Como hombre mutilado me levante esta mañana trillada, quizás deje detrás de la puerta mi pie izquierdo, tal vez me di cuenta que perdí mi corazón en el campo de batalla de tus pies, acostumbrado a escribir citas clandestinas entre mis ganas de verte y tus ganas de dejarte ver, como claro pensamiento de un fumador en plena espesura de un tiempo pagado, pidiendo excusas a la estupidez, pidiendo redención al amor. ahora bien es bueno pensarte diferente, ahora bien es bueno amarte distinto, ya tengo mi título a este futuro guion de experiencias, y primeramente estaría dedicado a mis locuras y solo a tu blusa que para mi juicio no dejaste olvidada debajo de nuestra cama, púes toda prenda con tu olor tiene un propósito, pianos, versos, vino, tu prenda y yo somos todos lo que seguimos aquí, somos ellos y somos yo cuando entre pensamientos y anhelos nos juntamos en la que se rehúsa a dejar de ser el mejor lugar para la lujuria y el completo he incompleto sabor de tu sudor y mi cintura. Visión de este desahogo de impuros amoríos siempre me congenia a escuchar las mismas voces después de fumar frente a la ventana de los sueños, porque la diferencia de la terca poesía y la sucia antología es que no quiero ser ortográfico, no quiero ser tu cruz, solo quiero ser nosotros, solo quiero ser yo. Erwin canquis. erwincanquis@hotmail.com