Y me advirtieron que no me fíe
de las diez mil cosas de este mundo

Que Parsifal apuró por Constantino
La santa sangre del grial, y se la bebió.

Que el compasivo compensa al asesino
y el que le roba al ladrón, sus cien años de perdón
Que la señora desnuda sabe ser
tan maja como la puta vestida

Que hay una sola cosa en el mundo
Que se empeña en persistir: El cambio 

Que el poeta ya nada tiene que ver
Con el poema que acaba de concebir.

Que todo el vino de la vendimia
Fue a dar a tu boca fresca de vid  

Y que se convirtió en vinagre
El día que decidí partir