba._ Si tienes hambre come del cambur maduro, que esta al lado del pilón. Con el me alimenta dos veces al día porque no como los ratones y culebras que antes me traía. Como todavía soy humano mi mente rehúsa de comer esas cosas.         El muchacho se acerco al pilón y agarro cinco dedos de cambur maduros y se sentó debajo de la mesa a comer.         V          Los sorprendieron los primeros rayos del sol sin un plan para escapar. Sintieron que la bruja se despertó y bajo de la cama. Después de quitarse el camisón de dormir, la observaron ponerse un vestido de flores ajustado u su cuerpo realzando su figura de buenas proporciones, se puso las pantuflas, se acerco al espejo y cepillo sus cabellos castaños, para luego entrar al baño y asearse. A pasos cortos salio del baño dirigiéndose al fogón para montar el brebaje y reiniciar la cocción. Levanto la vista hacia la jaula y vio al hombre acurrucado durmiendo todavía. Con la vara golpeo la jaula como siempre lo hacia para despertarlo bruscamente. Mientras tanto Sebastián veía todo en silencio debajo de la mesa. A última hora, su papá decidió regresar nuevamente a la jaula para no despertar sospechas, la puerta de la jaula estaba entrecerrada solo tenían que esperar el momento oportuno y escapar. _Hoy es tu último día querido, al atardecer serán tus últimos minutos como humano. Serás mió para siempre. El bebedizo que estoy preparando es el último, y así estaremos juntos para siempre. Quemare los libros y el contra hechizo para que nadie pueda deshacerlo. Y solo pensar que basta una plumita tuya y la poción para realizar el contra hechizo y volver a la normalidad. Pero nadie lo sabrá. ¡Jajá jajá!         Ambos escucharon aquello y una luz de esperanza se abrió en sus corazones. La mujer se dirigió cerca del fogón, saco el haz de leña buscado el día anterior, y lo dispuso en el patio formando un montón en forma de pirámide._ A la tarde arderán tus plumas y con ellas tus últimos suspiros como humano. ¡Jajá jajá! se le oía reír a cada rato.         La vieron abrir la puerta y salir, el gato quiso salir detrás de ella y recibió un portazo que lo regreso adentro revolcándose en el suelo. La mujer volteo  y lo vio darse un revolcón._ ¡Aja! quien te manda andar tras mis justanes. No aprendes ¡jajá jajá!        Se cerró la puerta tras sus pies y bajo el quejido de las bisagras que soportaban el peso de la madera. Inmediatamente Sebastián se levanto y por el ojo de la cerradura la vio adentrarse en el bosque. Rápidamente se acerco a la jaula y saco a su padre. _Tenemos que encontrar uno de tus pelos rápidamente, le dijo Sebastián._Lo triste,  es que posiblemente anoche los  quemaste todos. Le recordó._ Buscaré en el tambor puede que haya olvidado uno.         Quito la tapa y reviso el fondo del recipiente no encontró nada, volteo la tapa para ver si algún cabello quedaba allí. Tampoco encontró nada. La desesperanza los envolvió. El hombre-halcón abatido sobre el suelo, se lamentaba de su mala suerte._Solo un pelo, un bendito cabello y alejaría para siempre, el manojo de fantasmas mentales que me llevan a la locura. Se quejaba con amargura.         Sebastián se revisaba la ropa los pies para ver si alguna  estaba adherida a su ropa o a su piel pero nada. El piso fue prácticamente barrido por los dos sin ningún resultado. Los atrapo la desesperanza, en un abrazo de conformidad con los hilos del destino que le trazaban un mal augurio. Las palabras maléficas de la bruja en el patio los volvió a la realidad, cada quien ocupo su lugar de nuevo cuando la puerta se abrió. La mala mujer cerró la puerta y cuando paso al lado de la jaula tomo el palo y la golpeo nuevamente. _ Despierta querido que llego tu amorcito. Le dijo.         Del copete de la jaula se desprendió algo que se desplazo girando y dando vueltas por el aire hasta depositarse en los pies de Sebastián. Al ver lo que era, no lo podía creer un mechón de pelo de mediano tamaño estaba entre sus manos quizás eran los últimos. Con alegría desbordante la guardo en el bolsillo y guardo el silencio más placentero que vez alguna hiciera. Desde su escondite la observo agregar unas flores exóticas al cocimiento y bajar la olla del fogón._ Ahora la poción si esta completa, solo falta el atardecer, querido, pronto estaremos juntos.         Se acerco al tambor donde guardaba los pelos y cabellos de Juan, y con la vara lo golpeo dando por hecho las ultimas palabras, platicadas en un monologo eterno con su sombra.         Entro al cuarto y fue hacia el copete de la cama y busco una llave. Sebastián trago saliva porque pensó que iba abrir la jaula. Se dirigió al baúl y después de proferir unas palabras lo  abrió, y saco unos libros y pergaminos que tenia guardado. Era la herencia dejada por sus ancestros, acumulada por siglos y siglos de sortilegios y magia negra. Los reviso y volvió a colocar en su sitio._Antes de la ceremonia  quemo estos, dijo, así nadie podrá romper el hechizo         Guardo la llave en el bolsillo, se acerco al copete y tomo la llave de punta triangular y también la guardo en el bolsillo._Es mediodía voy a dormir mi siestecita para luego cumplir con mi propósito.         "Ahí de mi", sollozaba en su jaula. "Amalaya un mal rayo cayera y te partiera en dos" le decía._ Jajajajaja, reía, descansa querido pronto nos uniremos en un vuelo, tu y yo, para siempre. Duerme un ratito que yo te despierto como constantemente lo hago.V I         Pronto se cerraría un ciclo lunar y aparecería la luna negra, cuyas fuertes radiaciones eran utilizadas por brujos y chamanes, para el mal y para el bien; cada quien utilizaba las energías cósmicas de acuerdo a su proceder. Mientras el astro recorría su orbita, Raquel; la hechicera, se tendió de palmo a palmo sobre la cama y al rato quedo dormida en sus profundos y falaces sueños. Solo los ronquidos daban señal de su existencia. En la jaula, Juan luchaba para que los rasgos síquicos del alma del halcón no se apoderaran de su conciencia, por que de ser así,  ahí comenzaría su maldición eterna.         Cuando Sebastián sintió, que la mujer dormía profundamente, se levanto y le contó a su padre lo acontecido. Este se alegro mucho y dio gracias a Dios por que le dio un hijo tan inteligente y que el azar lo bendijera. El cocimiento se enfriaba lentamente, los capullos impregnaban su esencia en el agua concentrando las sustancias. El hombre-halcón que comenzaba a encañonar pelos y cabellos. Le pidió que lo acercara un poco al cocimiento._Hay que vigilarlo solo falta que habrán los capullos de la planta que agrego de ultimo. Dentro del capullo esta el ingrediente que falta. La siestecita de la bruja dura largo rato. Tiempo suficiente para que este la pócima._Voy a estar pendiente papá, no te preocupes.         Mientras la bruja roncaba placidamente, ellos vigilaban el momento que el capullo abriera. Solo esperaron unos minutos más,  los capullos abrieron y su contenido se mezclo con los otros ingredientes coloreando la poción de un rojo intenso._Es el momento, dijo el hombre-halcón, toma una taza del liquido e introduce el mechón. Y luego me das a beber.         Inmediatamente Sebastián hizo lo que le pidió su padre, al introducir la greña de pelo, la poción adquirió un color morado. _Esta un poco caliente, dijo Sebastián._No importa a si funciona la poción.         Con sumo cuidado Sebastián tomo la taza y dio a beber a su padre. Pasaron solo segundos para que su padre comenzara a recuperar su lucidez. Desnudo como estaba, se dirigió en silencio con Sebastián al cuarto de la bruja. Esta comenzaba despertarse en medio de un sueño grotesco, y de su boca salían carcajadas y gritos con sonidos macabros. Rápidamente el papá la agarro por los brazos y la coloco boca abajo. Le dijo a Sebastián que le pusiera una mordaza para que no pudiera pronunciar sortilegio alguno y la amarro por las manos y por los pies. Le saco las llaves del bolsillo. La bruja estaba totalmente indefensa no podía hacer nada.         Media hora después, la tarde oscureció de pronto y los sonidos del silencio enmudecieron anunciando la entrada de las energías cósmicas de la luna en fase negra, el momento de alinearse con el cosmo en un hechizo benévolo o malévolo había llegado. Juan, busco una sabana y se la ato a la cintura para cubrirse. Luego busco la poción que estaba sobre el fogón y pronunciando las palabras que ya se sabia de memoria de tanto oírlas, la obligo a ingerir toda la poción roja que quedaba en la olla. Solo esperaron un corto tiempo y el brebaje comenzó a surtir efecto en su mente. Le devolvía el manojo de fantasma que por siete años soporto y que al fin vencía con la ayuda de su hijo. En ese momento todos los hechizos hechos por ella quedaron rotos y sin efectos. La marco herrándole ambos brazos con  la llave de punta triangular._ Te marque con la llave y le diré a todos los habitantes de este pueblo quien eres y donde te vean serás perseguida y aborrecida. Los animales del monte de ti huirán. Buscaras la muerte y no la encontraras, penas y pestes caerán sobre tu cuerpo por los días que has de vivir.          Salio al patio y la arrojo al suelo. "Por mala y sirvenguenza estarás sola el restos de tus días, deambularas de aquí para allá, pensando que eres los fantasmas que habitaran tu mente. Como errante recorrerás el mundo buscando consuelo, mas a ti no llegara. Sola estarás hasta el final de tus días". Loca  y trasteando se introdujo en el matorral, perdiéndose en el oscuro y tenebroso laberinto de su mente, donde la esperaba una imagen de ave rapaz para adueñarse de su alma.         Agarraron el baúl con los libros y los pergaminos, los lanzaron  sobre el montón de leña. Sebastián fue a buscar el otro montón de leña que estaba sobre el patio, leño a leño lo esparció sobre la cama. Juan roció la casa con kerosén y le prendió fuego con la lámpara que reposaba en la cocina. Salieron al patio y vieron como se consumía en gigantescas llamaradas. Los ratones salieron corriendo y se metieron entre la maleza. Cucarachas, murciélagos y chiripas huyeron despavoridas del incendio. El gato maulló entre los pastizales llevando la cola prendida en candela.          Sebastián con la ayuda de su papa rompió el hechizo que la mala mujer poseía sobre la familia. Ahora sentía hambre, mucha hambre. Su padre lo tomo por la cintura y se lo monto en el hombro._Cuando llegue a la casa te voy a preparar una sabrosa cena, le dijo.         Dieron la espalda a la casa que se consumía en cenizas. Y fueron al encuentro de Isabel, la pequeña Isabel, para estar de nuevo juntos y ser felices para siempre.                                          
HECHIZO DE LUNA NEGRA
Autor: florencio  897 Lecturas
+++++
Imagen
LOS LAMENTOS DEL BURRO
Autor: florencio  891 Lecturas
+++++
Imagen
COMPADRE TIMIDO
Autor: florencio  889 Lecturas
+++++
_hey  viejón, sal a vivir del mundo, disfruta de esta vida.Le grito la mujer, sacudiéndole el vestido con una mano y sacándole la lengua. Con la otra mano sostenía una presa de pollo, que engullía vorazmente._y tú crees que vivir de mentiras y vanidades es vivir._ja ja ja.... mira lo que le paso a cochina chuza, le dijo.La mujer  rio con sarcasmo, lanzándole el hueso. El viejo se apartó y frunció el ceño, entrando luego a su casa.Cochina chuza, así la llamaban; porque era flaca, desgarbada...estaba  loca y caminaba mucho..... Pero sobre todo era bella, muy hermosa..........Pobre mujer, nadie supo su verdadera historia, nadie supo de aquel golpe que le dieron en la cabeza,  engendrandole un tumor maligno.Ayer la encontraron muerta debajo de la alcantarilla.
Estas navidades fueron frías Congojas al no poder mirarte, Y el tricentenario de Canoabo Se marchó sin encontrarte   Ha llovido en semana santa Ya murio el mes de abril Los días, amarran recuerdos El viento deja estela y  carril   En mayo, reverdeció el horizonte y las memorias de tu ayer andan entre la ciudad y el monte   El día de las madres corretea en afán un año sin ti, madre, un año sin ti promesas que no se olvidaran        
SONETO PARA MI MADRE
Autor: florencio  840 Lecturas
+++++
Imagen
SOY EL POETA VIRTUAL
Autor: florencio  830 Lecturas
+++++
Imagen
SENTIDOS
Autor: florencio  822 Lecturas
+++++
Era el Bicentenario del Pueblo. Vagan  aires de venganza. Pedro lo ve venir, corre y cae con tres disparos. Herido y grave, le ruega: “no me mates”. Jacobo jalo el gatillo, disparándole en la cabeza, mientras le grita con rabia “yo jure que te iba a matar”. Se repetía parte de la historia del Centenario y a la misma hora.
MALDICIONES CENTENARIAS
Autor: florencio  819 Lecturas
+++
Imagen
A QUE TE SABE EL AMOR?
Autor: florencio  818 Lecturas
+++++
Imagen
UN CUENTO DE AMOR II
Autor: florencio  815 Lecturas
+++++
Imagen
MONCHO
Autor: florencio  813 Lecturas
+++++
Imagen
Pensamientos (II)
Autor: florencio  811 Lecturas
++++
<< Inicio < Ant. [1] 2 Próx. > Fin >>

Seguir al autor

Sigue los pasos de este autor siendo notificado de todas sus publicaciones.
Lecturas Totales62509
Textos Publicados67
Total de Comentarios recibidos267
Visitas al perfil29964
Amigos51

Seguidores

2 Seguidores
Senior
Daih
  

Amigos

51 amigo(s)
Micaela
Stella
alia elvira galeano c
ALFREDO MENDIOLA
Samont H.
Araceli Valverde
Ana Belen Codd
nury
amelia
Karla Valdez
Héctor Restrepo Martínez
Turmalina
Edgar Tarazona Angel
Liaazhny
Susana del Rosal
Constanza Castillo
Dayana
JORGE AMADO
alma
Gustavo Milione
Rita GL
Oscar Franco
Emme
kamil
José Luis Marrero
cincopoetaschamos
luis josé
Alfonso Z P
Daniel Florentino López
flor hidalgo
JAVIER MONROY
Jorge Dossi
Gustavo Adolfo Baracaldo Valero
IRMA PERIBAN VILLA
**Leticia Salazar Alba**
Elizabeth Rodriguez
Wilmer Ricardo Acosta Izturriaga
ALONDRA
El...vi...ra
Eduardo Cuevas Rios
Minerva
Edgar Omar Neyra
María Ester Rinaldi
Delfy Gonzalez Silva
solimar
Carlos Campos Serna
Enrique Dintrans A:
Filiberto Oliveros
Jesus Eduardo Lopez Ortega
angelita
doris melo
 
 
florencio florencio

Información de Contacto

Venezuela
Profesor de Ciencias.
Me gusta el deporte en general,pero especialmente el beisbol.
El genero narrativa es mi elemento literario, la poesia son musas que atrapo en el aire, cuando vienen a mi.
Trato de acercarme a la verdad, un poquitico, en los misterios que encierran el Amor y El Apocalipsis.
www.letrasdecarbon.jimdo.com

Amigos

Las conexiones de florencio florencio

  MMicaela
  Maris
  elvira
  CACA
  misamont
  Ari
  belen mallorca
  nury
  AMELIA
  Karla Valdez
 
<< Inicio < Ant. [1] 2 3 4 5 6 Próx. > Fin >>