Poema para niños o adultos con alma de niño
 
En mi tierra allá en Torreón,
Las cosas son bien distintas,
Las liebres atan con cintas,
las orejas y la cola,
 
el conejo por su parte,
Siempre reza al levantarse,
Viste frac los días martes,
Y los domingos casual.
 
Las gallinas por su parte,
Duermen siesta a media tarde,
Toman mate al levantarse,
Y pan tostado al acostarse,
 
Los espinos si tienen sed,
Caminan hasta el estero,
Para saciar su guergüero,
Y cantar en las mañanas,
 
Los olmos si que son raros,
Cargan peras todo el año,
Las higueras son floridas,
Y por hojas tienen espinas.
 
Las sandias las da el manzano,
Las brevas el avellano,
Las nueces las da el castaño,
Los huevos los pone el gato,
 
La viña si que es curiosa,
Las uvas son cristalinas,
Las hojas de color rosa,
Y las guías son azulosas.
 
El naranjo da limones,
Del tamaño de la guinda
Y florece cada noche
Que una mujer le orina.
 
 
Es tan solo una locura, gracias