En Terrassa hay que levantarse estos días muy temprano porque con la de socialistas que están cayendo en manos de la justicia azul en la ciudad vecina de Sabadell, es siempre pertinente ver si hay algún alguacil delante de casa con un papelote entre manos. Bueno, de eso si acaso deben preocuparse los socialistas y yo no soy... joder!! si que soy socialista!! Vaya mala suerte que tengo!! Quedamos en que me he levantado temprano y tras asuntos de aguas menores he abierto la compu para así poder ir un poco bien informado al trabajo. He repasado los titulares de los periódicos catalanes de izquierdas (o sea, que no he repasado ninguno) y me he encontrado con un mensaje en mi e.mail de mi hermana Laura. Es muy "recomendista". Siempre desea pulir mi basta cultura (la suya es realmente vasta) y por ello cuando lee algo interesante de alguien en alguna parte me lo advierte. Y esta mañana me ha dejado este críptico post: Entra en Textale y busca "Lorena Rioseco Palacio". Yo, siempre tan servil con ella, he entrado en el foro donde ahora tecleo a toda prisa pues se me hace tarde para ir al curro, y he buscado a Lorena (nombre bonito por cierto). Por suerte las tres narraciones que ya ha publicado esta muchacha son breves, concisas y van al meollo de la cuestión (entiendo esto como una comunicación paralela extrasensorial que ha hecho que Lorena no escribiera algo que me hiciera llegar 10 minutos tarde al trabajo). He leído con atención sus reflexiones pero como soy muy burro no he entendido mucho de que hablaba, aunque todo sonaba tan bien... Por la noche se lo preguntaré a mi hermana que ella las caza al vuelo (las reflexiones, me refiero). Y ahora no sé porque escribo esto. Será para tener un texto más, que los hay que pasan de mil y yo voy muy atrasado (Por cierto, ¿Cuando trabaja Libardo?)
Tras leer a Lorena saldré a la calle, entraré en el garage, me subiré a mi 500 y pasando coches (los que están aparcados) me plantaré en cinco minutos en el taller. O sea: El día de la marmota. Y a ponerse el mono engrasado y empezar a moverse por debajo de las barrigas sucias de cuatro utilitarios que me esperan como cuando yo voy al dentista: No nos vamos a hacer daño, ¿verdad?
Vaya, creo que de todo lo que he escrito lo único importante es la anotación de que he leído a Lorena. Y de paso, me he suscrito como seguidor de sus textos y así mi hermana no me los tendrá que contar. A cambio yo le voy a explicar porque Vettel ganó el mundial haciendo trampas y sin embargo no lo descalifican. Ella aún no conoce el síndrome "Armstrong":))