ESENCIA AGRIDULCE 
La primera piramide de cristal que vi brillar en un abrir y cerrar de ojos ante mi incredulo y egoista pensamiento, me hizo creer que podían existir miles de razones por las cuales yo solía convertirme en lo indeseable para otras personas y en ocasiones hasta para mi misma.Fue así como aprendí a que debes bajar por las calles recorriendo la ciudad y observar detenidamente las sombras que pasan por tu lado y que tu apenas les echas una mirada en tu largo caminar. El polvo blanco que ves caer sobre ellos, te lleva a imaginar todos aquellos recuerdos, todas las memorias que antes habían sido borradas y que el día de hoy un remolino de soledad los remueve con facilidad.Quizás pueda encontrar en alguna instancia de la vida un sitio estable y así seguir naufragando entre mis pensamientos que aunque no parecen muy cuerdos si son el centro de control entre tantas constelaciones que reflejan mi horizonte.  Enigmas de la soledad.