Jesus, la ciencia avanza más y más cada día, hasta el punto de que en varios casos de cáncer se pueden curar, quien quita que tu caso se pueda superar. Sé que es preocupante, te cuento que mi esposo además de sufrir de diabetes, también se le presentó cáncer en la próstata, sufrí yo más que él, increíble, él me consolaba y mostraba gran fe de curarse, creía en los médicos y medicamentos, Supimos que un científico llamado Hugo Segura aplicaba vacunas que detenían el cáncer, lo buscamos en la Universidad Manuela Beltrán en la que varios profesionales se ocupan de la enfermedad, psicólogos que dictan conferencias a los familiares para indicar actitudes convenientes y corregir escándalos. La enfermedad de mi esposo hace más de cinco años se le presentó y hoy día está bien, hace ejercicio, alimentación especial, distracción, lee y le gusta arreglar todo los daños del apartamento, vive alegre haciendo bromas y yo tranquila de observar tanta superación. Ojalá tú también encuentres el camino de superación y si te gusta la escritura, sigue escribiendo, es un alivio, uno mismo crea mundos diferentes que nos distrae y alivia.
Un abrazo, amigo.

La sola palabra te amedrenta y en ciertas oportunidades algunos frente a ella definitivamente se rinden.
Hace algún tiempo crucé ese puente que hoy día tu cruzas y también elegí estas páginas para manifestar mis temores...
Ha pasado el tiempo y hoy día puedo ver con absoluta calma que dicho enemigo es fácilmente abordable.
No soy quién para administrar consejos, no obstante no puedo dejar de sugerirle, amigo mio, que enfrente las circunstancias con total valentía.

te destruye y con ello, todo lo que hay alrededor; aquella persona muere desde el momento en que llega esa palabra a su vida, y en su lugar quedan aquellas frases hostiles, un ser que no aparenta sentimientos y que solo vuelve a recordarlos para llorar su tristeza.
No es para siempre, es enfermedad en multitud, y cuando se desmorona el centro todo caen a su alrededor, y cuando su sonrisa vuelve alrededor se baila en el festín.
arriba y abajo nos encontramos en esta vida, sufriendo y gozando, siendo todo y siendo nada; aprovechando cuando se puede reír y llorando cuando se necesita llorar...