Qu tan valiente eres?
Publicado en Apr 15, 2014
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Fué una noche larga y has tenido que alejarte de la ciudad por más de un sólo motivo. Se organizó desde hace un año una fiesta, una boda o unos quince años, en una ranchería, un salón de fiestas alejado de todo. Como era de esperarse mucho de los familiares terminaron alcoholizados y el ambiente familiar se perdió desde hace tiempo, la fiesta terminó y 5 personas te han elegido a ti puesto a que tú eres la única persona con vehículo entre tantas, para que las lleves a su casa. Entre éstas personas está tú tío, quien se casó con tú tía, quien está tan borracho que jala el seguro de la puerta del automóvil para bajarse en cualquier momento, siento que el vehículo está en movimiento. Y unos sobrinos.


Se te dió ésta labor de llevarlos a su casa no sólo por que viven relativamente cerca, sino que además no te dejaste a limpiar parte del desastre causado. Como habías gastado ya parte de tu combustimble y la casa de tus parientes no te quedaba de camino, en cierto tramo de la carretera se terminó por completo tú combustible, eres una persona exceptica, nada te da miedo y en caso de que algo te asuste. En la guantera de tú auto tienes una calibre 38. Un revolver largo capaz de romper cualquier hueso si se da un tiro preciso. Te quedas quieto en el auto con al brazo por fuera de la ventana diciendo groserías y maldiciendo a todos los dioses del olimpo. Se ve claro que una lluvia se avecina pero está bien, tú puedes quedarte a dormir ahí mismo, en el vehículo, tan sólo mientras llevabas a tus familiares viste a varios federales de caminos (Es decír, patrullas) andando, aun que no viste ninguna gasolinera.


Prendes la radio para distraerte pero no se sintoniza claramente ninguna señal. Además de que ya es tardísimo, incluso ya pasó la hora del himno nacional. Pondrías un disco en el radio pero reflexionas y te das cuenta que eso sólo sería bajar la batería a lo estúpido. Tomas tú teléfono móvil y lo curioseras un tanto, viendo tus imágenes, tus mensajes con tú pareja (Quien por cierto decidió dejarte ir sólo. A ella no le gustan las fiestas tan lejos y prefiere dormir tranquilamente, confía en que no coquetees con nadie)


Después de haber echo un tanto de espacio en la memoria de tú teléfono, escuchas unos ruidos extraños que se acercan hacia ti, parece que se acercan en grupo hacia ti.Volteras por el espejo lateral de donde tú estás sentado, y puedes ver a unos vagabundos que se acercan hacia ti apenas pudiendo caminar por su alto grado de alcohol, de hecho varios de ellos llevan una botella en mano, además de eso andan armado con palancas, palos, lo más probable es que uno lleve una navaja automática o peor aún, una pistola de fuego. El jefe de la pandilla ya ubicó bien tú auto, y le da la orden a los demás de sacarle los rines, los espejos o si es posible, robarse todo el auto. Tú por instinto de supervivencia sales del auto con el arma cargada en mano,


Uno de ellos se lanza sobre tí, te intenta dar con un tubo de manera lateral y a la altura de la cabeza. Él es es fuerte, pero está ebrio, tú estás en todos tus sentidos y te agachas evadiendo el tubo, el muchacho cae sobre tú pecho, en el corazón te dolería matarlo en esas condiciones, pero él se lo buscó. Te alejas de él pero sólo cae en el suelo, otro más adelante te amenaza con una navaja, mientras que dos de ellos están quitándote las llantas con un gato (Herramienta)


El fulano de la navaja avanza hacia ti tratando de apuñalarte, es más rápido está más atento, pero por suerte lo evadiste, apenas y logró rasguñar uno de los bolsillos de tu atuendo. Lo tomas por el cuello para clavarle dos rodillazos en el pecho, el muchaho cae al suelo, y aún no estás listo para sacar tú arma a luz. Un tercero desde lejos urga entre su chamarra desde dentro, muy claramente escuchas como recarga un arma quizá más peligrosa que la tuya, y con un instinto de supervivencia al límite, sacas tú arma más rápido. Y le disparas en el muslo izquierdo, justo donde hay una vena que sangra demasiado, sino es atendido de la manera correcta, lo más probable es que muera.


Son acerca de 7 u 8 de los cuales 4 están decentemente briagos, e irán por ti, el vehículo puede ser robado y golpeado hasta la muerte y no habrá muchos problemas, tú sin embargo, vales más que una riña callejera a mitad de la nada. Por lo que caminas dentro de los bosques, para ésto la lluvia se tornó mucho más pesada, parece neblina, no puedes ver más allá y las gotas te duelen al hacer contacto contigo.


Después de pasar aproximadamente un rectángulo con 50 árboles, descubres una casa gigantesca de muy mal aspecto, la humedad y los años la denigraron bastante, hay ventanas rotas y el piso de madera tiene algunos tablones doblados y rotos. Tú sentido común te dice que es muy mala idea entrar a un lugar así, seguro tiene un fantasma adentro. Aun que es mejor estar ahí que morirse en el frío bosque. O , ser víctima de abusos sexuales por parte del grupo de borrachos que estaban afuera. Tienes poco tiempo para decidir, la lluvia sólo cae más fuertey escuchas los pasos de tus agresores rompiendo ramas caidas y paseándose sobre la maleza que creció entre el paso. Volteas a verlos y ellos te arrojan piedras grandes con mucha muerza, evades algunas y las más pequeñas te logran atinar. Muchas de esas piedras rompen las ventanas de la casa, finalmente decides entrar, después de todo los fantasmas no existen.


Una vez dentro de la residencia (Que no se te olvide, entraste volando la chapa de un balazo) lo primero que sientes es miedo, sientes como si una mirada en el fondo de la sala te mirase fijamente al alma directamente. Giras a una puerta que está a tú izquierda, está sumamente polvosa pero logras rotar la perilla. Una vez dentro de la habitación todo es espeluznante. Hay muñecas de porcelana con los ojos rotos, como si alguien accidentalmente con los dedos hubiese perforado las pupilas de las muñecas, hay una cama muy acolchonada con edredones rosas maltratados por la edad. Pones la mano en un agujero dentro de la ventana que fué hecho por las piedras que te arrojaron para pocisionarte bien, una vez adentro, decides abrir fuego sin excederte contra tus agresores, que no darán tregua nunca.


Después de tres disparos tus agresores deciden huir despavoridos ante ti, y puedes hacer dos cosas, sentarte y ocultarte de la lluvia, o ir tras tus agresores, quizá sepan a donde van y de hecho, tengan un refugio, pero lo más probable es que cobren venganza sobre lo que hiciste, si descansas en el bosque morirás de hipotermia no ahora, sino tres días después. Puesto que tú auto no sirve, lo que inhibe la tercera opción, ya te quitaron las llantas, y si no les dió tiempo de quitártelas te las poncharon, tenlo por seguro. Y además no tienes gasolina, sólo empujándolo 12 o 15 kilómetros llegarás a alguna parte.


Suspiras tragándote toda descabellada idea, pero no te quedó mejor opción que quedarte en la casa asquerosamente mórbida. Pero quizá es habitación no te guste mucho, bastó sólo con ver los edredones y a las muñecas para entender que ahí alguna vez dormió una niña. Pero todos los muñecos de porcelana y los peluches enpolvados parece que te hablan, todos te miran, las decenas de muñecos que están en la habitación parecen haber girado hacia ti mientras no los mirabas, si fuera por ti dispararías, pero algo te dice que irá mal si así lo haces. Todos tienen la cabeza ligeramente inclinada hacia un lado, pareciendo estar enamorados, lo que por cierto no hace nada más que ponerte los pelos como escarpias afiladas. Te pones de pie enseguida sin hacer movimientos erráticos para analizar la zona, cada parte de la repisa, hay un espejo roto por una esquina, que está recargado después de todo en un mueble de madera, de esa forma está a tú misma altura. Y en la otra esquina tiene una nota de papel atorada.


Sacas la nota sólo para ver que dice, es un cuadro diminuto de papel escrito con una aparente buena letra, sólo que el papel parece un acta de hace miles de años, o un tratado firmado hace más de doscientos años, luce muy viejo casi al punto de biodegradarse por completo. La nota dice algo como


Tú eres la más bonita, no se sabe por que decides agredirte a ti mismo de ésta manera. Cada que te sientas mal, cada que te sientas sola. Recuerda verte en éste espejo, recuerda que las palabras de la gente se las lleva el viento. Recuerda que tú madre te quiere, y te querrá por siempre...”
la nota te desconcierta mucho, si hablamos de un rompecabezas, esa pieza no te da absolutamente ninguna pista ni te sirve de nada, así que sólo la acomodas en su lugar nuevamente. Giras tú cuerpo levemente hacia la derecha, y en otra repisa de madera vez a una muñeca con la siguiente expresión en su rostro:


[ NOTA: ES UNA IMAGEN. Si desconfía, quítese los audífonos o desactive el audio
http://www.webartz.com.br/wp-content/gallery/deep/OgAAAJoeacRtT16r_mu-FpR2QQCpKPCz5fA7uZCDzOiA1H8SOvfjhU1E_sRmV-EN9zTtXwtgldr28-AAY0aLYR5Wjn8Am1T1ULpYIMdD4KeKiMlbmW9JsHnx7uLZ.jpg ]


retrocedes de golpe y pones el filo de tú pistola entre los ojos de la muñeca. Ésta mueve los ojos siguiendo a tú arma, es decír, poniéndose bizca, y los regresa de nuevo hacia tí muy rápido. Cierras los ojos y te calmas, los abres de nuevo y piensas que todo fué tú imaginación, quizá por el sonido de la lluvia que es demasiado fuerte aún bajo techo. Sales de la habitación y cierras la puerta procurando dejar todo como estaba.


No sabes para donde voltear, de nuevo ésta habitación te inquieta, sientes una mirada que proviene de la oscuridad que te intriga, parece que algo desde allá te mira fijamente, y a la vez piensas que “Algo” te hace sentir algo... (Valga la redundancia) Siento que el verdadero peligro te atacará por tú espalda. Te sientes superior, crees que todos los trucos que viste en las películas de terror te ayudarán y por sobre todo piensas que te zafarás de ésta. Al menos tienes un arma , pero tú rival es desconocido. Te asomas por la puerta para ver si ya disminuyó la condición climática tan fúnebre que te amenazó hace un tiempo, pero nada aún, el clima es mortífero, y por lo menos te encuentras en un buen refugio, o al menos eso parece.


La alfombra roja a la vez oscura en la que estás parado se desliza. El golpe hace que pierdas un tanto los sentidos, te lastimas al caer viendo ahora todo borroso. Sólo vez como toda la habitación voltea hacia ti, casi queriendo verte. Después de ser sacudido de esa forma abres los ojos, estás ahora en otra habitación, no sabes si hay luz, pero lo más probable es que no haya, después de todo no gastarían la luz a lo tonto en una casa que fué abandonada hace tantos años. Tus nervios se ponen al límite pero no amenazan tú cordura, aún eres capaz de discernir lo que existe de lo que no. Empuñas tú arma pegándotela al mentón, imitando a “James Bond” cuando se escondía en una pared para líquidar a sus enemigos, sólo que tú no tienes ninguna pared en tú espalda, a decír verdad no vez nada, caminas encorbado y estirando tú mano a tientas, para evitar tropezarte con algo. Pero tropiezas con muchas cosas que parecen agredirte a propósito. Encuentras al fin un encendedor, pero el resultado es negativo, no hay luz en lo que parece es todo el edificio, la casa estaba bien equipada, y claro que es antigüa, y claro, por debajo hay un quinque grande junto a unos cerillos. Logras hacer algo de iluminación, y te percatas que estás en un baño.


Escuchas unos pasos de un cuerpo promedio que salen corriendo en dirección a la puerta, decides seguir esa figura entre las sombras con el arma bien empuñada, sales a un pasillo. Ves que la figura tornó hacia la derecha, y cuando estás decidido le decides clavar una bala en la espina dorsal. La figura naturalmente se retuerce y cae al suelo después de unos gemidos ahogados, pero momento. A lo largo del pasillo hay velas. Velas que dan una iluminación predominante roja. De no ser por esas pequeñas velas y tú quinque. Estarías totalmente envuelto por la oscuridad. Te das la vuelta sobre tí mismo, y ves exactamente lo mismo, oscuridad, no puedes caminar hacia ningún lado puesto que no sabes hacia donde ir, pero ahora, cuando mínimo sospechas que algo sucede o sucedió dentro de ésta misma casa. Tus pasos son lentos, decides caminar hacia adelante, pero lo haces con una total desconfianza, escuchas murmullos entre las sombras, tú arma aún tiene bastantes municiones como para lidiar contra un ejército, pero aún así debes lidíartela sin usar tú arma, no querrás gastar balas imprudentemente.


Caminas hacia donde tu coraje te guía aún caminando a tientas y casi inseguro, miras atentamente las velas que te iluminan, no puedes ver más allá de ellas, ésto hasta que la última pareja de velas de hasta el fondo de apagaron... No sabes ni que pensar y se apaga la segunda pareja de velas... Y así se apagan las parejas de velas rebasando tú pocisión hasta el final del pasillo donde hay una puerta abierta. Te das la vuelta para meterte hasta la puerta que está del otro lado del pasillo. La puerta se abre sola... Mandas todo a la mierda, dejas el quinque en el piso, apuntas al vacío con tú arma, y antes de que siquiera lo pienses, se arroja hacia ti una figura grande, como la del un hombre que practica pesas. Pero además de una suma masa muscular. La figura que ves tiene unos picos que parecen cuernos en la cabeza, y unas alas enormes que salen desde su espalda. El “Hombre” en cuestión grita mientras avanza hacia ati, tú sólo logras ver uno de sus ojos, que notoriamente son rojos, antes de que tus cuerdas vocales se acomoden para expedir el mayor grito de tú vida. Abres los ojos, tus oidos ya no alcanzan a oir la lluvia, lo que quizá indique que ya dejó de llover o probablemente... Te encuentres en un lugar totalemte distinto.


Estás en un lugar vacío, maltratado por la humedad, en el centro de éste espacio vacío (Con un techo como de 30 metros de altura, es altísimo y aparentemente muy extenso, aun que algo angosto) al centro de éste espacio hay un pilar a manera de cilindro. Y rodeando al cilindro se forma un río pequeño de sangre que tiene la misma dirección, a un ritmo lento pero en movimiento al fin y al caso. Y como si fuese una estrella. Unos ríos más pequeños van en dirección al centro, una de éstas ramificaciones pasa por en medio de tus dos piernas.


Una cabeza similar a un holograma aparece frente a ti, de unos ojos desproporcionalmente pequeños y unos cuernos que sobresalen por el centro de la cabeza, unas cejas que se alzan demostrando que los músculos del rostro de una u otra forma se entrenaron. La voz te miraba fijamente y tú cabeza te empezaba a doler, naturalmente querías gritar pero si lo hacías, lo más probable es que la cabeza se enojara, e hiciera cualquier atrocidad contigo, así que pese a cualquier cosa, te cellabas la boca.


Espero escuches con atención simple mundano -Te decía la voz que parecía alterada por un programa especial, además de hacer un eco simplemente atroz- Por que sólo lo diré una vez. Me he encontrado durmiendo en ésta residencia durante 220 años. La única forma de despertarme era cometiendo 5 sacrificios. Y Tú, por tú arma, le diste fuerte a cuatro de ellos. Al entrar a la casa, mataste al último, toda su sangre es denada hasta acá, por mi. El Demonio Balán, un príncipe muy poderoso del infnierno. Lo que tienes que hacer es simple, tendremos un trato, con tú arma te volarás uno de tus dedos con la mano en que te masturbas, por ser la mano pecadora, en cuanto tú mano se desangre, deberás dibujar al “Baphomet” en la palma de tú mano, y cargarla sobre el cilindro donde va toda la sangre. Una vez echo ésto tú serás mi cuerpo, tú portarás a Balán, y podré vivir en ti. Una vez dentro de ti, traeré la muerte a éste mundo, y la sombra reinará sobre las ruinas llameantes.


Miras tú mano atentamente, temblando por la gravedad del asunto, preparas bien tú arma y te preparas para disparar. Te muerdes los labios sintiendo de una vez el impacto de la bala... Te quedas tranquilo, y disparas ante el rostro que te habla, es más que obvio que no le haces ni cosquillas, pero él tampoco puede atacarte, así que corres hacia una esquina, una especie de puerta secreta. Corres rápido en la misma dirección, el rostro te grita como un desesperado esperando a que vuelvas, pero tú ni siquiera te detienes a voltear. La oscuridad se apodera de tú campo visual, pero logras salir de la casa. Tú condición física te permite correr un tanto más, así que no lo piensas dos veces, siguies corriendo entre los árboles a lo largo y ancho del bosque. No ves tú auto ni los borrachos, pero es notoriamente más tarde, probablemente sean las 5 de la mañana.


Después de tanto correr (Aproximadamente 2 kilómetros) te detienes para tomar aire recargando tus manos en tus rodillas. Alzas la mirada y sentado en una rama, logras ver a un demonio escualido, con una sonrisa macabra y unos cuernos que se asoman por encima del centro de su cabeza, éste demonio se lanza contra ti abriendo su boca y sacando a luz sus afilados colmillos.


Abres los ojos, pones las manos sobre el suelo quedando finalmente sentado, frente a ti se encuentra la misma casa de la que huiste hace un rato, y sobre tú pecho recarga una nota que dice: “No. Ahora debes intentarlo de nuevo, sólo que ahora sin margen de error”.


Escrito por Carlo Trejo.


¡Buenas noches!
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Descripción

UNa historia de terror escrita el 14/04/14 a las 12 de la noche.

Palabras Clave: Historia de terror Escrita Por Carlo Trejo 12 de la noche terror misterio casa abandonada a mitad de el bosque

Categoría: Cuentos & Historias

Subcategoría: Terror & Misterio



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