El piano suena, pero nadie toca,
La radio suena, pero nadie escucha,
La televición está prendida, pero nadie la ve.
 Mi corazón late, pero no lo siento dentro mio,
el viento sopla afuera, pero adentro no hay nadie, la casa está abandonada desde hace mucho tiempo, y a nadie parece importarle.
 El libro está abierto, pero nadie lo lee,
 El cuadro está terminado, pero nadie lo aprecía,
 La luz está encendida, pero nadie la siente,
 Yo bailo pero nadie lo sabe.
 La casa está limpia, pero tambien desordenada, se ven pequeñas hueyas de dolor, pequeños charcos de emoción y las paredes destruidas por el pasado. 
 La puerta está abierta, pero nadie lo nota,
 Las paredes recién pintadas, pero no secan,
 La ropa por el suelo, y sin ordenar,
 La mesa está servida, pero nadie se sienta a merendar.
 El armario está abierto, tambien se encuentra limpio, solo cuelga un vestido.
 En la estantería ya no hay libros por leer, solo se puede ver uno, en el rincón.
  El agua corre, la canilla está abierta, pero la puerta cerrada, alguien me llama, pero no deseo oír, el espejo en un rincón, ocultado tras las savanas, nadie quiere verlo, nadie desea ver la realidad.
 El sombrero  el saco para salir, colgados en el perchero, nadie entra, nadie sale, nadie piensa, nadie ve, nadie es quien en realidad es.
 
 
 
                                                                             -Nahir S-