Yo acuso, el terremoto,
 
Como caras de ancianos veo las casas,
Se ven tristes, solitarias, se aferran al recuerdo,
Miro al suelo y veo los pasos de los niños,
Niños jugueteando entre ladrillos polvorientos,
Los quejidos cual lamentos vagan lejos,
Cruzan el umbral adormecido del recuerdo,
Mas los gritos son silentes, indolentes,
Como el frío que se cuela entre las tablas,
Puedo escuchar los gritos de los pinos,
La indolencia de los clavos oxidados,
El crujir de las bisagras, de ventanas
Las tablas se lamentan como ancianos,
En viento cual cigarra canta en las hendijas,
Miro las medias aguas, se lamentan
Miro los adobes apilados, la casa del pasado
Escucho gritos silenciosos, solitarios,
Mas en medio de la mesa un mantel blanco,
Unas hogazas restregadas con las manos,
Un techo, una casa, un sueño, un sueño, un sueño…
 
He escuchado el discurso que va desde el presidente a todos los políticos que lo acompañan en su gobierno decir que han dado cincuenta mil viviendas a los damnificados del terremoto de 27 de febrero pasado, sin embargo la memoria no me falla, y puedo acusar que las medias aguas entregadas fueron construidas y compradas con el dinero recolectado en la teletón Chile ayuda a Chile, y aun no se ha hecho nada para darles una solución definitiva a las familias damnificadas, también he escuchado los comentarios que posiblemente Dichato sea ubicado en otro lugar y no me extrañaría que luego de ello una gran empresa de capitales construya edificios para gentes de dinero.
 
Un cordial saludo y agradeceré sus comentarios. Caranndor