La Doña Pulga
 
Es culpa de doña pulga,
Que a mi llamen el flojo,
Pues yo siento gran enojo,
Porque cagó mi camisa,
Una hora antes de misa,
El día que me casaba,
Fue en el cuello la cagada,
Y lo hizo con gran tesón,
Luego salto al pantalón,
Mientras cantaban la misa.
 
Quise pillarla de prisa,
Pero dio un salto primero,
Agarrándose del velo,
Ya no la vieron mis ojos,
Y fue el cura tan gracioso,
Que llamó a ser generoso,
Compartan hasta las pulgas,
Me dijo guiñando el ojo,
Mientras la condenada,
A mi novia picoteaba.