LA ESPIGA DORADA
Publicado en Aug 19, 2014
Prev
Next
 He aquí señores del asombro,
una aventura se desliza,
con una espiga de trigo
sobre su alta cabellera.

No era necesario que tuviera botas
porque que yo sepa
tampoco tenía pies, manos, rostro
o algo que se le pareciera.

Era un enjambre de minúsculos virus
solidariammente decididos
a organizar una fiesta genética de beneficencia
para inocular en los mercados
el regreso del trigo.

¡Habrá pan para todos, y gratis!
¡A desbaratar el monopolio de los genes!

Asomé mi nariz al microcopio
examinando la curiosa espiga.

¿Qué no me comprendes,
parásito semántico?
me dijo uno.


¡Interrumpiremos todas las sinapsis
tus pensamientos y visiones
y ya no podrás pensar, ya no, no y no.
¿Y para qué tus signos y palabras?
¿Acaso no eran antes que tú vinieras
a tu madriguera metafísica?

Déjame al menos la ilusión y el riesgo
de tratar a la espiga
con la dignidad que se merece;
le respondí.

Pero entonces ya había muerto.
Y cuando me disponía para el viaje
me sorprendió ver un coro de luciérnagas
bendiciendo los desiertos,
antes de la Gran Lluvia.
Foto del autor Enrique Dintrans A:
Textos Publicados: 1057
Miembro desde: Jul 23, 2009
1 Comentarios 386 Lecturas Favorito 2 veces
Descripción

Un poema de fantasa

Palabras Clave: espiga - genes - trigo

Categoría: Poesa

Subcategoría: Poesa General


Creditos: Enrique Dintrans Alarcn

Derechos de Autor: Reservados


Comentarios (1)add comment
menos espacio | mas espacio

Mara Vallejo D.-

Hola Enrique.
Virus; Oh Dios, amigo mío.
Seguirán las luciérnagas bendiciendo desiertos y regalando luz
en las almas de todos los que tocados fueron por los virus,
incluso . . .LA ESPIGA DORADA.
Interesante tema el de tu poesía.
Me gusta.
Abrazos

Responder
August 20, 2014
 

Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.

busy