Te echo de menos.
También tus palabras,
tu risa,
tu cuerpo,
tus besos,
tus caricias,
tu forma de hablar,
de mirarme..
Te quise,
te amé.
Te quiero,
te amo.
Creí que ibas a buscarme,
creí que algún día te darías cuenta de que me necesitas.
Pero, cada día soy yo la que te necesito,
la que te anhelo.
Recuerdo los días que pasé a tu lado,
fueron tan bonitos..
Supe contigo lo que era amor,
¿por qué me hiciste eso?,
¿Por qué dejaste que tu dejadez ganase?
Te di mi alma,
mi corazón,
mis palabras,
mis canciones de amor,
mi vida…
¿Cómo se puede olvidar de algo así alguien?
Eso queda grabado.
Cada día que pasa te añoro,
te pienso,
y no puedo remediarlo.
No sé si quiero olvidarte,
o recordarte.
O recuperarte.
Mi corazón está partido en esos bandos,
¿cómo saber cuál coger?
Pienso que tengo que buscar a alguien,
así se me borraría tu olor.
Pero,
no puedo,
no encuentro el amor hecho carne en nadie que no tenga tu nombre,
tu fragancia.
Tal vez te di demasiado de mí,
pero, es así.
Yo me entregué a ti en cuerpo
y en alma.
Así aprendí
y
di...
Di significado al amor,
a mi amor.
¿Se te ha ido ya éste?
¿O es que nunca lo sentiste?
Se me hace tan difícil esto…
Quiero odiarte
y romper tus recuerdos,
pero,
a la vez te deseo tanto,,
quiero abrazarte,
besarte
y sentir ese cosquilleo en mi estómago..
Ese cosquilleo que tenía al verte
o al hablar contigo.
El tiempo curará mis heridas,
aprenderé
y sentiré.