Todo lo malo que he tenido que atrevesar en mi vida puede ser contado con los dedos de una mano.
Primero esta el incendio, mi casa fue abrazada por el fuego y consumida en cuestión de minutos. En segundo lugar la muerte de mi abuela; Ella se fue, dejó un vacío en mí y un millón de preguntas sin que nadie más pueda responderlas.
Tres: a mi hermano lo atravesó un cuchillo. Como cuarto y último lugar mi papá se quedó sin trabajo y ahora está en un lugar que le quitó todas las ganas de seguir adelante.
Yo creo que todo lo malo trae algo bueno, por ejemplo, ahora tengo una casa mucho más grande y sin deudas,y mi hermano está sano, salvo y con la certeza de quienes son sus verdaderos amigos.
 Quizás yo no lo vea, y tal vez me han pasado muchas cosas malas. Hoy conversando con mis amigas lo entendí. 
Todo es pasado, para mí, los problemas pasan y yo sin mirarlos sigo adelante, aprendo de ellos y se van.
Mi vida no es nada maravillosa, está empapada en una monotonía que estrangula y azota contra la pared, porque está ahí como un amante tirano y celoso que no permite el cambio.
Vivo en una burbuja, todo es lindo, todas las personas son buenas, no tengo malas experiencias que contar. Y eso es lo que me aterra, saber que un día esta burbuja se reventará y como soy tan débil e idiota me quitaré la vida, porque soy tan inútil que ese puede ser mi único propósito en la vida. Algo así como para enseñarles algo a los demás.