No podemos rendirnos caballeros, levantemos esas cabezas y sigamos por la senda de la proyección, del crecimiento. Estamos como país marcados por historias de adversidad, por lo tanto muchas veces hemos visto la angustia, el dolor, pero no olvidemos nuestra gran solidaridad, amor por la patria, nuestro espíritu de ayuda, de superación cuando todo sale mal, arriba compatriotas, arriba señores. No es la primera vez que lucharemos por  revertir una causa adversa, vamos adelante.
No busquemos nuestro propio  éxito, si no el de todos nuestros semejantes, no olvidemos a nuestros hermanos que sufren por causas estrepitosas que  han sucedido, unámonos amigos, llevemos la bandera de la solidaridad y cautivemos la victoria de luchar juntos este gran caos nacional.
Lo peor seria estar solo, y no lo estamos, miles de personas se han vestido de ángeles, de amigos, de vencedores. Me conmovió ver a esa  madre en concepción con sus hijos apretados en  un edificio y no soltaba a ninguno de ellos por ningún motivo, vino la ansiedad, la desazón, pero ella con actitud, con templanza y jerarquía no hecho atrás y se salvo, la rescataron… Ese es el espíritu señores, nunca dejar todo, siempre luchar, dar todo.
 
Entreguemos todo en está batalla calleros!!.