La primera noche de la luna llena se congregan cada vez más personas . Es en la playa de Ocean Park , el espacio  donde unas trescientas personas  se reúnen a compartir y celebrar con bailes y cánticos alrededor de una fogata, rindiéndole un homenaje a la luna. Es un rito pagano que celebraban nuestros ancestros. Yo estaba allí, con una cámara sentada en un gran círculo mientras el chaman daba su explicación sobre lo que significaba esa gran noche, hablaba de puertas pero no entendía mucho porque nunca había participado de ese rito. De frente a nosotros  llamaba a todos los dioses a congregarse con nosotros, en ese ritual que comenzó al oscurecer. Mientras el fuego estaba en su apogeo mujeres hombres y niños danzaban alrededor del círculo,  levantando los brazos en señal de alabanza y se acercaban al fuego haciendo gestos como si abrazaran el fuego y tirando en el sus cargas negativas. Diferentes sonidos de tambores sonaron en ese encuentro con lo mágico, reinaba lo insólito en aquel espacio en donde todos y cada uno de nosotros  parecíamos como embrujados no sé si por el sonido de los tambores y los cantos , por la ebriedad del ambiente, los gritos de los eufóricos participantes . Todo quizás girando  al sonido de la música que nos unía al ritual.
 Según pasaba la noche  lanzaban  al fuego  diferentes tipos de fragancias, llenándose  el ambiente  de olores contagiosos que sosegaban el espíritu de cada uno de nosotros. La oscuridad , el momento, todo se conjugaba alterando los sentidos y la frescura de ese olor mágico embriagante.
Luego de tomar las fotos con mi cámara digital cuando las puse en la computadora me di cuenta de lo que capto la cámara en varias tomas aquella noche.  No lo podía creer, pero es cierto. Se trata de una mujer que se formo encima de las nubes que sale del fuego una forma de mujer como ustedes pueden ver en esta imagen y de la misma forma apareen otras entidades que se  congregaron allí en ese espacio mágico.